VOTOS MORTALES

OBSESIÓN

SATORU POV

- Top diez. - murmuro. - Top diez, mi cvlo. -

- ¿De que carajo estas hablando ahora? - Megumi pregunta.

- Megumi. - advierte Suguru, a lo que él solo pone sus ojos en blanco y termina de ponerse los zapatos. Un deje de irritación invade mi cuerpo, al saber que estará con Yūji. Pero acepté sus términos. Lo dejare pensar que me he dado por vencido, pero tengo toda la intención de casarme con él. Necesita tiempo para hacerse la idea en su cabeza, y mientras más rápido lo haga, mejor.

- ¿Qué es eso de top diez que tanto murmuras? - pregunta Suguru, dejando caer una pila de papeles frente a mi para sentándose a la par.

Ugh... Más mierda que firmar.

Han pasado solo un par de horas desde que Yūji y yo lo hicimos, y que me dijera que estoy en su top diez. Se que lo hizo solo para ponerme de malas. Lo sé.

- ¿Qué es esto? - pregunto al sostener unos formularios.

Suguru señala el primero. - Las familias y aliados estan preguntando sobre tu matrimonio. Están ansiosas por saber cuando se llevara a cabo. -

- A la mierda las familias. - resoplo molesto.

- Estos son parte de los beneficios adicionales a los que tendrás acceso una vez te cases. - señala una sección en una de las hojas que describe los activos y propiedades que pasarían a mi nombre, además de todos los negocios de los que podría apropiarme. Son unos que he querido desde hace mucho tiempo, pero a los que no he podido acceder todavía.

Serán míos una vez el matrimonio se concrete.

- ¿Ahora dime que es eso del top diez? - ignoro su pregunta y sigo analizando el papel que señala los beneficios de esta unión. No hay nada ahí que no haya memorizado. Muy pronto serán míos.

Lo quiero ya.

Los clanes fundadores han firmado este contrato. Todos los negocios que he querido manejar, están al alcance de mi mano. Estoy tan cerca que puedo sentirlos como míos. Y con Yūji a mi lado como el omega más poderoso en el medio legal, seremos intocables.

- Es algo que Yūji dijo. - digo entre dientes.

- ¿En serio crees lograr que acepte casarse contigo? Él se alejo de este mundo hace mucho tiempo. - dice Suguru.

- Pero el conoce como se manejan estos negocios, y sabes que siempre ha sido él. - He estado profundamente atraído por él desde el primer momento en que lo vi hace más de 25 años. Él es mío. Comprometido por conveniencia o no.

Mientras más lucha, mi deseo por someterlo, es mayor. Quiero ver a ese lindo tigrecito admitir que es mío y nada más que mío.

- Si, y cada pareja sexual que has tenido lo sabe también. - se ríe. - Recuerdas al omega, creo que su nombre era Jiro, al que le pediste que decolorara y tiñera su cabello de rosa y que también le pediste que usara lentes de contacto dorados cada vez que cogían? - sacude su cabeza. - Estaba tan molesto que cuando salió del cuarto del hotel, parecía que iba a matar a alguien. -

- Tengo una fijación por los chicos de cabello rosa y ojos dorados. - digo sonriendo.

- Si, creo que todos estamos al tanto de eso. - Suguru se pone de pie y me da unas cuantas palmaditas en la espalda. - Debo agregar que aparte de tu lucha interna sobre lo que te dijo Yūji, pareces menos estresado. O su presencia en casa te ha sentado bien o definitivamente te acostaste con alguien hoy. -

Sonrío ante el vívido recuerdo de Yūji montándome, lo que hace que mi entrepierna duela un poco de la emoción.

- ¡Lo hiciste! ¿Con quién? - pregunta con curiosidad.