¿Una Ultima Oportunidad? (omegaverse)

¿El inicio?

Katsuki habia ganado mucha popularidad dentro de la universidad U.A. al ser un Alfa dominante, un gran atleta, formaba parte de varios deportes, pero debido a su explosivo carácter prefería los deportes individuales, natación era su favorito, salía de una práctica, iba platicando con un par de omegas y un beta que le coqueteaban descaradamente, por alguna razón a Katsuki le gustaba aquello, le subía el ego aunque su alfa interno se la pasara gruñéndole todo el tiempo pues le decía que no respetaba a su omega.

Y no es que al gran Bakugo Katsuki no le importara su omega, lo amaba con locura desde que supo que eran destinados en la secundaria, fueron inseparables, pero, siempre fueron ellos dos, al llegar a la universidad ambos iban a distintas carreras, aunque los edificios de ambos estaban a no mas de diez minutos a pie.

Los edificios de la carrera de psicología donde estudiaba su omega quedaban frente a la carrera de biotecnología donde él estaba.

Iba tan metido en la plática que no había visto a lo lejos como el ser mas hermoso para él caminaba con pasos erráticos y vista borrosa hasta que sus fosas nasales llego aquel aroma que lo volvía loco pero algo andaba mal, el delicioso aroma a Avellana con Vainilla estaba mezclado con una enorme carga de miedo y ¿sangre?.

Quien reacciono mas rápido fue el alfa interno quien gruño al sentir la combinación de aromas, tomo el control del cenizo y corrió a donde estaba su omega, cuando cruzaron miradas o un intento de estas, el pequeño omega comenzó a ver mas borroso aun su entorno, y la figura de Bakugo Katsuki se volvía difusa ante sus ojos.

—Kacc... —murmuró, sin poder decir más, se había desmayado.

Antes de que tocara el suelo el Alfa lo sostuvo entre sus brazos sintiendo el terror y miedo recorrer todo su cuerpo, su omega estaba lleno de golpes, moretones, y había demasiada sangre en todo el pequeño y frágil cuerpo, notó que su respiración estaba comenzando a ser más débil y el hermoso color de la piel de porcelana estaba cada vez más pálida.

Izuku estaba teriiblemente mal, "¿Pero que demonios le paso?, ¿Quién se atrevió a tocar siquiera un cabello de su omega?", su alfa estaba furico si lo compararan con algo un volcán en erupción era lo mas cercano, su aroma dominante estaba expandiéndose por todo el lugar impidiendo que alguien se acercara, los dos omegas terminaron inconscientes por el peso de las feromonas, el beta decidió correr para buscar ayuda, sabia que un Alfa en ese estado sería imposible que alguien se le acercara a el y menos al omega, que a lo que vio necesitaba ayuda urgente.

El beta regresó rápidamente con ayuda, trayendo consigo a varios profesores que también eran betas, intentaron acercarse, pero el gruñido advertencia que broto desde el pecho del Alfa lo evito, uno de ellos desde la distancia con las manos alzadas llamo la atención del Alfa.

-Tranquilo Alfa, estamos aquí para ayudar a tu omega, necesitamos llevarlo al hospital para que lo traten cuanto antes o – no pudo continuar el aroma era demasiado pesado que también empezaba afectarlos a ellos.

-NADIE TOCARA A MI OMEGA – Amenazo el cenizo estaba fuera de si y sus instintos protectores lo estaban dominando.

El beta iba a decir otra cosa pero notó que un colega estaba preparando una ampolleta y entiendo lo que debía hacer.

-No queremos dañar al omega, Alfa, pero es necesario que reciba la atención médica, solo mira la condición en la que se encuentra – estaba hablando para llamar lo más que podía la atención y enfocarlo a su omega para darle tiempo a su colega de disparar la ampolleta tranquilizante

El profesor lanzó la ampolleta tranquilizante con precisión, y esta alcanzó el hombro, liberando una sustancia que rápidamente empezó a surtir efecto. El alfa gruñó de sorpresa y molestia al sentir la picazón en el lugar donde había sido alcanzado, pero su resistencia se desvaneció rápidamente. Sus ojos se nublaron, y sus piernas cedieron perdió el conocimiento.

Los profesores se acercaron rápidamente al ver que el alfa había quedado inconsciente - Vamos, el omega necesita atención médica urgente – comentó mientras lo tomaba y checaba sus signos vitales – respira con dificultad, sigue perdiendo mucha sangre – se dio cuenta de la grave herida que tenia en un costado, fue atacado con algún tipo de arma blanca

- Si no lo ayudamos ya el alumno morirá, lo llevare a la hospital de la facultad de medicina – apremio quitándose la camisa para romperla y hacer un torniquete alrededor de la herida, lo tomo en sus brazos y salió corriendo no sin antes – lleven al Alfa a su departamento y no dejen que salga, cuando despierte no sabemos cómo se pondrá.

El cenizo fue llevado a su departamento estudiantil y lo dejaron encerrado, hasta asegurarse que se tranquilizara para hablar sobre su omega.

Mientras tanto los médicos intentaban estabilizar al peliverde, que había llegado en estado crítico.

Un interno salió a informar del estado al profesor que lo llevo - ¿Profesor? – Llamó – el paciente ha perdido demasiada sangre, tuvieron que hacerle varias transfusiones el problema radica que su tipo de sangre no es compatible con cualquiera, es posible que necesitemos más, un colega ya fue a solicitarla al banco de sangre pero ocuparemos donantes, para reponerla – comentó – su estado es muy delicado, no sabemos si podrá pasar la noche, ¿ya le avisaron a sus familiares?

La voz del profesor se quebró al escuchar la noticia. No había previsto que la situación de Izuku fuera tan crítica. Asintió con gravedad y respondió, tratando de mantener la compostura. - No, sus padres viajan mucho y tenemos entendido que ahorita no están en el país, pero vere como contactarme con ellos.

En ese momento un par de jóvenes llegaron corriendo - ¿Usted es el profesor que trajo a Izuku? – pregunto una omega castaña - ¿Cómo esta?

-¿Ustedes son amigos? – preguntó el profesor

-Izuku es mi medio hermano – respondió la omega

El profesor asintió y les explicó la situación actual de Izuku. Les informó sobre la necesidad urgente de donantes de sangre, a la omega le fallaron los pies y estaba a punto de caer, pero fue sostenido por quien la acompañaba.

-Ochaco debes tranquilizarte esta situación no ayudará a Izuku

-Pero, Shoto, mi hermano está debatiéndose entre la vida y la muerte – sollozo escondiéndo su rostro en el pecho del Alfa

Shoto Todoroki, un Alfa dominante hijo de una de las familias mas influyentes del país, continuó abrazando a Ochaco para darle apoyo emocional. Miró al profesor - Haré lo que sea necesario para ayudar a Izuku. Si necesitan donantes de sangre, llamaré a mi padre para que busque donantes.

-Por favor sálvenlo – suplico Ochaco

El practicante asintió – Haremos todo lo posible para salvarlo – luego se retiro

-Todo es culpa de este alfa Idiota – reprocho Ochaco con ira y dolor, al mismo tiempo que Tsuyu una beta, Shinso un Alfa y Tenya también Alfa llegaron.

Los tres vieron a Ochaco destrozada aun sin soltarse del abrazo de Shoto.

-Ese maldito Alfa sabia que estaban maltratando a Izuku solo por ser su omega y se hizo de la vista gorda porque le gustó la atención que estaba recibiendo, pero juro que si mi hermano se muere, yo misma me encargare de matar a Bakugo - amenazo