• Amorcito •

432 42 77
                                    

- Juggie. -sollocé en cuanto mi novio respondió mi llamada.

- Amor, ¿Por qué estás llorando? ¿Pasó algo? -preguntó preocupado.

- Juggie, e-es que. -sollocé. - Me pasó algo.

- Pero no llores así, mi amorcito, ¿Estas en la universidad?

- S-si.

- Respira conmigo mi amor. Vamos... Inhala, exhala. -lo hicimos juntos varias veces hasta que logré calmarme un poco y limpié mis lágrimas. - Ahora... ¿Quieres que vaya por ti?

- Estás trabajando.

- Puedo pedir la tarde libre.

Asentí. - Entonces si, Juggie. -hice un puchero aunque no me viera.

- Ya iré por ti. ¿Me esperas en la entrada?

Negué. - No.

- Pero amor-

- No puedo. -mis ojos se cristalizaron de nuevo. - Tienes que venir. -dije con mi voz entrecortada.

El suspiró. - Está bien. -asintió.

- Y trae tu chaqueta.

- Bien, ya salgo para allá.

Me quedé sentada allí, esperando a que mi novio llegase por mi. Estaba completamente sola en el salón, y la clase tenía al menos diez minutos de haber finalizado, pero yo me desplomé en cuanto todos se fueron.

Porque al levantarme de la silla para irme, noté que la silla estaba manchada debajo de mi de rojo, y por supuesto, el estar en esos días me hacía estar más sensible que nunca, por lo que me senté y cuando todos salieron no hice más que llorar.

Le indiqué en un mensaje a mi novio en que salón estaba yo, y luego de unos minutos el entró.

- Juggie. -no pude evitar que mis ojos se cristalizaran de nuevo al mirarlo.

El se acercó y me abrazó. - Te traje esto. -me tendió una bolsa.

Yo la abrí y frunció el ceño. - ¿Cómo..?

- Ayer lloraste sin razón y en la mañana estabas un poquito de mal humor, solo até cabos. -me sonrió acariciando mi mejilla. - ¿Cómo es que yo si me di cuenta y tu no?

- Se me olvidó. -suspiré. Mire la bolsa y sonreí. Toallas húmedas, compresas y las pastillas que siempre tomo para los cólicos.

Me levanté y el amarró su chaqueta alrededor de mi cintura para cubrir la mancha. Tomó una toalla húmeda y desmancho la silla, que por suerte era de plástico y no de algún material difícil de limpiar.

Me tomó de la cintura y salimos juntos de ahí, yo fui rápidamente al baño y luego fuimos hacia su auto.

Al llegar a nuestro departamento me di una ducha rápida y al salir me vestí con mi pijama de fresitas.

Me tiré en la cama y me envolví entre las sábanas, sin siquiera preocuparme por mi novio, seguramente estaba haciendo algo afuera y yo no tenía energía para ir por él.

El entró y sonrió. - ¿Tienes sueño, amor?

- Un poco. -asentí.

- ¿Quieres helado? Compre de fresa como te gusta, y también tus chocolates favoritos.

- Quiero los dos. -sonreí ampliamente.

El soltó una risita pero salió de la habitación, y haciendo caso a mi pedido regresó con el bote de helado, dos cucharillas y mis chocolates.

This Love | One Shots Bughead | +18Onde as histórias ganham vida. Descobre agora