Durmiendo con mi primera enemiga

Parte 62

Laia: está bien

Leila: oído cocina

Misa: Patri??

Patri: lo que tú digas 

Misa: pues entonces dispersaros que estáis tardando vengaaa

Leila: me dirigí al cuarto esto no lo veía venir, Patri debía estar para mí, pero veo que no es así una falsa mas a la lista, supongo que es costumbre de hecho tengo que hacer una lista de todas las personas que me han fallado a lo largo de mi vida Hay momentos en los que ya no sé si merece la pena lo que diga siempre va en mi contra todo lo que hago, no se reconoce, lo que digo se pasa por alto y mis metas al parecer ya las han tomado otras 

Ona: hacía tiempo que no veía a Leila y a decir verdad me moría por verla y si no estaba en la piscina, no estaba fuera, el gimnasio está cerrado, la verdad es que no sé tengo idea

Ona, se dirige a la tumbona de Alexia

Ona: ale, has visto a Lei, Leila perdón 

Alexia: ya empezáis con los motes, esto va a peor pero no, la última vez estaba en la cocina, que actualmente estaaa vacía, fenomenal 

Ona: subo arriba, cúbreme 

Ale: en serio con este panorama, no hace falta están todas moribundas no pueden ni levantarse del tirón, míralas 

Ona: ya, pero el que avisa no es traidor 

Alexia: ya,  ahora voy a dormir 

Ona, subí al cuarto pero llamé primero

TOC- TOC - TOC 

Ona: se puede

Leila: quien es 

Ona: Pecas

Leila: está abierto 

Ona: ya sabí wou , eeeee no puedo estar  wou 

Leila: cierra la puerta y la boca que vas a hacer un charco 

Ona: culpable, no te esperaba semidesnuda pero me sirve de hecho me podría hasta acostumbrar a este recibimiento

Leila: uy, créme que no. Para tu información me estaba cambiando paraaaa 

Ona: déjame adivinar entrenar, no soy imbécil, pero no está entre mis planes dejarte correr como una loca y menos así 

Leila: celosa 

Ona: protectora con lo mío, no me gusta que la gente toque algo que tanto esfuerzo me ha costado conseguir y menos que lo haga alguien que yo conozca.

Leila: pues mira para contentarte me iba a poner  una camiseta, saca una camiseta del cajón transparente al la luz del día. Yo creo que con esto es mas que suficiente me apetece estrenarla

Ona: no vayas por ese camino de la ropa Leila

Leila: que  materialista por tu parte, pero no te puedes quejar normalmente voy solo en top  negro sin nada arriba , ni una sola camiseta y hoy voy en sujetador 

Ona: está bien o sea que quieres jugar a la tontería de  quien usa menos ropa, se quita la camiseta. Me suena que tenía una camiseta de tirantes del Barcelona con el nombre de mi EX ,  y tampoco sé si estos pantalones favorecen creo que me pondré los de entreno pero los negros al fin y al cabo  la camiseta me llega hasta las rodillas y el bikini 

Ona: no te pongas celosa

Leila: la parte de arriba de ese bikini no llega ni al triángulo 

Ona: no enseño nada a no ser que alguien me lo mueva y si la parte de arriba te asusta, no creo que estés preparada para la parte de abajo 

Leila: se acerca mucho a ella hasta dejarla contra la puerta, pone el cerrojo 

Leila: actualmente si tiro de está toalla de mi cintura para que caiga al suelo sabes que hay abajo; en efecto una delgada tela de color negro elástica que se rompe al primer tirón  , 

Ona: agg eso tendré que comprobarlo primero, no me fío 

Leila: tiras o tiró 

Ona : Ona la miró fijamente y empezó a subir sus manos por la espalda de la morena y con una mano le desabrochó el sujetador mientras que con la otra le iba deslizando los tirantes por los brazos.

Miró a Leila y acto seguido dirigió su boca hacia uno de sus pezones, 

Leila : aghhhmmmmmmmmmm

Mientras una mano traviesa desataba una pequeña toalla para colar su pierna de por medio 

Leila desesperada no iba permitir que la enana le besase, sería un acto derrota pero era casi imposible, Ona se la estaba comiendo, todos su pechos eran prueba de ello

Pero la de Barcelona, no iba a quedarse allí bajo su mano al interior de la cueva separando por encima  de esa fina tela y lo que decía Leila era cierto se rompieron los extremos cayendo al suelo 

Ona: ya sobraba , y antes de decir algo mas volvió a su tarea: devorar a la morena y demostrar lo mucho que le pone cuando le intenta dominar . Froto suavemente de arriba abajo toda su humedad , Ona se calentaba cada vez que escuchaba a su morena gemir   pero sabía que tenía que aumentar el ritmo. Arañó levemente la espalda de la morena  que la miró desde arriba . Conectó mirada con ella y en ese instante metió dos dedos en el interior de esta al mismo tiempo que mordía levemente uno de sus pezones. 

Leila estaba contra la pared y sentía que iba a explotar le clavo la uñas a Ona, la cual ya la bombeaba ha placer 

Ona: ahora viene lo mejor. con su pulgar rozo, el punto de Leila para pasar a manejar esa zona como si de su propio coche se tratase  

Leila empezó a desestabilizarse, Ona par impedir que se cayese cargo su peso contra ella para dejarla aprisionada contra la pared alternando sus besos mojados con mordidas en su clavícula y sus pechos 

Minutos después una oleafda de placer invadió el cuerpo de Leila que se desestabilizó por completo calmando sus gemido s sobre la boca de Ona , porque los decibelios eran casi tan altos como la temperatura de esa habitación. .

Ona las llevó a las 2 empujando a Leila que besaba intensamente a Ona , las recosto en la cama

Ona: a reto conseguido creo que esta sesion de sexo intensivo cubre todo tu ejercicio físico de la semana 

Leila: si te soy sincera puedo acostumbrarme, 

Ona: nos cambiammos, porque digamos que va ser complicado que ocultes todo lo recibido a por cierto el medicamento para la garganta esta en la mesilla lo digo porque  te acabo de hacer gritar con una manita no quieres imaginar cuando lo hago con 2, con una sonrisa socarrona 

Leila: jaja muy graciosa(ironía) pásame el espejo, joder Ona cof cof como no me ponga un traje de buceo 

Ona: eso te pasa por provocarme, y lo sabes. Y no vamos a empezar porque nos dan las mil, he traído camisetas acuáticas de surf tienen cuello alto, cantará mucho pero di que tienes frío y ponte traje de baño no me puedo resistir a esos sujetadores y no acepto una respuesta porque responderé con acciones

Leila: si es lo que tu quiers.

Ona: ve al baño, cámbiate y yo me cambio aquí 

Leila: está bien pecosa, en el fondo tenía razón  

Se cambian y Leila sale primero hacia la piscina y Ona a la cocina no tenían que levantar sospechas