En sus Garras [ Hisoka x Reader x Illumi]

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— Eh?! Por queeeé... ? — tiemblo entera mientras alargo mi propia pregunta y así evitar responder.

Nos miramos por lo que parecieron siglos hasta que Illumi abrió la boca para hablar.

— Ya sabes... esto de preocuparme por tu seguridad... te gusta? —

Qué rayos había dicho? oí mal o en vez de preguntar si me gustaba Hisoka dijo algo sobre preocuparse por mi?

Mis pulmones se relajaron audiblemente, dejando salir un suspiro que no tenía ni idea de que estaba reteniendo.

Lo miré sin realmente saber qué decir, pero increíblemente me sentí aliviada, mas aliviada que en mucho tiempo.

— Bueno... — volví a mirar los cuerpos sin estar muy segura de si el asesinato significa preocuparse por mi — Es lindo que hayas venido en mi auxilio — le sonreí — Aunque... no sé que tan legal sea esto — apunté a los cuerpos en el suelo.

— No te preocupes, tanto Hisoka como yo somos cazadores, se nos está permitido, tomar la justicia en nuestras manos —

Claro! justicia. Como más podría escusarse alguien que hace del asesinato su principal fuente de ingreso. El tipo en el suelo era un idiota, pero aún así no sé si merecía... morir.

— Entiendo — asentí sin mucho animo de contradecirlo.

— Ven, regresemos — Illumi tomó con suavidad mi hombro conduciéndome hacia el gentío.

— Y aparte de ese desagradable encuentro, te haz divertido? — preguntó y supe inmediatamente que algo no andaba bien. Illumi se estaba comportando raro. No lo conozco de toda la vida pero estas semanas  con él me dan una idea de la clase de persona que es y este comportamiento "amable" no era propio de él.

— Mas o menos — respondí — hay demasiados ebrios y al parecer Hisoka dejó entrar a cualquiera... qué hay de ti? — no pude evitar achicar mis ojos al preguntar, quería ver de cerca, qué me estaba ocultando.

— Bastante bien! me he divertido mucho — él me sonrío y me quedé perpleja. 

El despiadado asesino, de rostro inmutable, Illumi Zoldyck, estaba sonriendo. No con una pequeña o extraña sonrisa compungida, sino con una tan ancha y grande que se le hacían hoyuelos en sus perfectas mejillas.

Qué rayos estaba pasando?

De pronto, lo supe, esto debía ser obra de la enana pelirosa, quien mas?

La sensación de todo esto, era tan extraña en mi interior. 

Como si por un lado sería bueno para mi, que él frecuentara a otra chica y luego, me sentía tan ridícula al respecto, como si mi orgullo de mujer estuviese en juego. No era suficiente mujer para Illumi, si él estaba viéndose con alguien mas. 

Sé que era una estupidez pensar así...

Pero francamente no entendía qué me estaba sucediendo...

Podía palpar mis posesividad en Illumi y odié el sentimiento! Sobre todo porque, cuando llegamos con Chrollo y los demás y divisé a Hisoka metido entre ellos, mi corazón no pudo evitar volverse loco. 

Me estaba convirtiendo en una desvergonzada. Está vida me estaba transformando en algo que se suponía yo... no era.

— Y/N!! donde rayos te habías metido?! te buscamos tanto!! — Claudia y Maggie se me acercaron sonriendo. Claudia tan enérgica y amable como siempre. Se me encogió el corazón al entender lo descarada que había sido, al devolverle el beso a su hombre.

— Hey!! Sí... — dije emulando su entusiasmo — Me perdí... en la casa... — sonreí inventando lo obvio — Hisoka tiene... una gran... po - o-oblación?... en su casa... —

— Población? — Claudia miró hacia el cielo como analizando la palabra, mientras Maggie sonreía indulgente. Era como si supiera que lo que yo estaba diciendo no tenía ningún sentido, pero me lo perdonaría para no hacerme sentir mal. En mi defensa sólo diré que mi cerebro enhebró solo la oración después del sujeto, todo porque no creo que olvide jamás lo que Hisoka esconde debajo de sus pantalones.

Entonces seguí inventando cosas.

— Sí!, ya sabes su casa es grande como una población... puedes perderte en ella...

— Oh sí! entiendo — Claudia se emocionó al entenderlo... suspiré, porque estaba a salvo

— Sé a qué te refieres! — dijo entonces una chica de anteojos y cabello negro y corto que no recordaba haber visto con anterioridad y que estaba relativamente lejos de nosotros. Cómo escuchó? ni idea!. Sólo entonces noté como había gente nueva en los sillones, junto a Chrollo —... Fue un lío regresar desde el baño al patio — prosiguió la chica.

— Eso pasó Shizuku, porque de seguro olvidaste donde estábamos — le debate un hombre grande de aspecto tranquilo y enormes cicatrices en la cara.

— No es cierto! yo nunca olvido nada!! — se queja ella, mientras le daba pequeños sorbos a su coctel.

— Por supuesto que no! — dice otro hombre igual de grande que el anterior, pero con una mirada y un timbre de voz mucho más salvaje y rudo — Shizuku no lo olvida, sólo no lo recuerda! — Todos los hombres presentes se echaron a reír, mientras esta chica, Shizuku los miraba sin comprender.

Le sonreí a la chica a modo de empatía, recordando haber oído hoy su nombre. Creo que era una de las amigas que se suponía no iban a venir.

Los amigos de Chrollo, parecían mucho mas relajados que cuando llegamos por la tarde, al parecer todo gracias a estas nuevas personas que compartían junto a ellos.

De pronto Chrollo se acercó a Illumi mientras yo hablaba con las chicas y lo abrazo por el hombro como si fueran compadres.

— Y Zoldyck, dime, que tal la nueva droga? puso tus sentidos a volar? —  Illumi sonrío de oreja a oreja, con la mirada casi perdida.

— Seeee!! se siente genial! puedo decir, que este es lejos el mejor viaje que he tenido... —

Entonces supe a cabalidad que Illumi estaba drogado y eso explicaba mucho de su comportamiento.

— Entonces, Danchou! quien es la señorita nueva?! — la voz del hombre salvaje se sintió fuerte e imponente y por un momento hizo que todas las miradas volaran a mi. Incluida la de Hisoka quien levantaba una ceja hacia mi casi escéptico.

— Oh sí! olvidé presentarla, ella e— Chrollo fue cortado en ese mismo instante.

— Es la puta de Illumi... — dijo en su lugar Machi , tan cortante y desagradable como creo que solo ella puede ser.

Sonreí con dulzura para todos. Que caso tenía discutir con ella sobre lo que yo era o no era.

— Soy Y/N! — levanté mi mano, presentándome para que a nadie le quedaran dudas acerca de mi nombre.

El hombre grande y musculoso me miró como si fuera un pedazo de carne y creo que sólo entonces entendí que estaba mostrando demasiado, después de todo seguía en bikini.

— Soy Uvo, el hombre mas fuerte en esta compañía, un experto en el combate cuerpo a cuerpo — él se saboreo los labios y yo casi no podía creer que coqueteara conmigo tan abiertamente.

— Ok — fue todo lo que dije mientras volvía mi mirada a Illumi, tirando de la manga de su camisa para que me prestara atención. 

La droga de Chrollo lo había dejado realmente estúpido.