Cuentos Felices Para Fans Deprimidos

Cenicienta

Había una vez.. un joven que era tratado como la servidumbre de su propio hogar.

Su terrible padrastro Wen Ruohan y su hijo hacían cada suspiro miserable.

-Lava la ropa otra vez

-Inservible, esta comida está del asco

-¿Que haces en todo el día? Limpia la casa de nuevo

-Lustra los zapatos

-Lava el carruaje

-Cose esta ropa

-Alista mi baño

-Jiang cheng

-Jiang cheng

-JIANG CHENG

-AH CARAJO, YA BASTA- exclamó jiang cheng con todas sus fuerzas, tenía muchas ganas de mandar a la mierda toda esa situación.

¿Por qué tenía que hacer todo eso?

Los pies con hongos eran difíciles de soportar, los calzones de wen chao estaban más tiesos y duros que el poto de su caballo.

Estaba a dos dedos de matarlos a todos.

El único motivo por el que hacia todo sin refutar.. Era porque Wen Ruohan era el único que sabia donde se encontraban sus hermanos.

Los había enviado lejos antes del fallecimiento de su padre y nunca más los volvió a ver.

Solo quería eso, una pista para lograr ubicarlos. Era lo único que quería, casa y el dinero no significaba nada..

-Maldito viejo de mierda- decía jiang cheng mientras que trapeaba la mansión nuevamente

Alguien tocaba la mansión con desespero.

Toc toc toc

Que estúpido.

Toc toc toc

Ya se irá.

Toc toc toc

..no hay nadie carajo

TOC TOC TOC TOC TOC

-PUTA MADRE CON ESTE IDIOTA- Dijo jiang cheng lleno de enojo. Tenía que atravesar todo el piso que recién había limpiado y odiaba eso.

TOC TOC TOC TOC TOC

-Buenas tardes, ¿Qué desea?- pregunto jiang cheng al abrir la puerta

-Ah.. Disculpe Sir.. T-Tengo mensajes del Rey- decía el mensajero

-Del chivo?-

-Disculpe?-

-Que archivo ^^-

-Todos los solteros están obligados a asistir al banquete real donde se celebrará el cumpleaños del príncipe-

-Okey, Gracias-

-Y no olvide qu-

La puerta fue cerrada en su rostro, el comandante wen ning había sido obligado a dar ese mensaje de casa en casa como castigo por comer bollitos rellenos a escondidas.

Jiang cheng decidió usar esta oportunidad para preguntar por sus hermanos.

No importaba si parecía loquito tirado en la plaza San Miguel con tanta pregunta. Alguien debía conocer al estúpido coqueto de wei wuxian o a la sazón de su hermana.

Sin duda lo iba a lograr y luego de ello le metería una patada en el culo a su padrastro y para wen chao.. abriría su poto y metería su-

No, que asco.