Petits amours - Shin Soukoku [FINALIZADA]

Luces del pasado

Un auto se detuvo en frente de la pareja y Atsushi pudo reconocer el auto de su mánager. 

El hombre salió del auto y esto provoco que instintivamente Atsushi se alejara un poco de Ryuunosuke.

– Atsushi-san ¿Ya han terminado la grabación? – Cuestionó al llegar junto a ellos.

– Eh si, Kikuchi-San.  – Dijo tímidamente.

– Maravilloso, entonces vamos. – Le dijo con alergia.

Atsushi quería al su mánager, aunque a veces hiciera cambios repentinos en su agenda.

– Disculpe, Kikuchi-San ¿Verdad? – Cuestión Ryuunosuke.

– Oh que vergüenza, soy Kikuchi Kan¹, mánager de Nakajima Atsushi-san. – Se presentó, haciendo una reverencia y mostrando su tarjeta de presentación.

Ryuunosuke también hizo una reverencia y acepto la tarjeta.

– Akutagawa Ryuunosuke, amigo de Atsushi. – Dijo.

– Claro que conozco su trabajo, Akutagawa-san. – Le dijo risueño.

– Kikuchi-San, lamento si es un inconveniente, pero he invitado a Atsushi-san a tomar un café y ponernos al día ¿Podría permitírselo? – Pidió con amabilidad.

Atsushi se sintió como en un drama, en donde el chico le pide a los padres de la chica permiso para salir.

¿Por que él era la chica?

– Oh... No hay nada en su agenda hoy, estaría bien si Atsushi-san está de acuerdo. –

El idol se quedó congelado ante la pregunta ¿Estaba de acuerdo con salir a solas con Akutagawa Ryuunosuke, el amor de su infancia? No estaba seguro.

Aún así asintió lentamente sin saber porqué.

Su mánager entonces le encargó a Akutagawa que dejara a Atsushi en su casa y nuevamente se sintió como una protagonista de drama coreano.

¿Por qué él era la protagonista?

El auto del hombre se alejó a la distancia y Ryuunosuke lo guió a su propio auto. Hasta tuvo la amabilidad de abrir la puerta para Atsushi y este nuevamente pensó en un drama coreano.

Tal vez tanto actuar en ese país había afectado a Ryuunosuke.

Si debía ser eso.

Akutagawa subió al asiento del piloto y empezó a conducir, sin darse cuenta que las cámaras curiosas de los paparazzi ya habían captado ese momento entre ellos.

Ryuunosuke cerró la puerta del auto con elegancia, y el silencio llenó el espacio entre ellos mientras se alejaban de los estudios de grabación.

A pesar de los años transcurridos desde su última interacción, la conexión entre Ryuunosuke y Atsushi era palpable.

Las luces de la ciudad iluminaban el camino mientras Ryuunosuke conducía con destreza. Atsushi, sentado a su lado, luchaba por romper el hielo.

— Ryuunosuke, ha pasado tanto tiempo. — Comenzó Atsushi, rompiendo finalmente el silencio.

— Sí, Atsushi. No pensé que volveríamos a encontrarnos de esta manera. — Respondió Ryuunosuke, con una sonrisa nostálgica.

Las palabras fluyeron con mayor facilidad a medida que compartían anécdotas de los tiempos de "Pequeños Detectives".

Recordaron risas compartidas, ensayos agotadores y las aventuras detrás de escena. El reencuentro los llevó a una agradable cafetería donde continuaron la charla.