No Hay De Que Temer. Libro II (Trilogía) [Los Sueños de Dios]

46| No es culpable

Capítulo dedicado a Star_Pearl2 un fuerte abrazo y MUUUCHAAAS BENDICIONES 💖

Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones.
Jeremías 1:5

Martes 24 de Mayo

Los investigadores ya habían empezado su trabajo. Habían pasado tres días después de la reunión en la bodega, que por cierto ya estaban remodelándola.

Jimmy, Jireh y Oliver tenían algunos sospechosos. Entre ellos estaba André, los compañeros de trabajo de Hellen, los vecinos, Tahís. Estaban haciendo todo lo que podían para encontrar a esa persona.

Jireh estaba muy preocupada, a veces sus ojos le fallaban y veía borroso, pero aún así seguía con la investigación. No quería dejar de ayudar a su amiga, no le importaba lo que costara, ella iba a ayudar.

En el caso de Sahúl, seguía sintiendo que lo perseguían, los últimos tres días había encontrado a la mujer del restaurante. Cada vez que la veía sentía mucho miedo, un miedo que nunca antes había sentido.

****

Sahúl estaba en el hospital, junto con Kelly, ahora se mantenían más juntos que antes.

—es extraño —dijo Kelly —¿no crees que Grethel tenga que ver en esto?

—no lo sé, pero a veces pienso que sí. Hoy tampoco vino —Grethel no había llegado los dos últimos días, después de que encerrara a Sahúl en el baño no lo podía ver a los ojos,  era como si estuviese avergonzada por lo que hizo. Entonces ¿Por qué lo hizo? Eso mismo se preguntaba Kelly.

—Sabes, Linda —dijo Sahúl muy pensativo sin darse cuenta que le había dicho linda a Kelly, Kelly se sonrojó, pero el moreno no tuvo tiempo de escuchar lo que había dicho pues se había acordado de algo —el día que me encerró en el baño, Grethel dijo que no la dejara, que todos lo hacían, pero que ella no quería hacer eso y no completó la frase.

—¿Crees que alguien la obligue?

El moreno se encogió de hombros.

—Si es así ¿Por qué con vos?

Ambos se quedaron pensando.

****

Jimmy llegaba a su casa, iba cansado del trabajo. Cuando entró no imaginaba encontrarse con su mamá, estaba ella y sus dos hermanas menores. Cada vez que Jimmy llegaba era como si en esa casa nadie lo conociera, ni si quiera su propia madre. En cambio sus hermanas no le podían ni hablar porque su mamá las regañaba.

Bella y Aurora, estaban cabizbajas, tristes.

—Siéntate —ordenó la mujer, era muy alta y tez blanca —Como es eso que estás ahora son cristianas.

Jimmy se quedó en silencio por un momento e hizo una corta oración en su mente pidiéndole a Dios las palabras correctas de modo que no ofendiera a su mamá.

—Mamá, ellas tomaron la decisión yo solo las apoyo.

—Si mami —dijo Aurora — Jimmy ni si quiera nos invitó y...y aunque lo hubiese querido hacer, no lo hizo porque no quería que te molestaras.

La voz de Aurora se quebraba mientras hablaba.

—Es cierto, Jimmy no tiene la culpa... Creo que deberías dejar de ser dura con el... Mostrar un poco más de cariño ¡Es tu hijo! —Mencionó  Bella.

—¡No lo es! Y nunca lo va a ser —dijo clavando sus ojos en Jimmy, lo veía con desprecio, como si su hijo fuese su enemigo.

El corazón de Jimmy se rompía en pedazos al escuchar a su mamá.

—Entonces... Si no consideras a Jimmy cómo tu hijo, tampoco nos consideres hijas —Bella se había molestado y Aurora lloraba.

—¿Es que no lo entienden? Este su hermano —dijo haciendo comillas con los dedos —fue producto de una violación YO NUNCA LO QUISE TENER.

Jimmy bajó su cabeza, trataba de no llorar, sus manos temblaban.

—¿Te has puesto a pensar si el quiso venir aquí a este mundo? el tampoco pidió venir, sin embargo aquí está.

—No me hables así, recuerda que eres mi hija —dijo elevando la voz.

—Y tú... Recuerda que ... Eres nuestra madre... recuerda que fuiste el instrumento por el cual hoy estamos aquí... Recuerda que solo fuiste eso, un instrumento. Si Dios ama a Jimmy ¿Por qué tú no lo vas a amar? ¿Eres más que Dios?

La mujer no dijo nada y se fue de la sala.

Jimmy seguía cabizbajo, tenía las manos en su rostro. Aurora se acercó y lo abrazó.

Bella le siguió.

—Gracias... Pero no sé tenían que pelear.

—Lo sé, pero la única manera que entienda es que le digamos la verdad.

Pronto llegó la hora de dormir y todos se fueron para sus habitaciones. Jimmy revisó su móvil, Alon le había dejado un mensaje.

Hola Jimmy ¿Podríamos vernos mañana?

Si, claro. Mañana en la iglesia.

Yo me refería a antes del servicio, si puedes. Tengo algo que compartirte.

Mareo, náuseas, nervios, todo eso y más sintió al leer el mensaje. Esa noche no dormiría.

N|A

Dios les bendiga, solo quiero decir que espero estén listos para lo que se viene...