Tallando el alma se esculpe una vida [Minsung]

Capítulo 16.

Los segundos del contacto se sintieron atemporales, un instante de anhelos.

Los labios de Minho llevaron toda la acción y dirección de aquel momento y tras ese instante el pelinegro se alejó lentamente, sintiendo sus labios separarse y despegarse levantando la mirada para buscar la de Jisung.

Estaba paralizado por completo.

Aún con los labios entreabiertos y manteniendo su espalda recargada en la pared en la que Minho lo había apoyado, el castaño estaba estático, con los ojos abiertos de par en par.

Fue cuestión de segundos para que su pecho comenzara a subir y bajar a la par de que su respiración se alteraba con brusquedad.

-N-no...- Cubrió su boca con sus manos.- No, no...- Finalmente conectó su mirada con la del mayor y lo señaló con fuerza.- ¡N-no! ¡No!- Lo empujó con brusquedad, quitándolo de su camino.

-Jisung...

-¡No!.- Retrocedió torpemente tirando las cosas a su alrededor al chocar.- ¿Q-qué fue...?- Sacudió su cabeza.- ¡No! ¡No!

-Escucha...- Limpió la comisura de sus propios labios con su pulgar.

-No puedes, no...- Seguia en shock.- ¡No debes! ¿¡Cómo pudiste!?

Intentó salir corriendo de la cabaña pero una vez más Minho fue más ágil y lo sostuvo del brazo.

-¿Es todo lo que dirás?

-¡No puedes!- Se quitó de su agarre.

-¿Qué cosa? ¿Hablas de besarte? Porque evidentemente sí pude.- Señaló levantando las cejas.

Jisung hizo la expresión más impactada que había hecho en toda su vida ¿Cómo podía ser el pelinegro tan desvergonzado?

-¿¡Por qué!? ¿¡Por qué harías eso?!- Cubría su boca de inmediato como si tratara de cubrir la escena del crimen.

-¿Quieres saber el por qué?- Su voz desbordaba determinación.- Te lo he dejado claro antes, no quiero ser tu amigo.

La mirada del castaño era una profunda mezcla de incertidumbre, con matices que Minho detectó a la perfección, no veía asco en su mirada, veía miedo.

-N...no, no.- Negó caminando en reversa hacia la puerta.

-Espera.- Volvió a sostenerle el brazo pero Jisung se safó de inmediato.

-F-fue un error y...

-No fue ningún error.- Se puso recto.- Y lo sabes a la perfección.

-No pasó nada, no...- Se detuvo en seco como si acabará de tener una revelación.- Eso es, no pasó nada...

-¿Qué?- Minho Frunció el ceño.

-No pasó nada.- Seguía cubriendo sus labios.- Eso... Eso justamente, no pasó nada y mañana todo será normal y...

-¿En serio piensas que puedes aparentar que no pasó?

-¿Pasar qué? N-no pasó nada.- Se dirigía a la salida.

-Tendrás que pensar en ello, no puedes solo ignorarlo.

-Me voy a dormir  y...

Minho lo acercó una vez más sujetándolo de la cintura, la primera reacción de Jisung fue intentar empujarlo, pero era débil ante él.

Aunque sus manos golpearan en pequeñas repeticiones el pecho del mayor, sus labios fueron quienes lo traicionaron al devolver por un segundo el movimiento al que le invitaba la boca del mayor.