Durante una lucha con una maldición de primer grado con la habilidad de crear portales, itadori caería en uno que lo mandaría al mundo pokémon.
¿Su objetivo? Encontrar la manera de volver a su mundo.
(es mi primera historia, así que perdón si la jus...
Itadori se despediria del décimo entrenador que ha vencido desde que entró al bosque verde, hasta el momento todos los entrenadores que retaban a itadori aceptaron su petición de luchar el en lugar de algún pokémon, algunos no les importo y con otros tuvo que ser algo insistente pero el resultado era el mismo, los combates duraban menos de 5 minutos y todos los pokémon eran noqueados de un solo golpe, en total itadori había obtenido unos 6300 yenes en total.
Itadori: (perfecto, con esto podré pagar un lugar para dormir hoy, la comida, comprar ropa nueva y tal vez mandar a arreglar mi uniforme, esto de los combates pokémon si que deja) ¿hmm?
Itadori llegaría al final del camino viendo un letrero que decía "bienvenido a ciudad plateada".
Itadori: ¿ciudad plateada? Vaya nombres que le ponen a las ciudades en este mundo, oh es cierto.
Itadori sacaría la pokeball de temoro de su abrigo y sacaría a temoro de esta misma.
Temoro: -bostezo- ¿Porqué me levantas? estaba muy agusto dormidito.
Itadori: ya levántese flojo, es mediodía, ya terminé de luchar con algunos entrenadores, vamos a ir a ciudad plateada.
Temoro: ¿Y cómo te fue? ¿Cuánto ganamos?
Itadori: ese "ganamos" me suena a manada.
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Temoro: ¿Qué? Si fue mi idea que lucharás para ganar dinero, si no fuera por mi aún estarías buscando trabajo en ciudad verde y sin dinero, velo como un 50 50, yo soy la mente y tú los músculos
Itadori:
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Creo que mejor te hubiera dejado dormido en la posada.
Temoro: jajaja , pero no puedes, eres buena persona y jamás dejarías que algo malo me pase, en el fondo ya me tienes cariño.
Itadori: -sonriendo- JAJA, tienes razón, aunque apenas llevo un día de conocerte, ya te considero alguien importante, y ten por seguro que jamás dejare que algo malo te pase. -abranzandolo- (nunca más)
