Entraron

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La lluvia caía con fuerza sobre los árboles azotando sus hojas creando pequeños tornados cayendo al suelo con rapidez, quien hubiera pensado que las pequeñas ráfagas eran perfectas para Nezuko quien parecía bailar entre los árboles. Los pasaron fugaz mente causando emoción en su hermano cuando volvió con su katana además de un pequeño cuervo en su hombro demostrando su desempeño en la prueba.

Una vez partieron a su primera misión se despidieron de su maestro puede que no lo admitiera con sinceridad, pero le había cogido un pequeño cariño a aquel señor Urokodaki.

Sus misiones eran débiles no importaba cuantos demonios matara parecía no llamar la atención de los pilares, ni se había vuelto a encontrar con aquel Hashira de ojos azules—¿Debería de buscarlo? —pregunto al aire que simplemente se detuvo al igual que su aliento

Acaso la vida le jugaba una mala pasada, se apretó los labios con fuerza agitando su mano mientras se acercaba a los demás cazadores que rondaban por el bosque con diversión fingida paso por sus lados llamando la atención de todos ellos. Tal vez por su belleza que los cautivaba se les quedaban mirando, aunque no por mucho tiempo.

—Si sigues así papá matara a todos los humanos que te sonrían—se escuchó un leve murmuro que su hermana solo suspiro mientras reía—¿Quién sabe? —respondió alzando los hombros sin importancia para poder llegar a su misión asignada

Una vez llegaron no dudaron en ocuparse del demonio con rapidez se desasieron de él observando cómo se desvanecía en su presencia para luego mirarlo con aburrimiento. Aquel cuervo que se posó en su hombro la miro con curiosidad mientras que Nezuko simplemente lo alzo para que volara y buscara una nueva misión para ella.

Sus minutos eran valiosos para ella mientras más esperaba, más la estresaba por no conseguir lo que necesitaba, ahí estaba caminando entre las multitudes de personas que paseaban con tranquilidad en las calles de su ciudad sino fuera por una pequeña buya de un sujeto gritando "Umai" a cada trazo que comía un bocado de su comida.

Con curiosidad se acerco al restaurante y se llevo una gran sorpresa al ver aquel sujeto de cabellos anaranjados y por la katana que portaba a su costado—Un pilar—sonrió a sus adentros mientras lo observaba

Renguko comía con rapidez, pero de un momento a otro se detuvo al sentir una mirada sobre su espalda cosa que volteo de reojo notando como un joven de kimono rosa se acercaba—¿Puedo ayudarla jovencita? —sonrió con felicidad mientras la observaba

Nezuko suspiro sentándose al costado del pilar—Usted es un pilar cierto—sonrió mientras lo miraba con orgullo

Sorprendido por su acción asistió con la cabeza—Y tú eres un aprendiz, pero estas en lo correcto soy Renguko pilar de la flama—respondió con una sonrisa

Se quedaron a charlar un parde minutos cuando la noche cayo sobre la ciudad retirándose del lugar caminaron entre la gente.

—Me imagino que debe ser muy emocionante—camino con alegría hasta que se detuvo de inmediato por su cuervo que llegaba a donde ella—Parece que tengo una misión—hablo con carisma

Aquel cuervo le indico que tenia que ir al sur por lo que se despidió de su amigo el pilar, pero antes de que se fuera lo miro rápidamente esperando que se perdiera entre la gente para luego sonreír—Sera emocionante—susurro para si misma mientras se dirigía al bosque donde una pequeña explosión le llamo la atención—Interesante

Las flamas de fuego se extendían sobre todo el alrededor mientras que Nezuko observaba a la gente correr despavorida, sin duda no estaba de emoción como para enfrentarse a algún demonio de clase baja, pero algo le llamo la atención fue aquel zumbido del pilar de fuego donde se defendía con su katana. La rapidez con la que se movía era magnifica causando una ligera impresión, se acerco con cautela subiendo a uno de los tejados para mirar la pelea vaya fue su sorpresa al ver con quien peleaba.

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⏰ Last updated: Feb 22 ⏰

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Danza de la luna NezukoWhere stories live. Discover now