Solo contigo | Gortabo

Negación - 4

Desde temprano sonaban las alertas de los robos a tiendas, robos de vehículos y uno que otro intento de secuestro, la malla estuvo activa en todo el tiempo y siguiendo las órdenes de quien estaba al mando en ese entonces, que era Gordon. El moreno continuaba con su labor de cada día, instruyendo a uno que otro alumno y ayudando con las denuncias, nadie podía decir que este hombre no trabajaba, prácticamente parecía que vivía en la puta comisaría. No se quejaba, él era fiel a su trabajo y le gustaba ayudar.

James estaba a punto de bajar hacia la sala de procesados cuando justamente vio entrar a un rubio conocido por la puerta del parking.

—¡Gordon! ¿Para cuando empiezas a trabajar?— apareció el ojiazul empezando a fastidiar al moreno desde temprano.

—Me cago en tu puta madre, Gustabo, joder.— Golpeó ligeramente el hombro del rubio, empujándolo un poco hacia atrás.

—Oye por cierto, ¿Haz visto a Isidoro? Tenemos que patrullar— Preguntó esta vez Gustabo, apoyándose en la pared de su izquierda.

—Lo vi haciendo el gilipollas hace un rato, dejame lo llamo— Gordon llevo su mano a su hombro izquierdo para hablar con radio y comunicarse con el alumno.

—¡Navarro, venga cagando hostias hacia la puerta del parking!— Grito el moreno, parecia algo molesto.

—Voy, tete!— Escucho de parte del alumno, algo que le tocó bastante los cojones.

James simplemente suspiro pesado y dirigio su mirada al rubio, quién lo miraba atentamente, por un instante se sintió acorralado por este, ambos estaban entre la pared y aunque Gordon era de mayor estatura su corazón volvía a latir con rapidez debido al hombre que tenia en frente suya.

Se comenzaba a sentir bastante confundido, él nunca había experimentado esto (al menos en todos sus 25 años) y que la primera vez sea con alguien de trabajo le jodía un poco. Ya le parecía bastante extraño que desde el primer día se haya fijado mucho en el rubio, ¿Es que acaso era algún tipo de brujo? ¿O por qué cojones se ponía nervioso cuando se quedaba a solas con este hombre?

El de azabache estaba a punto de hablar, pero fue interrumpido por un muchacho que entraba por la puerta del lobby, pensó que sería Isidoro, pero no.

—Disculpe, Gordon, ¿interrumpo algo?— Preguntó un alumno pelirrojo, quien hace unos instantes había visto la situación en la que se encontraba ambos superiores.

—Digame, Desanti, no interrumpes nada.— Ambos hombres de alto rango miraron al alumno, Gustabo no lo conocía por lo que su mirada era seria, además de que odiaba que otras personas interrumpa sus conversaciones.

Justo detrás del pelirrojo apareció el dichoso alumno, quién saludo a todos y fue justo al lado de Gustabo, como si fuera su protegido.

—Ahi estás, coño, ponte en Zeta-40 Isidoro y vámonos de aquí.— Dijo el Subinspector, para luego darse la vuelta y dejar a Gordon atrás junto al alumno.

El oficial simplemente vio como el ojiazul se retiraba y volvió su mirada al alumno, que al parecer miraba con timidez a su superior.

—¿Que necesitas, Desanti?— James se cruzó de brazos y vio directamente a los ojos al alumno.

—E-es sobre una denuncia que hice con Andrew...— El muchacho sacó la PDA y le enseñó en lo que necesitaba ayuda y el oficial no tardó nada en ayudarle.

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