♡ : CAPÍTULO XXVIII

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Jeongin entro a la clínica con un Hyunjin respirándole en la nuca. Apretó los papeles en sus manos intentado no girarse para decirle que se perdiera y armar un escándalo. El representante de Hyunjin, Diego, miraba todo con una pequeña sonrisa mientras caminaba al lado de ellos.

Luego de un rato de revisar la cita y el horario, de entregarle los papeles a la secretaria ya que estos habían llegado de Corea hacia dos días por parte de su antiguo obstetra con toda la información que se debía tener acerca de su nuevo y antiguo embarazo, todo por si las dudas.

Cinco minutos después fue llamado en nombre de "Hwang Jeongin" cosa que le hizo fruncir el ceño extrañado, se puso de pie pensando que al menos podría deshacerse de Hyunjin unos minutos. Error, el más alto se levantó más rápido que él cuando fue llamado y abrió la puerta dejándolo pasar.

Diego miro a Jeongin diciéndole que tomará una respiración y eso hizo para luego entrar. Un hombre de edad media se presentó ante ellos como el Doctor James Smith, Jeongin sonrió correspondiendo el saludo.

—Bien Jeongin, ¿sabes bien inglés?

—Algo. —respondió con voz baja sonriendo. Su pronunciación era de lo mejor, pero en cuanto a su diccionario de palabras... Esté era bastante limitado.

—Bueno, al menos tenemos al padre aquí. —miro a Hyunjin con una sonrisa el cual la devolvió. Estaba al lado de Jeongin mirando la habitación, totalmente fascinado.

El doctor hizo unos movimientos para luego acercarse con el viejo enemigo de Jeongin, recordaba a los 17, su primera ecografía y sentir ese espeso líquido frío en su vientre fue sorprendente.

—Bien Jeongin, ¿Listo, o no es el primer embarazo?

Jeongin tomo una pequeña respiración y le dedico un intento de sonrisa, nunca dejaba de ponerse nervioso en esas cosas.

—No es el primero, pero nunca se está listo Doctor. —dijo como pudo.

El doctor soltó una risita y aplicó el líquido azul en su vientre mientras comenzaba a hacer movimientos. Miro a Hyunjin.

—¿Y el primer hijo?

—Es una niña, está en el colegio. —respondió Hyunjin sonriendo, debía admitir que también estaba nervioso. Maldición, era su primera vez viviendo esto.

—Oh, una princesa. —sonrió el doctor continuando con los movimientos. —¿Es pequeña?

—Tiene seis.

—Una niña grande. —sonrió y luego miro a la pantalla arreglando sus lentes. —Oh, oh, que vemos aquí.

Hyunjin se removió incómodo y Jeongin no tardó en notar sus movimientos preocupándose al instante.

—¿Qué pasó? —pregunto incorporándose un poco.

—Hyunjin...

—Parece que tenemos una sorpresa aquí.

—¿Qué pasa doctor? —pregunto Hyunjin con voz preocupada.

—Aquí. —señaló en la pantalla. —Y aquí. —señaló un poco más allá. —Corazones. —los miro sonriendo.

—¿Q-Qué? ¿Dos corazones? —Hyunjin entrecerró los ojos y maldijo no llevar sus lentes normales ni los de contacto. —¿¡Va a tener dos corazones!? —gritó cayendo en cuenta.

—No, no. —el doctor soltó una risa. —Tendrán dos bebés, felicidades.

Hyunjin quedó totalmente pasmado con la nueva información. Sabía que su vista estaba del asco y que sus ojos eran pequeños, pero en ese instante tenía los ojos realmente abiertos por la sorpresa.

—Hwang Hyunjin. —Jeongin pellizco su brazo haciendo que se quejará y lo mirara, el chico le dedicaba una mirada enojada. —¿Qué diablos te sucede? ¡Te estoy hablando! ¿Qué pasa? —Jeongin sonaba bastante preocupado ya que no había entendido nada.

—Innie. —Hyunjin tomo sus manos. —Vas...—negó con la cabeza. —Vamos, vamos a tener dos bebés.

Jeongin se quedó en silencio por varios segundos para luego mirar la pantalla.

—No. Digo, si, Jara y el nuevo bebé...

—No, dos bebés más. —sonrió. —Son gemelos amor, vamos a tener dos bebés más.

Jeongin abrió sus ojos y boca sorprendido señalando la pantalla y luego mirando al doctor.

—¿Dos? —pregunto en un susurro ahogado. —¿Dos bebés?

El doctor asintió con una sonrisa.

—Si, definitivamente hay dos corazones latiendo ahí.

Jeongin termino sentándose completamente mirando de Hyunjin a la pantalla con los ojos llenos de lágrimas.

—Hyunjin...

—Bebé. —dijo con una sonrisa.

—Tres hijos. —susurro mirando la camilla donde estaba recostado hace un rato. Alzó la mirada. —Vamos a tener tres hijos.

—Es un milagro, es... Genial. —lo abrazo para luego besar sus labios cuando escucho al doctor decir que iría por las fotos de la ecografía.

Jeongin aún estaba en estado de shock, sorprendido, sin creer lo que escuchaba, feliz, triste, enojado, con ganas de matar y ganas de vivir.

Definitivamente Hyunjin siempre era una sorpresa en su vida.

Jara ❁ HyunInWo Geschichten leben. Entdecke jetzt