Esposo trofeo

cap 8

La mañana era algo fría apesar de estar cubiertos por las mantas mullidas de lana y telas cálidas, por lo cual no era raro que izuku se aferrara tanto al abrazo que mantenía desde la noche anterior con su esposo, compartiendo su calor y acurucado en el calor del cuerpo de su amado amado esposo bicolor, quien con el agarre firme en su cuerpo, no moverse libremente podía.

Quien aunque lo intento, no pudo escapar y ver como el sol salía de donde se oculto desde el día anterior, arropado y abrazado a prueba de escapes, solo pudo volver a acucarse y devolver al abrazo a su esposo.

Sus mirada dispar fija en los hermosos rasgos del rostro de su esposo, aún dormido con toda la paz del mundo y incluso con una pequeña sonrisa en sus labios, respiración suabe  y relajada, con ese clásico reflejo de acurrucarse y buscar aun más comodidad.

_ Cariño ¿ me amas ? _ pregunto shouto en tono curioso y de un clásico de solo un tonto enamorado, siguiendo ese instinto curioso de preguntar cosas cuando su esposo duerme y esperar esa dulce respuesta dada desde la inconcencia del sueño.

_ Te adoro con toda mi alma _ respondio el peliverde aun dormido, pero aun con su mente despierta y pendiente a lo que sucede en su entorno, como una de esas malas costumbres que aprendio con el pasar de los años .

Con una sonrisa en su rostro y emoción, shouto estrecho el abrazo y dio muchos besos en las mejillas de su esposo, uno en cada peca y  espacio , sin saltar ningún sentimetro o milímetros, le encantaba sentirse amado como solo izuku lo sabía amar cada día que pasaba.

Si solo pudiera decirle al tiempo que dejara de pasar y le dejara disfrutar infinitamente de lo hermoso que eran esos pequeños momentos que son como el paraíso en la tierra existiera, para algunos el amor era solo un sentimiento humano.

Para shouto el amor llegó de sorpresa y nunca se atrevio a dejarlo pasar, no tenía ni idea de que le esperaba y menos si sería algo tan hermoso como muchos lo decían, llegó a dudar de su suerte y temio por las cosas malas, pero todo no fue color rosa y eso era lo emocionante de la vida.

Dejo los miedos y lucho contra las adversidades con todo lo que tiene o asta con lo que no sabía que tenía, el drama para muchos era malo, para el, era lo que daba sabor a la vida, no en el aspecto de buscar problemas por el mismo, ya que ni era necesario, ya que los problemas y el drama llegaban sólitos sin invitarles o tener oportunidad de buscarles ... así era la vida.

_ ¿ cariño ? _ pregunto izuku despertando y notando como su esposo parecía estar perdido en sus pensamientos, lo cual era extrañamente tierno.

_ ¿ sucede algo ? _ pregunto shouto confundido, pues al salir de sus pensamientos, izuku ya estaba despierto y sentando la mirada esmeralda en su persona.

_ Buenos días amor mio, te amo con toda mi alma y corazón _ respindio izuku tomamdo un poco distancia y sentándose lentamente en la cama, aún con algo de sueño, pero ya pasara.

_ Buenos días, yo tambien te amo izu _ susurro shouto tomado por sorpresa y con un hermoso sonrojo en sus mejillas, tentado a acurrucarse y buscar mimos, pero ya no tenía sueño y eso podía ser después.

_ Siempre tan tierno_ susurro izuku enternecido, para luego dar un cálido abrazo a su amado _ ¿ aun tienes sueño ?

_ No ¿ y tu ? _ respondio shouto un tanto curioso por lo que puede llegar a proponer su esposo, aunque sea lo que sea, siempre es una excelente idea.

_ Un poco, pero con un baño se quita _ contesto izuku, para luego vostesar un poco y intentar cubrir a ambos con la manta cálida, pues hacia algo de frío y el haber dejado la puerta del balcón abierta, no era mucho de ayuda.