Pequeña decepción

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Felix tomo, y no tomo el consejo dado por su mejor amigo.

No dejo el gimnasio, ni sus caminatas, pero en lo que si le obedeció fue en disfrutar en ciertos días de la semana, una que otra chuchería.

En parte admitía que la razón por la cual había bajado de peso fue por el comentario de Changbin, pero él no lo había obligado, además su Hyunnie debería estar feliz.

Pues ahora podría alzarlo y sentarse en su regazo y no pesaría tanto.

—Bebe—lo saludo, dándole un abrazo de oso al verlo salir de su casa.

—Hola Hyunjinnie—le dijo, correspondiéndole.

—¿Cómo esta mi gatito? —le pregunto acariciándole el cabello, antes de encender nuevamente el carro para ir a la escuela.

—Mm tuve una pesadilla—le dijo en un murmuro.

—Sobre serp—Hyunjin no pudo continuar pues su gatito no podía ni siquiera escuchar el nombre de aquel reptil.

—N-no necesitas nombras a esas cosas, solo, me es complicado superar mi fobia, y el hecho de tener pesadillas con eso es horrible—puchereo.

Hyunjin agarro su manita y la acaricio.

—Creo que debería llevarte a un lugar para que te hagan una terapia—opino Hyunjin.

Felix algo inseguro asintió.

—O solo puedo dejarlo así, y ya, vere como superar el miedo ah—el pensamiento de aquel animal llego a su mente y le dio un escalofrió, sintiendo su mano temblar.

—Ni siquiera puedes nombrarlo bebe te avisare cuando saque la hora—le dijo, dándole acaricias.

Felix asintió y se dedicó a escuchar música mientras que en cada rojo recibía mimos de parte de su Hyunnie.

Ambos chicos llegaron al establecimiento recibiendo las típicas miradas de envidia.

Algo normal.

—Hyunnie ¿hoy estas ocupado? —le pregunto, abrazándolo.

Hyunjin negó y le correspondió, sintiéndose cálido en los brazos de su amigo.

—Quiero que hagamos maratón de películas versión crepúsculo—le dijo, con una sonrisita.

—Como tu quieras mi vida, nos vamos después de clases a tu casita—

Todo iba bien hasta que Felix vio como una chica estaba en el regazo de Seo, mientras que este tenia sus manos en la cintura de la chica.

Hyunjin al ver eso gruño, agarro a su Felixie de las mejillas y lo obligo a verlo a los ojos.

—No. —le dijo, antes de que su bebe lograra formar una oración—mi bebe te lo dije, por favor—le rogo.

Felix lo abrazo aferrándose.

Que le vez a ese idiota// pensó, tratando de entender a su mejor amigo.

—Yo solo quiero gustarle ¿es tanto pedir? —puchereo.

—Mi amor ese idiota no vale la pena, busca a alguien que sepa valorar tu corazoncito de pollo—le dijo envolviéndolo en sus brazos.

—Pero no comprendo ¿Qué es lo que me falta? —pregunto confundido.

Nada, no le faltaba nada.

—Yo tengo una idea, pero antes hablaremos de eso en casa, ahora iremos a la cafetería a tomar desayuno—le dijo agarrándolo de la muñeca sin dejarlo protestar.

úsame -HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora