⏤͟͟͞ ☾┆Տᗩᐯᗴ ᑌՏ, ᑭᒪᗴᗩՏᗴ ☀︎꒷︶꒷꒥꒷

☾ two ☀︎

Hace un año atrás Dogday disfrutaba mucho de la compañia de sus amigos, aquellos juguetes algo grandes que se caracterizaban por esa peculiar sonrisa llevando la alegría a los niños en la guardería. El canino sonreía orgullo de su trabajo como líder, viendo como sus compañeros estaban ayudando y haciendo reír a los pequeños niños huérfanos de este lugar, él se había encargado de instruir a sus amigos, enseñandoles a ser ellos mismos, pero sobre todo obedecer a los humanos mayores, también conocido como los científicos de la fábrica. el canino no estaba deacuerdo con los directivos, nunca le agrado la idea de utilizar niños para esos experimentó, pero no podia hacer nada, tenía que asegurar el bienestar de sus compañeros y el suyo, la seguridad de su familia.

Estába tan metido en sus pensamientos que no noto la presencia de su mejor amigo quien se encontraba detrás de él, mirando su cuello como si de una presa se tratase, analizando cada movimiento del su líder, sintiendo el olor a vainilla que desprendía con normalidad.

-Buu. - solto el pequeño sonido, notaba como el cuerpo de Dogday tembló y en un movimiento giro de golpe logrando ver al causante del susto quien tenía esa sonrisa tan grande y aterradora. Cayó al suelo y comenzó a recuperar el aliento aún nervioso. - Ah, Kitty ¿Qué su-sucede?. -

-...- Catnap solo se quedó callado mirándolo, hizo una seña que indicaba que quería ir a otro lugar.

-Oh, ¿Quieres que te acompañe?. - murmuro mientras se levantaba de suelo, se sacudió la suciedad y miro al felino con una sonrisa cálida. - ¡Claro que voy contigo!.

Catnap solo asintió con la cabeza, sintió la mano calidad de su amigo ¿Le estaba agarrando la mano? no era inevitable sentir la emoción, había desarrollado sentimientos muy fuertes por su mejor amigo, sentimientos que ni el comprendía, solo quería que ese momento durará para siempre.

Por el lado de Dogday, el simplemente estaba en su mundo, sonriendo mientras tarareaba la canción de su programa. - Kitty, ¿no crees que nuestro último capítulo fue un éxito?. - comento con notable entusiasmo.

El felino solo ladeo su cabeza con pesadez, la verdad no le gustaba la imagen que le daba la empresa a su personaje animado, el nunca había utilizado el gas para dar ese tipo de cosas, su gas nunca había causado esa escena aterradora. Miro al canino y simplemente negó con su cabeza.

-Oh, ¿No te gusto?. - murmuro levemente con su mirada llena de confusión, para Dogday el programa fue un éxito, realmente creía que la escena en donde aparecía Catnap era increíble.- Sabés, a mi me gusto mucho tu escena, creo que te hacen ver como un heroe,ya sabes tu gas es muy importante para que podamos dormir tranquilos, aparte ¡Nos das felicidad con el gas de Amapola!.

Catnap solo suspiro, sabía que el canino siempre vería el lado positivo a todo, así que dejó la conversación ahí y solo camiraron en silencio hasta que llegaron a la habitación del gato. Ambos entraron y se sentaron en la cama del felino.

-Entonces, ¿Qué es lo que me ibas a decir?.

-...- la mirada del gato se dirigió a los ojos de su mejor amigo, él era quien le daba seguridad, le daba la confianza para contarle sus cosas y lo que sentía, no hablaba con nadie más que no sea Dogday.- Alguien...-murmuro levemente.

-¿Alguien?. - lo miro confundido.

-Alguien me habla, Dogday.

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El canino despierta de su trance, sintiendo como la larga cola del quien era su mejor amigo se enredaba en lo que era su cintura.

- ¿Ya despertaste? -miro como el perro lo miraba confundido y desencajado. - Supuse que cuando te entregara el colgante sucedería esto, ¿Sabés? extraño agarrar tu cintura completa y tus piernas. - sonrío levemente, pero cuando vio que su mejor amigo seguía quieto suspiro y continuó. - Recuperare tus piernas, antes que el intruso matara a Mommy Long Legs me dijo que podemos usar los instrumentos de los científicos para devolverte tus piernas, claro que llevará algo de tiempo la función completa, pero no te preocupes yo te cuida- no pudo terminar lo que decía porque Dogday miro con enojo al felino.

-No quiero mis piernas, solo quiero arreglar todo este desastre. - comentó mientra gruñia con enojo. - no necesito tu maldita ayuda, si no hay solución al desastre que causaste con tu maldito Dios, entonces dejame morir, si tanto te preocupas por mi, solo dejame morir.

Catnap miro con enojo a Dogday, levantandose de golpe y tomó su tamaño con el cual se defendía, esa altura de tres metros, dejando que sus costillas se notarán a tal grado que parecía que en cualquier momento su cuerpo de iba a romper por lo delgado que era.

- La única maldita cosa que hago es cuidarte, Dogday. -comenzó a caminar en círculos por el estrés que sentía. - Y tú ¿No puedes ni agrader si quiera un poco?

- ¿QUE QUIERES QUE TE AGRADEZCA? MIRA LO QUE HAS CAUSADO, CATNAP. - grito con desesperación, mientras sentía sus fuerzas disminuir como a poco. - ¿CON ESTO CREES QUE PUEDES CUIDARME? NO TENGO MIS PIERNAS... - el llanto comenzó a salir de sus ojos huecos, esas lágrimas color amarillo con algo de brillo se derrarmaron por el rostro demacrado de Dogday. - Perdí todo ese maldito día, perdí a mis amigos, a los niños... te perdí a tí.

-No me has perdido Doggy, sigo aquí. - el felino intento acercarse al perro con desesperación.

-Tienes razón. -murmuro con cansancio. - Yo no te perdí... Tu me perdiste a mi.

Al terminar de decir lo que sentía, Dogday se cayó en la cama desmayado por la pérdida de sangre y posiblemente alguno de sus órganos. Catnap miraba la escena con miedo, no podía permitirse perder a su sol, él haría lo que fuera para tenerlo a su lado, aunque eso sea perder algo preciado para él como su "libertad"

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me emocione con este capítulo, espero que se pueda ir a entender la idea y hacia donde se dirige la historia.

si la historia no llega a ser de su agrado, solo pido q no dejen comentarios hirientes, aun trato de reunirme con mi escritora interior, así que paciencia 😭

sin más que decir, se despide "Dai".