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Hace 11 años...

Hace 11 años, una pequeña de cabellos oscuros y unos peculiares ojos rubí corría hacia la cabaña en la cual vivía con su madre, una joven bruja experta en posiciones y maleficios, así como en hechizos poderosos.

*Toc, toc*.

Se oyó en la única puerta.

X: ¿Quién es?

Habló con una sonrisa la madre soltera.

X: ¡Mamá, soy yo!

Rió detrás de la puerta.

X: ¿Quieres entrar? Tienes que decirle las palabras mágicas a la puerta.

X: ¡Ábrete, Sésamo!

Gritó la pequeña a la puerta, pero esta no se abrió. Intentó tres veces y no tuvo éxito. La madre del otro lado reía al ver a su hija intentar abrirla.

X: Si quieres abrirla, debes decirle lo que te enseñé.

La pequeña abrió los ojos y preparó su voz.

X: ¡Hm! ¡Hm! ... ¡aperta placet! (Traducción: ábrete, por favor)

Y, bien dicho, por arte de magia la puerta se abrió, dejando ver a su madre orgullosa de su logro.

Madre: ¡Oh, mi pequeña brujita! Lo abriste, bien hecho, mi pequeña...





Presente...

X: ¡Oye, Némesis! ¡Te estás olvidando de esta bolsa!

Gritó enojado el anciano del mercado del cual siempre iba a comprar la joven. Némesis dio vuelta su rostro bello y pálido con grandes ojeras.

Némesis: Oh... -tomó la bolsa- gracias...

Su expresión de desgana pero amable a veces confundía a las personas de su alrededor. ¿Era extrañamente adorable o extraña?

Anciano: Esta vez te la dejo pasar. La próxima me quedo con la bolsa -dijo con el ceño fruncido- ¡y no te dejo comprar más!

Némesis: -hace la vista para un costado- Está bien...

Después de decirlo, se alejó. El dueño del almacén miraba a la chica irse mientras suspiraba.

Anciano: Esa chica me saca de las casillas.

X: No entiendo, señor... ¿Por qué siempre dice lo mismo y aún así la deja comprar? -preguntó curioso.

Anciano: Mejor ponte a trabajar que en andar husmeando en las cosas de los demás, holgazán.

X: ¡Pero, señor!

El anciano le tiró una bolsa de papas y lo regañó. Más calmado, se puso a pensar en Némesis, una chica tan joven pero tan sola.

Anciano: *Parece que tiene más de una marca...*

Flashback

Anciano: ¡Oye, Némesis! ¡Te estás olvidando esta bolsa!

Némesis: Oh... -tomó la bolsa- gracias...

El anciano abrió los ojos al ver que en su cara se podía ver una línea negra algo mal tapada con maquillaje.

Fin del flashback

Anciano: *Tiene más de una marca... ¿Será tan poderosa como su madre?...*

Aquel anciano recordaba a la madre de la joven. Era buena y amable, generaba un aire de confianza y alegría, mientras que su hija solo inspiraba desconfianza y depresión. El anciano sintió un escalofrío y decidió que sería mejor que trabaje




💫   𝕬 𝕶𝖎𝖓𝖉 𝕺𝖋 𝕿𝖍𝖊 𝕸𝖆𝖌𝖎𝖈  💫 (𝙰 𝙺𝚒𝚗𝚍 𝙾𝚏 𝚃𝚑𝚎 𝙼𝚊𝚐𝚒𝚌)Where stories live. Discover now