Emily es una serafín algo infantil y descuidada; Sera, preocupada por la seguridad de la joven decide asignarle un guardián y que mejor que uno de los mejores guerreros del ejército del Cielo.
Lute se verá involucrada en la tarea de cuidar a una ser...
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Capítulo 3: Apostamos demasiado
Una nueva semana había empezado, luego del desastre que había sucedido hace unas dos semanas atrás, Charlie y Vaggie no dejaban que Emily salga demasiado, descubrieron que la serafín era bastante influenciable y eso era bastante malo.
Por otra parte Angel se había quedado recluido en su habitación, se le había prohibido salir después de lo que sucedió y aunque no se lo había tomado muy bien, sabía que era por el bien de Emily y tenia que aceptarlo, le gustase o no.
Entonces ¿con quien pasaba tiempo Emily mientras el castigó de Angel avanzaba? Con el menos letal del grupo, Sir pentious.
—Señorita Emily ¿me pasa esa pieza?— preguntó la serpiente, la serafín una pieza de la caja y se la dio.
—Exactamente ¿que estamos haciendo?— preguntó Emily mientras veía una extraña máquina.
—Bueno, estuve pensando en la ola de calor que nos atormenta últimamente y pensé en hacer una máquina de helados.
—¡Genial! Pero ... ¿de donde sacaremos el hielo?
—Eso se resuelve fácilmente, iras a comprarlo y lo traerás, mientras yo preparo los sumos que usaremos— indicó Sir pentious.
—Eso suena bien, pero olvidas algo.
—¿Qué?
—Estoy castigada y eso significa que no puedo poner un pie fuera del hotel— explicó Emily
—Bueno ... puedes volar, entonces no estarías poniendo un pie fuera del hotel.
—Eso suena tonto, pero en teoría es cierto.
Sir pentious sonrió, tomó algo de dinero que guardaba y se lo dio a Emily; le indico con exactitud donde podría encontrar una tienda de hielo, la serafín asintió y completamente decidida salió volando por la ventana de la habitación de Pentious.
El camino era sencillo, debía avanzar unas calles más y luego voltear a la derecha, entonces hay encontraría la tienda de hielo. Entro volando, pidió la bolsa más grande y se retiró del lugar arrastrando el hielo que había pedido.
—¿Nesecitas ayuda?— preguntó una chica que se asemejaba a un búho.
—Ehh si, quiero llevar esto al Hotel Hazbin ¿lo conoces?
—Me dirijo hacia allá, por cierto soy Octavia o puedes llamarme Via
Una pequeña presentación que podría o no cambiar el ritmo de la historia. Via y Emily hicieron todo lo posible para llevar la bolsa de hielo al hotel, por suerte el hielo llegó completo; la serafín abrió la puerta y dejó pasar a su nueva amiga.
