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Regreso

Tras varias semanas de descanso, Enid no pudo evitar sentir una pequeña desesperación por que sus vacaciones terminaran. Ella no quería estar en su casa, deseaba pasar el día en Jericó con sus amigos, ver películas de terror en su laptop con Merlina y disfrutar su estancia en Nevermore.

《Merlina.. ¿Qué estarás haciendo?》 Se preguntaba todos los días, esperando alguna respuesta del viento. Respuesta que nunca consiguió.
El ambiente violento en su hogar era cada vez más recurrente, su madre, Esther, tenía problemas de ira muy constantes. Aquellos problemas la llevaron a varios temas legales, acusaciones de robo, agresión física hacia personas inocentes. La mala reputación que ganó la familia Sinclair por culpa de su madre fue masiva, a tal punto de que los hermanos mayores de Enid tuvieron que cambiarse de escuela.

Enid, por otro lado, estaba libre de la mala reputación. Por primera vez estaba agradecida de que su madre negara su existencia frente a la prensa, pues, su madre era reconocida como una doctora muy importante en San Francisco.

Eventualmente, Enid cada vez se sentía peor en su casa, nadie se había dado cuenta de que ella había llegado a la mansión hasta dos semanas después, cuando su hermano mayor, Kent, hizo un llamado familiar para presumir su logro, se había vuelto dueño de una clínica de rehabilitación. Su presencia asombró a casi todos, menos a Eshter.

Cuando su padre, Murray, vió las cicatrices en su rostro quedó asombrado.

-Enid, cariño.. ¿Qué te pasó? ¿cuándo llegaste? ¿Qué haces aquí?

Enid sintió como su corazón latía tan rápido como su respiración. Sentía una ira impresionante, algo que se reflejaba en sus ojos.

-¿No saben? Hubo un ataque en Nevermore y..

-Fuiste una de las atacadas por ser una inutil ¿No es así? por eso tus cicatrices en el rostro.- Interrumpió Esther.

-No, de hecho, yo derroté a el Hyde.- Enid apretó con fuerza sus puños, sus nudillos estaban completamente en blanco debido a la fuerza que estaba haciendo.

-¿Tu? Por favor, Enid. Aquí todos sabemos que no eres capaz de hacer algo extremo, eres inutil sin poder transformarte.

-Esther, por favor.- Protestó Murray. -Deja que Enid nos cuente qué hizo, tal vez.. tal vez ella no necesitó ser una mujer lobo para ser fuerte.

-Madre, con todo respeto pero, yo logré transformarme.. en luna roja.- Dijo Enid con orgullo, dejando a todos los Sinclair callados y sorprendidos.

-Menos mal, cariño..- Murmuró Esther. -¡Al fin eres una Sinclair!

Esther abrazó a Enid con fuerza, asfixiando poco a poco a la Joven de ojos azules.

-Escúchame bien, Enid.- Susurró en la oreja de Enid. -Si la próxima Luna llena no te transformas, te saco de la familia Sinclair.- Apretó su agarre. -Adiós estudios, Adiós sueños infantiles.

Enid se tragó sus palabras y asintió con una sonrisa. Enid amaba los retos, los adoraba, le recordaban a Merlina. Pero esta vez, Enid no quería tener que vencer ese reto, ella deseaba haberse quedado callada.
Murray obligó a todos los Sinclair a Celebrar el logro de sus dos hijos mayores, Kent y Enid Sinclair. Kent se sentía orgulloso de él mismo, mientras que Enid deseaba celebrar su logro con personas que realmente estuvieran orgullosas de ella. Ella pensaba en Merlina.

Recordaba con detalles la mirada de admiración de Merlina segundos después de salvarla, recordaba la sensación de su abrazo, de sus brazos. Enid extrañaba a Merlina como un cachorro a su dueño, sentía que los pocos días que le faltaban para volver a Nevermore se habían vuelto años, siglos. Sin embargo, con cada hora que pasaba ella sentía emoción, con cada día ella se ilusionaba más y más.

Mi insufrible crimen. ||Wenclair||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora