El gran día

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Los días habían transcurrido desde la liberación de Reich, las especulaciones de reporteros y el acoso que recibía parecía no importarle en lo absoluto. ONU lo había dejado solo desde hace unas semanas, y llevando la contraria de lo que la organización pensaba, Reich se adaptó muy rápido a su entorno, no podía negar que le gustaba aprender, y desde que salió del encierro se dedicó a estudiar la modernidad.

ONU le había regalado un par de aparatos electrónicos, como ordenador, móvil y una Tablet, Reich estaba muy emocionado, y pasaba todo el día viendo videos documentales, creando cuentas en las redes sociales, viendo programas farándula, noticias y más, si bien, habían cosas que se le dificultaban mucho, no dudó en ponerlas en practica para aprender. Este nuevo mundo era una maravilla para Reich, le facilitaba tantas cosas, podía ordenar pedidos online, comprar artículos de otros países, hasta hacer citas médicas él mismo.

Reich se encontraba sumergido en un baño de burbujas y perfumes, tenía el rostro cubierto por productos de cuidado facial, y en sus manos la Tablet (su aparato favorito) Estaba viendo un par de reportajes sobre las marchas feministas, le gustaba el caos y la visión de estas mujeres, pero lo que hacía odiar el movimiento era la idea de que ellas destrozaban los monumentos, como gran conservalista que era, eso le parecía una monstruosidad.

Continuó deslizando y vio un post de la cuenta de cierto americano, este estaba muy emocionado, grabando desde la cabina lujosa de su avión privado, al parecer se encontraba fuera de su territorio y tenía que regresar, Reich fue invadido por la curiosidad e ingresó al perfil, vio cada publicación hecha y los seguidos de este.

Se dio cuenta que los countrys no solo eran la representación de una nación, ahora podían tener vidas, y no solo mantenerse al margen de las ordenes de los lideres, Estados Unidos era dueño de una cadenas de hoteles, Francia tenía una cadena de restaurantes, Inglaterra era director de un bufete de abogados, Imperio romano era dueño de unas academias deportivas y otros países eran celebridades de la moda.

Para Reich, esto era lo mejor del mundo, apresuradamente buscó a sus aliados de guerra, siendo el primero Imperio japones, quien no tenía mucha información, mas que unas fotos de vasijas y otras artesanías, se sintió emocionado cuando vio un video donde salía él y su hija, ambos estaban celebrando el año nuevo y se les veía muy felices.

Seguidamente buscó a Italia, quien tenía su perfil repleto de fotos suyas en aventuras interesantes, algunas eran graciosas, otras deprimentes y el resto eran simplemente Italia siendo Italia.

Continuó con su búsqueda, encontrándose con el perfil de Rumanía, quien era director de películas y solía publicar detrás de cámaras y fotos con los famosos, mientras buscaba a Hungría, se topó con el perfil de uno de sus conocidos, ingresó y vio un par de fotos, no sabía como reaccionar, la mayoría de las publicaciones eran de animales de caza, fotos en galas importantes y algunas fotografías con mujeres importantes del mundo del cine, Reich dejó el aparato electrónico a un lado y sumergió su cabeza bajo la espuma

Estuvo pensando bajo el agua, tenía una idea, salir en redes sociales como el resto. Antes todos los países eran obligados a estudiar únicamente temas relacionados con la política, sin embargo, ahora podían cumplir mas funcionas, luego de horas pesando y dos botellas de vino, Reich tomó una decisión, salió de la bañera y buscó entre todas las prendas que ONU le había enviado, estaba algo nervioso, pensó en preguntarle a ONU, pero creyó que no fuera tan malo publicar una inofensiva foto.

Todo estaba listo, el alemán buscó las prendas perfectas para que contraste con el fondo, tomó al gato que le hacía compañía y con todos los detalles listos, dio inicio a la foto, luego de un par de minutos dudando sobre publicarla o no, tiró una moneda, seguidamente publicó la foto, sintió gran alivio al pasar las horas y ver que nada malo había sucedido, dejó el móvil sobre el sillón y fue a su habitación a ver una serie que le gustaba mucho.

Caminó con tranquilidad hasta la habitación, tomó el ordenador y lo dejó sobre la cama, apagó todas la luces y se dispuso a dar inicio a la nueva temporada, estaba tan emocionado que olvidó por completo la foto, todo era perfecto.

Horas después, Reich se encontraba absorto frente a la pantalla del ordenador, con los ojos brillantes y una sonrisa de emoción en el rostro. Cada capítulo de la serie que estaba viendo lo absorbía por completo, sumergiéndolo en un mundo de emociones intensas y giros inesperados.

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⏰ Last updated: Mar 27 ⏰

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