Izuku: Bienvenida Eri.
Eri: Papá..
Izuku: Así es Eri, regrese.
La joven albina dejó tiradas sus cosas y fue corriendo a abrazar a su padre mientras lloraba, había pasado mucho tiempo desde que lo vio, y apesar de que cuando el no estaba hacían videollamada no era lo mismo que tenerlo frente a ella.
El abrazo había durado un buen rato, aparte de el regaño que eri le estaba dando a izuku por haberse ido son avisarle en primer lugar, este estaba de rodillas frente a la joven mientras está lo regañaba y le daba un que otro golpe leve.
Esto era visto por Douki la cual había salido a ver que había sucedido, tenía una gota de sudor en su cabeza mientras miraba como la joven albina regañaba a su pareja.
Douki: ah, izuku sucedió algo?
La peliblanca escucho aquella suave voz, no parecía ser alguien que conociera, así que giro su cabeza viendo allí a la mujer.
Eri: Quien es usted?
Douki: ah, pero donde estaba mis modales? Mucho gusto jovencita, mi Nombre es Douki y soy la novia de Izuku y tu eres?
La albina no sabia que decir en ese momento, que acababa de decir esa mujer? Era la novia de su padre? Y no se lo había contado? Ahora si estaba más enojada con el, aunque también quería correr contra Douki y hacerle miles de preguntas.
Izuku: Esta noche si que será larga.
Pensó el peliverde mientras una gota de sudor bajaba por su cabeza debido a su nerviosismo.
Y así el peliverde paso el resto de la próxima hora arrodillado mientras que Eri hablaba un poco con su pareja, aunque se le notaba algo incomoda, más que todo porque sabía lo que su ex le había hecho a su padre y temia de que pudieran hacerle lo mismo.
Apesar de su preocupación solo basto un par de horas para darse cuenta de que ella no sería asi, más que todo por como les contó como se conocieron, se enamoraron y volvieron pareja, quien iba a penar que Douki no sabía nada de cómo declararse a su padre teniendo que hacerle más de una indirecta, las cuales no surgieron efecto en el.
Eri: Papá, no te da vergüenza no haberla entendido por tanto tiempo?
Izuku: Soy un hombre, los hombres no entendemos indirectas.
Mitsuki: Por más que me duela admitirlo tiene razón.
La mujer peliceniza tuvo que recordar con algo de vergüenza las múltiples veces que le mando a Masaru cuando estaban en la preparatoria y este por más atrevida que era no entendía lo que quería.
Mitsuki: Que frustrante.
Inko: Dejemos eso de lado, ya es un poco tarde, porque no se quedan aquí?
Mitsuki: Por mi ni te preocupes, Masaru vendrá por mi en unos minutos.
Izuku: Yo y Douki también ya nos vamos mamá, aunque quisiéramos quedarnos no podemos, debemos estar mañana en la escuela.
Douki: Es verdad, por lo que nos dijeron los profesores los exámenes ya están llegando.
Eri: No me lo recuerden...
La peliblanca recostaba su cabeza sobre la mesa cansada y ahora más por que sus exámenes también estaban muy cerca.
Y así paso esa noche en "familia" cada uno tuvo su rumbo después de eso.
Durante los siguientes días Izuku y Kyouka quedaron con un juez para la custodia de Sayumi quedando de la siguiente manera.
