Tears of an Innocent - Kookgi -

#10

- La mañana del 19 de julio de 2019 recibí una llamada de una mujer que aseguraba que la desaparición de su hermana tenía algo que ver con el Asesino de Seúl - Dijo Jungkook, apoyado contra uno de los escritorios, mirando los rostros desconfiados de cada uno de sus subordinados, pensando en las palabras que debía utilizar y cuidando los detalles que podía revelar - Ella dijo que su hermana menor salió una tarde a encontrarse en un bar conocido del barrio con un apuesto hombre que la citó ahí.

- ¿Y por qué supone usted que tiene algo que ver con este asesino? - Cuestionó Jeon a la mujer al otro lado de la línea, hubo un pequeño silencio antes de que él escuchara un suspiro.

- En la televisión... La policía dijo que el hombre mata a personas que él cree que merecen un castigo - Era cierto. Ellos se habían visto obligados a revelar esa información después de que un periodista muy insistente y persuasivo, logró sacarle esa pista a uno de los oficiales y revelarlo a al público, a la policía no le quedó de otra más que confirmarlo y así, una ola de personas, preocupadas por su seguridad, llamaban a la comisaría preguntando si estaban en peligro por haber cometido algún delito - JiSoo, ella... Ella asesinó a su hijo de tres años - Jungkook jadeó.

- ¿Disculpe?

- Tenía 15 años cuando se embarazó - Un sollozo escapó de sus labios, se oía afligida, aguantando las ganas de llorar - Un día tomó demasiado y se desquitó con él... Cumplió su condena, pero jamás la perdonamos, nuestro padre nunca volvió a mirarle la cara después de eso.

- De acuerdo, señora, deme su dirección, pasaré mañana para hablar con usted.

Jungkook llegó a la casa de Kang Mina junto con Park SeoHo, el único de sus compañeros que sabía de esa reunión. Jeon no quería revelarle a nadie más esa información hasta saber si realmente tenía conexión con su caso, porque, conociendo bien al equipo y a su capitana, las cosas saldrían mal si resultaba ser una pérdida de tiempo. Siendo el novato, darse el lujo de fallar delante de sus superiores no lo haría quedar bien. Pero él tenía un presentimiento.

La casa se ubicaba en uno de los barrios más pintorescos de Daegu, donde podías encontrar los bares más populares y concurridos, de noche, la gente festejaba, tomaba y bailaba, de día, todos dormían. El tranquilo vecindario era mucho menos ostentoso que el resto del barrio, pues era una zona donde habían más familias que bares y antros, pudieron ver a unos niños jugando en la calle y a algunos adolecentes yendo a la escuela. Mina les abrió la puerta de su casa y los invitó a pasar.

- Cuando salió de la prisión buscó refugio aquí, nadie más que yo le dió la oportunidad de intentar remendar su vida - Dijo - Mató a mi sobrino, pero seguía siendo mi hermana - SeoHo miró hacia otro lado, sin poder ver la expresión dolida de la mujer.

- Hablenos del día en que SooJin se iba a ver con ese hombre - Pidió Jungkook, sacando su libreta - ¿Recuerda algún detalle importante?

- Recuerdo que ella estaba feliz, decía que hace mucho no tenía una cita con un hombre tan atractivo, dijo que se iban a ver en el Gogo Pub. Salió de casa esa noche y nunca más volvió.

- ¿Reportó la desaparición? - Preguntó Park.

- Lo hice, los oficiales que tomaron mi declaración no parecían muy interesados, después de unas semanas, dejaron de buscarla - Se levantó de su silla y fue a buscar una carpeta, habían distintos documentos en ella y se las entregó a los detectives - Dijeron que tal vez se fugó con él hombre que conoció y que no debería estar muy preocupada, que muchas jóvenes de su edad hacen eso hoy en día.

- Pero usted no lo cree así - Jungkook abrió la carpeta, había fotografías de la joven, con las palabras "Desaparecida" o "Se busca" escritas abajo, junto con números de teléfono, y otras fotos.