Volviste

149 17 7
                                    


—Hoy volviste a mi, que alegría, por un momento pensé que habías olvidado nuestros pequeños juegos y citas... Pero lo bueno es que ya estas de vuelta.

—Si hay algo bueno en tu ausencia es que me dió un ligero tiempo para recuperarme medianamente, bueno, al menos ahora puedo ponerme de pie sin caerme a los pocos segundos. También me dió la suficiente energía para masturbarme pensando en tí, aunque tuve que cortar la palma de mi mano con el lápiz con el que escribo esto para usar la sangre como lubricante, pero no estamos aquí para hablar sobre eso.

—No, de hecho, lo que me interesa anotar ahora es sobre tu actitud pues aunque decidiste dignarte a mostrarte ante mi una vez más, te noté un poco más decaído que otras veces... Parecias tan serio... No me gustó para nada, me gusta cuando mi amado rie sádicamente y su rostro se ilumina ante mi sufrimiento sin embargo hoy no obtuve nada de eso ¡Que frustrante!

—Sera mejor que cambies eso pronto, porque me niego a que dejes nuestros juegos de lado solo porque eres una perra quejumbrosa. Cambiando de tema, quisiera saber la verdadera razón por la que te urge tanto tener ese maldito libro ¿Para qué lo necesitarías, de todos modos? Si hay algo que he aprendido a lo largo de los años esque la naturaleza te asigna un rol cuando naces y el tuyo es el de una presa ¿Entiendes? No estás destinado a ser el que tiene poder aquí, no, tú solo debes estar ahí y verte bien para los demás, así fue con Jschlatt y así será hasta el fin de tus días ¿Escuchas?

—En fin, si no lo descubres tú mismo entonces alguien más te hará entrar en razón... Y claramente me ofrezco como tributo.

—Adios, Duckling, nos veremos pronto.

–:)

-CARTAS-Where stories live. Discover now