𝐑𝖾𝗅𝖺𝗍𝗂𝗈𝗇𝗌𝗁𝗂𝗉 𝐂𝗈𝗇𝗍𝗋𝖺𝖼𝗍 | 𝐏𝖺𝗎𝗌𝖺𝖽𝗈

─── 𝐗𝐈

𝑨𝘯𝘥 𝘺𝘰𝘶 𝘢𝘯𝘴𝘸𝘦𝘳𝘦𝘥... 𝑾𝘩𝘦𝘳𝘦 𝘸𝘦 𝘨𝘰?
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El cielo se pintaba de colores oscuros y empezaba a llover, el pasto estaba frío y los paraguas comenzaban a abrirse mientras que los sollozos de una niña eran el único ruido que había en el lugar.

El neerlandés no podía creer lo que estaba viendo, enfrente de él había dos lápidas de piedra, en una se leía el nombre del esposo de su ex prometida y en el otro el de la brasileña.

Los seres queridos de los ahora difuntos no lloraban, sus caras ni siquiera eran pálidas y solo la ropa de algunos era de color negro. Según la madre de Kelly la pareja había estado discutiendo mientras Daniil manejaba y después de un forcejeo entre los dos salieron de la carretera muriendo en el impacto.

Sergio apretó la mano del neerlandés en señal de apoyo y cuando se volvió a oír otro horrible llanto de la pequeña niña que estaba tirada en el suelo en medio de las dos lápidas, Mery apretó el brazo de Nico y el neerlandés entrelazó su mano con Checo apretando aún más el agarre.

Y parecía que solo a ellos les importaba lo que pasaba con la pequeña, porque los demás presentes ni siquiera la volteaban a ver. Ni siquiera cuando la madre de Kelly le dio la noticia a Mery, -l-pues ella atendió la llamada-, se podía oír que lo decía de lo más tranquila, como si no le hubiera importado.

Toda esa situación hacía sentir culpable a la castaña, pues Daniil había ido por Kelly siguiendo con su plan, los había reunido en un café pero la canadiense tuvo que irse dejándolos solos y cuando volvió y no los vio pensó que su plan había funcionado sin saber lo que en verdad ocurrió.

El cabello de la niña comenzaba a mojarse al igual que su vestido negro, el neerlandés no pudo más y se acercó a la pequeña niña y se puso de cuclillas para poder ponerle el saco que él llevaba, la niña volteó a ver a Max y el primer instinto que tuvo fue abrazarlo.

Se quedaron en esa posición unos segundos y después Max se llevó a la niña en sus brazos a donde estaban sus amigos y Sergio refugiándose de la brisa. Trataba de tranquilizarla, pero era casi imposible, la niña estaba desconsolada, y como no estarlo, sus padres habían muerto.

Una vez el padre terminó de dar su discurso las personas comenzaron a irse y poco después se oyeron gritos por parte de Sylvia, la madre de Kelly.

-¡Yo no quiero ese engendro en mi casa! -gritaba la holandesa.

-¡Nosotros no podemos solventar la educación de una niña, ni todos los cuidados que necesita! -le contestó el padre de Daniil.

Toda esta situación congeló a los presentes y Sergio y Mery estaban que ardían de furia, ¿Cómo podrían hacerle eso a una pobre niña?

Sergio sabía que no era prudente hacer un escándalo, sin embargo la chica no se quedó de brazos cruzados y caminó furiosa hacia ellos, pero Max la detuvo y fue él quién tomó su lugar.

-¿Pueden dejar de gritar? -regaño Max a los adultos- La niña acaba de perder a sus padres y ustedes solo piensan en deshacerse de ella, que horribles abuelos son.

Después de esas palabras volvió con Sergio y tomó a la niña en sus brazos, acarició su cabello y le sonrió, y no pudo evitar pensar en él cuando Jos falleció.

Sus abuelos también se habían peleado por quién se quedaría con él, porqué su madre estaba enferma y los padres de Jos no lo querían, se había sentido horrible y abandonado, hasta que llegó Christian como un salvador en su vida y lo acogió como si fuera su hijo.

-¿Cuál es tu nombre pequeña? -preguntó el neerlandés y la niña se talló sus ojitos secando algunas lágrimas.

-Me llamó Penelope -le contestó tratando de sonreírle- ¿Y usted señor?