Una carta para ti - H. S.

Cap. 7

«Debemos elegir. Elegir a alguien que nos complemente, porque...»

Si ver a Shoyo feliz le daba años de vida. Verlo en su faceta competitivo, daba el doble.

Habían salido a hacer unas comprás con Hayato. Un par de regalos y comida extra. Así también podrían ver los alrededores y que Hayato fuera viendo cosas nuevas, aunque probablemente o las ignoraria o las olvidaría. Al estar caminando de regreso a casa, después de ir al mercado local, vieron a alguien a quien no esperaban caminando unos metros por delante de ellos.

Fue algo automático. Hinata volteó a darle una sonrisa a Suiren, cómplice y río, a punto de llevar a cabo su plan.

"Shoyo, pero llevas las-" Suiren iba a decir que el podía hacer un desastre si llevaba las bolsas, pero no termino cuando su esposo salió corriendo, para pasar de largo a Kageyama.

"¡Llegaré primero!" le gritó Hinata a Kageyama, quien parpadeo confundido viendo a Hinata correr frente a el, con bolsas de compras en las manos.

"¡Idiota, harás un desastres!" respondió pero corrió tras el.

Como en los viejos tiempos.

[🌸🌸🌸]

Para cuándo Suiren llegó a casa, con el cochecito y Hayato. Encontro a Hinata y Kageyama desplomados en la entrada de la casa. Justo en ese momento, la mamá de Hinata abrió la puerta y miro con el ceño fruncido a su hijo.

"Shoyo, más vale que las compras estén enteras" dijo antes de suavizar su gesto y mirar a Kageyama "Tobio-kun, ¡Hola! Había pasado un tiempo sin verte. ¿Viniste para ver a Shoyo? Ven, pasa." 

"Ya llegamos" dijo Suiren cuando adentro el carrito a la casa. Riendo al ver cómo la seguían unos hombres que se quedaron sin aire hace unos minutos.

Hinata empezó a sacar las compras mientras Suiren sacaba a Hayato del cochecito y Kageyama se sentaba en la sala de estar.

"Ow" Suiren miro a su esposo, que se encontraba con un carton de huevos en las manos, que se habían reventado algunos huevos.

Ella movió la cabeza en negativa riendo. Su madre lo regañaria en lo que se diera cuenta. Por su parte, solo le pareció divertido verlos competir. Ese tipo de vacaciones le hacían falta a Hinata.

"Es... ¿El?" pregunto Kageyama al ver a Suiren entrar en la sala con Hayato en brazos. Ella asintió acercandolo a ver.

"El es Hinata Hayato" dijo cuando se sentó a su lado colocándolo en su regazo.

Kageyama tembló. Hasta ahora, su interacción con bebés había Sido casi nula. Reducida a fotos tomadas por fans y sus hijos. No sabía que hacer. El bebé lo estaba viendo, así que atino a sugetarlo con sus manos para afianzarlo.

"Se parece a Hinata" dijo con una sonrisa de esas deformadas, nerviosa. Sus ojos igual de agradandos que los del bebé.