Las risas de sus amigos y el sonido de la pelota rebotando en el piso de cemento lo mantenían en paz consigo mismo. Hace rato necesitaba este tiempo alejado de la escuela, lugar donde convive a diario con cierto niño chillón que se le metió por debajo de la piel y estaba consumiendo su cordura.
Jugar al baloncesto es lo único que logra distraerlo, siempre fue así sea donde sea que esté. Sin embargo, ese mínimo escape de sus pensamientos se vio alterado al escuchar una voz conocida. Rápidamente se giró viendo a todos lados, dando con el rostro sonriente de aquella persona en la que tanto pensaba últimamente. Por favor, no podía ser obra de casualidad que ellos se encuentren hasta en lugares donde se supone que no deberían hacerlo.
—¡Minho! —Su amigo le estaba pidiendo la pelota a gritos, pero sus ojos estaban fijos en Jisung (quién no notó su presencia).
Lanzó el balón a su suerte, yendo directo al chico para ver cual sería su reacción. A mitad de camino, metros antes de que lo vea, paró en seco y se dio cuenta de lo que estaba a punto de hacer. Si Jisung no lo vio, ¿por qué ir a hablarle? No había razón alguna para que se acerque. Quiso retroceder sobre sus pasos, pero era demasiado tarde cuando oyó a sus amigos gritar alocados.
Taeyang lo tomó por el hombro y comenzó a ser bullicioso.
—¿Estás abandonando el partido, príncipe? ¿O es que aquella chica llamó tu atención? —Apuntó el pelirrojo, sin poder estar más que equivocado con su deducción.
Esa chica la conoce, aunque fue en la fiesta del viaje donde se acercó a hablarle y ni recuerda su nombre completo, solo sabe que era Chae o Chu. Pero mejor no levantar sospechas de la verdadera razón por la que estaba viendo hacia allá. Torció una sonrisa y dejó que Taeyang pensara que su idea era acertada.
—¡Lo sabía! —Festejó el flaco, avisando al resto de chicos que sigan jugando mientras ellos se acercaban al grupo.
En cuanto entró en el campo visual de Jisung, sus ojos tuvieran una conexión fuera de lo normal, durando más tiempo que con cualquier otro presente. Incluso, si no fuera por el golpe en su hombro, se hubiera quedado paralizado mil décadas en esa mirada de conejito.
—Hola, chicos. ¿Qué se les ofrece? —Habló el tal Seunjin o Seung algo, no lo sabe, apenas se aprende los nombres de sus conocidos.
Ignoró la presencia de la mayoría, menos la de Jisung. El pequeño cabeza de coco bajó la cabeza, optando por concentrarse en evitarlo. Tiene sentido, probablemente tampoco quería verlo fuera de clases.
—Aquí mi amigo busca el número de esta hermosa señorita. —Dijo Taeyang, hablando en su lugar.
La forma en la que se estaba colgando de su cuello ya comenzó a molestarle. Sentía ganas de golpearlo lejos, pero el chico no tenía malas intenciones, así que realmente no había razón para molestarse tanto. Trató de calmarse, tomando aire para aliviar esa inquietud en su pecho que comenzaba a incomodar. ¿Por qué a la gente le gusta meterse en donde no los llaman?
—¿Y me vas a saludar o no? —Chae agitó su cabello de forma coqueta, siendo más que obvia con sus intenciones.
Era su momento de decir algo, tirar alguna broma y devolverle el coqueteo, pero no podía hacerlo. Sus ojos seguían puestos en Jisung, siguiendo ese movimiento ansioso de dedos que lo mantenía en su mundo.
—Ey, amigo, te está hablando. —Taeyang lo empujó levemente para hacer que conteste.
—Ah...claro, si. —Asintió y sacó su celular, justo al mismo tiempo que Jisung se puso de pie y se marchó.
—Jisung, ¿te vas a casa? —Su amigo Seungmin trató de llamarlo, fallando en el intento. —¿Qué le pasa?
—Se habrá puesto celoso...—Murmuró Chae, pero lastimosamente la escuchó.
ESTÁS LEYENDO
Love Discussion || Minsung [FINALIZADO]
Fanfiction"ᴅɪꜱᴄᴜᴛɪʀ, ᴘᴏʀ ᴛᴏᴅᴏ ᴘᴇʟᴇᴀʀ, ᴜɴᴀ ᴇxᴛʀᴀÑᴀ ᴍᴀɴᴇʀᴀ ᴅᴇ ᴀᴍᴀʀ ¿ᴘᴏʀ Qᴜᴇ ɴᴏ ᴅᴇᴍᴏꜱᴛʀᴀʀ ᴀᴍᴏʀ? ᴄᴏɴ ᴜɴ ʙᴇꜱᴏ ʏ ʏᴀ ᴄᴏɴ ᴜɴ ᴀʙʀᴀᴢᴏ ʏ ʏᴀ ʏ ᴀꜱɪ ᴛᴏᴅᴏ ᴘᴏᴅʀÍᴀ ꜱᴇʀ ᴍᴇᴊᴏʀ" Jisung tenía una vida escolar tranquila, hasta que de la nada, ingresa un nuevo compañero y la profe...