TENTATION 2 -FreenBecky G!p

CAPITULO 16

Holaaaa aquí les traigo el maratón con 4 capítulos.
Que los disfruten.👍🏽

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Le besó la boca. Duro. Sin compasión. Apretando fuerte ante los labios de Becky. Incluso hasta hacerla gemir por la dureza de su boca contra la suya. Desesperada y alocadamente ardiendo en deseo, deslizó sus manos con rapidez por las caderas desnudas de ella hasta llegar a sus muslos. Sus gruesos dedos la tocaron con brutalidad.

- Basta... - logró articular ella. Pero la lengua de Freen volvió a penetrar su boca. Un beso húmedo y duro. Que excitante era todo esto. Decidió unírsele y no hacer nada para detenerla.

Y Freen tampoco lo haría. Sus manos apretaron las caderas de Becky. Su erección, lista y dispuesta para hundirse en ella, rozó su vientre. Suave. Tan delicado. Becky soltó un gemido suave al sentir la cabeza del miembro de Freen contra uno de sus puntos más débiles en todo el cuerpo. Su piel se erizó. Su vientre se contrajo. Un deseo maldito se abrió en ella. Quería hacerle el amor ahora mismo. Y mientras ella la besaba descontroladamente en la boca, ella hizo funcionar sus manos, atrapando el miembro de Freen con ellas.

- Oh... nena... - esta bajó la cabeza, separándosele. Mirando directamente las manos de Becky apretarle la erección. Sus ojos se volvieron oscuros llenándose de lujuria acumulada. - ¿te gusta? - preguntó, levantando los ojos hacia los de ella.

Becky asintió. Tenía los labios ligeramente hinchados por el anterior beso de Freen Prestó atención al semblante de ella. Duro. Cada músculo de su cuerpo estaba tenso. Mientras se retorcía en su sitio, al compás en el que ella movía su mano en toda la longitud de su erección. Tragó saliva. No había nada que le excitara más que verla rendirse ante ella por el tacto de sus manos. La escuchó gemir. Con aquella voz ronca y suplicante que ella siempre deseaba escuchar. Era la mujer de su vida. Aquella que estaba a punto de entregársela todo en un simple toque.

La escuchó gritar ahora. Pues el ritmo de sus manos había aumentado. Ahora subía y bajaba de entre el miembro de Freen con más rapidez. Volviéndose loca. Insaciable. Esto era lo que deseaba. Pero había algo más, algo que anhelaba mucho más...

- Sí... sigue, sigue nena... - rogó Freen. Sus ojos estaban cerrados con fuerza.

Las manos de Becky desvanecieron la fuerza y soltaron poco a poco. Mientras los ojos de Freen se abrían al mismo tiempo, debido al desconcierto. Quería más. Mucho más. Y eso sería exactamente lo que ella le daría. Más. Como siempre, muchísimo más.

Ahora, queriendo tomar el control, tumbó a Freen a su lado. Cayendo desvanecida y desfortalecida. Esta la miró con los ojos abiertos. Expectante.

Vaya. Esta era la Becky que le gustaba tanto. La Becky poderosa. La que tomaba el control en la cama y la hacía soñar en alto con tan solo meterse en su cuerpo. Relamió sus labios al verla subirse sobre sus caderas. Ambas piernas quedaron a los costados. Mnh... sí, podía sentir su vagina húmeda contra su piel. Ella se movió un poco. Satisfaciéndose sola, hizo otro movimiento más intenso sobre ella y soltó un gemido agudo.

- No hagas esto más difícil... - rogó Freen, mientras observaba derretida y excitada como Becky se movía sobre sus caderas excitada, aun sin haberla penetrado... - te quiero Becky. - dijo embelesada por la escena. Era todo lo que necesitaba. Estar dentro de ella con urgencia. Así que la tomo de las caderas y elevó su cuerpo, para que este regresara y ella pudiera hundirse con toda su longitud en ella.

La boca de Becky se abrió hipnotizada. Un grito fuerte adornó la habitación. Freen estaba dentro de ella. Toda. Absolutamente. Sin olvidarse de ningún centímetro. Toda su erección cubría sus expectativas. La estaba llenando colosalmente. Sin darle tiempo si quiera a respirar. Elevó las caderas e hizo que Becky gritara con muchísima más fuerza. Su cuerpo se tensó al verla así.

