Sentimiento Extraño / Vanessa Afton x Male! Reader / FNAF Movie Fanfic

\ 06 /

Estaba durmiendo pacíficamente, sin molestar a nadie. Hasta que un fuerte golpe me asustó y provocó que me cayera del sofá, haciendo el ruido de otro golpe fuerte.

— Auch — musité por lo bajo.

— ¿Qué pasa aquí? — Mike llegó y me vio en el piso — ¿Esos 2 golpes fuiste tú?.

— ¿Qué? Claro que no — le respondí parándome — el segundo sí fui yo pero el primero no.

— Entonces el primero...¿Abby estás bien? — Mike se fue a donde provino el primer golpe, que era donde supuestamente estaba Abby. Yo preocupado por la pequeña de la casa lo seguí.

Cuando llegamos a donde estaba Abby había cosas tiradas por el piso. Tal parece que Abby había estado revolviendo un cajón, pero este se cayó y las cosas se desparramaron por el piso. Entonces noté que ella tenía unos papeles en sus manos, Mike palideció con cara de sorprendido al notar eso y yo no entendía que pasaba, hasta que vi que el título tenía algo que ver con un juzgado de custodia de menores o algo así.

Ahí lo entendí todo, parecía que otro familiar de Mike quería la custodia de Abby y estaba dispuesto a ir a juicio familiar para obtener dicha custodia. Eso me molestó un poco, tal vez Mike no sea muy responsable pero hace su mejor esfuerzo y quiere a su hermana más que a nada en el mundo por mucho que peleen, sé que el daría su vida por ella y que se preocupa por lo que le pase, no por nada él escondió esos papeles para que Abby no los viera.

— Hice un desastre, lo lamento... — dijo Abby de forma baja.

— No te preocupes... — dijo Mike.

— Mientras no te hayas lastimado no pasa nada — dije yo.

— ¿Piensas regalarme? — preguntó Abby mirando a Mike.

— ¿Regalarte? No, no. Claro que no.

— No me gusta la tía Jane. Es mala y siempre huele a cigarro.

— Conozco el sentimiento... — musité recordando a mi padre, él siempre olía a cigarro y cuando no era así olía a alcohol.

Mike me miró un segundo con lástima, yo solo hice un movimiento con la cabeza señalándole a Abby para que la consolará a ella y a mí me dejara de lado. Sabía lidiar con mis problemas solo.

Mike se rió un poco mirando a Abby, lo que provocó que ella y yo lo miráramos mal. ¿Acaso él no entendía la gravedad del asunto? Esas cosas no son graciosas, si su tía fuma y quiere tener la custodia de Abby todo podría salir muy mal, no es que sea malo fumar pero Abby también mencionó que es mala. Y si fuma y es mala bien podría también emborracharse lo que podría salir muy mal para Abby.

— No es gracioso — lo regañamos Abby y yo al idiota que tiene por hermano mayor.

— No es eso, es solo que...es tierno que al fin pensemos igual sobre algo — contestó Mike.

La puerta sonó, alguien estaba golpeando. Mike y yo nos miramos, luego los 2 fuimos a abrir la puerta, me importaba un comino que me vieran en la pijama del idiota.

Cuando Mike abrió la puerta vimos a Vanessa.

— Hola — nos dijo.

— Hola — le respondimos.

Sentí a alguien abrazar mi pierna, me reí antes de acariciar el cabello de Abby.

Vanessa nos miró con sospecha y luego miró a Abby.

— No sabía que estaban juntos, o que tenían una hija — dijo.

Yo empecé a reír a carcajadas por la tremenda confusión de Vanessa, así que Mike me miró implorándome que fuera maduro por este momento.

— Vanessa, no soy gay. Soy hetero — le contesté — y aunque fuera gay o bisexual, no tendría tan mal gusto en chicos — le señalé a Mike y ella empezó a reír, mientras que él pelimarrón me dió un codazo sacándome un chillido. Le diría una grosería pero recordé nuestro trato y que Abby aún estaba abrazando mi pierna, así que si decía algo me escucharía y no quería exponerla a groserías siendo tan joven como hicieron mis padres conmigo.

— Y Abby no es hija de ninguno de los 2, es mi hermana. Además _____ pasó esta noche aquí por algo...nada más — siguió Mike.

— Ya veo — nos contestó — tampoco me dijiste que tuvieras una hermana.

— ¿Y vienes aquí a arrestar a Mike? — preguntó Abby.

— No tiene necesariamente porqué arrestarme a mí, bien podría venir por _____ — le respondió Mike.

— Ey, ey, ey. Ojito con lo que sale de tu boca, Schmidt, que si aún no te he golpeado no significa que nunca lo vaya a hacer si colmas mi paciencia — le reproche.

— Tú colmas la mía.

— Como si tuvieras mucha paciencia Mike Schmidt.

— En fin, Abby ve a tu cuarto para que hablemos con Vanessa.

— Bueno. Fue un gusto conocerte Vanessa — Abby se despidió y Vanessa movió su mano a modo de saludo con una sonrisa tierna, luego Abby se fue a su cuarto.

Pero en cuanto Vanessa le dió esa sonrisa tierna a Abby sentí mi corazón acelerarse un poco y mis mejillas calentarse, y no sé por qué. Solo se que Vanessa se vió...muy tierna y bonita.

— En fin, no sabía que mi casa estaba en tu ruta de patrullaje — dijo Mike.

— No lo está — ambos miramos confundidos a Vanessa cuando dijo eso, luego nos miramos entre nosotros y después la miramos a ella otra vez — alguien entró a Freddy's.

— ¿Qué? — dijimos Mike y yo al mismo tiempo.

Vanessa nos mostró un frasco de pastillas para dormir, las que al parecer eran de Mike.

— No es lo que crees, son pastillas para dormir — dijo Mike.

— Sé lo que son, está escrito en la etiqueta — contestó Vanessa con cara seria — dormir en el trabajo está prohibido.

Noté que Mike estaba nervioso, y era imposible no estarlo. Así que hice algo de lo que probablemente me arrepentiría luego.

— En realidad son mías — mentí para salvar a Mike, quién me vio sorprendido al igual que Vanessa — sin ellas no logro conciliar el sueño y para no distraer a Mike en su trabajo las tomé para dormir — empecé a rascarme la nuca algo nervioso — y tampoco lo culpes por no haber cerrado bien el local, cuando salimos lo distraje hablando con él y no sé dió cuenta. Es mi culpa, perdón.

— Mmmm...no te diré nada porque no trabajas en Freddy's. Y Mike, como al parecer no fue tu culpa tampoco te diré nada — Vanessa me dio las pastillas, creyéndose el cuento de que eran mías. Yo le sonreí y, de forma sutil, se las pasé a Mike por la espalda quien agarró el frasco para meterlo en el bolsillo de su pantalón mirándome con agradecimiento — solo sean más cuidadosos la próxima.

— Entendido — dijimos al mismo tiempo.

— Oigan, ¿Quieren dar una vuelta? — preguntó Mike.

Vanessa y yo asentimos.