Entregándosele una vez más. Saber que la satisfacía de esa manera le hacía tan jodidamente feliz. Pero quería más. Así que salió de ella lentamente, rozando toda su maravillosa longitud en cada espacio de la vagina de Becky. La dejó sin aliento al cogersela una vez más. Toda su erección volvió a entrar en ella. Esta vez Freen apretó las caderas de Becky con las manos, para que ella pudiera apoyar sus manos sobre el pecho de ella. Al hacerlo, empezó a moverse... lento, preciso, delicioso... hizo la cabeza para atrás y se movió más. De arriba hacia abajo. Gozando la satisfacción de sentirla bajo ella. De sentirla dura y larga bajo su sexo. Se mordió el labio y cerró los ojos ante la sensación. Maravillosa y perfecta sensación de tener el control. Tragó saliva. Estaba a punto de llegar y venirse sobre ella. Pudo notar que ante cada movimiento Freen apretaba más sus caderas. Haciéndole entrar más intensamente. Y volvió a moverse. Esta vez en círculos pero sin dejar de entrar y salir de entre sus entrañas. Era la sensación más intensa que había sentido jamás. Cada vez era mejor. Cada minuto era mejor. Faltaba cada vez menos para que ambas se vinieran al mismo tiempo. Y así fue. Ambas se vinieron. Mientras ella apretaba las manos de Becky con fuerza y ella juntaba su cuerpo con el de Freen. Abrazándoselo.
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- Te voy a extrañar. - confesó Becky. Apretó el pecho de Freen con su brazo izquierdo y hundió su rostro en su cuello, dando pequeños besitos sobre ella.

- Serán tres días, preciosa. - respondió Freen Los besos de Becky le hicieron sonreír. Pero muy dentro de ella, otra vez el deseo se había abierto. Amaba cuando le besaba el cuello. - solo tres días.

- ¿Confío en qué ninguna fan, lunática y desesperada, va a acercarse a ti? - ella enarcó una ceja y se separó para poder observar la expresión de Freen ante su pregunta.

- No confíes tanto...

- ¡Sarocha!

- Solo estoy bromeando nena. - rio entre dientes y acarició por debajo de las sábanas el muslo desnudo de Becky, subiéndolo sobre su cadera.

- después del sexo te pones tan...

- ¿Tan qué? - le retó.

- Vulnerable. Me gusta.

Beckypuso los ojos en blanco.

- ¿Puedo confiar en qué ningún estúpido, idiota, baboso e imbécil hombre que no tiene idea de lo que le pasará si lo encuentro, se acercará a ti? - preguntó Freen. Realmente comprometida en sus palabras. No bromeaba, pero a Becky parecía haberle dado gracia desde el principio de su pregunta, pues no había dejado de reír. - ¿por qué te ríes?

- Después del sexo te pones tan tonta.

- Me dejas mal... - acarició el muslo de Becky con sus dedos largos. Gustosa por el tacto, tocó más y más su pierna. - ¿por qué no me respondes?

Ella sonrió para sus adentros. Freen celosa demostraba tantas cosas juntas. Cuanto amor le tenía. Cuanto le deseaba. Lo mucho que no quería perderla. Tres días era una inmensa eternidad. Ahora podía notarlo. La extrañaría tanto definitivamente. Tenerla cada noche a su lado. Cada mañana. Nunca habían pasado tanto tiempo separadas desde lo de Tentation... pero eso ya había quedado en el pasado.

Ambas se quedaron calladas por varios minutos. Que frío. Pero el calor de sus cuerpos hacía que se mantuvieran calientes. Y mucho más que eso. Becky acurrucó su rostro sobre el pecho de Freen, abrió sus preciosos ojos marrones y dejó a Freen embelesada por su mirada y ligeramente excitada también.

- ¿Dudas de mí? - preguntó ella. Una pregunta que se quedó tendida e ignorada en el aire. Pues Freen la había atraído hacia ella. Besándole los labios suavemente. Mantuvo los ojos abiertos, observando como Becky movía su boca contra la suya. Lento y sutil. Un beso húmedo que dejó sus labios mojados por la desesperación. Un beso húmedo que le dejó pensando mientras divisaba a Becky derretirse sobre su boca...

Tenía razón... ¿por qué dudaba de ella?

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