PEQUEÑA AYUDA

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YŪJI POV

Hoy, me he despertado con un terrible dolor de cabeza, y vagos recuerdos de la noche anterior. Me maldigo a mismo. ¿Qué diablos estaba pensando? Ha pasado tanto tiempo desde que bajé la guardia así, ¿Fue porque me sentí seguro con Nanami? ¿O quizás si se me zafaron los tornillos?

Intento acostumbrar mi vista a la oscura habitación la cual sé que no es mi cuarto de hotel, tampoco mi antiguo apartamento, y menos el pent... - ¡¿El pent-house?! - exclamo mientras intento levantarme pero algo me lo impide, o mejor dicho alguien.

Al girar mi rostro Satoru esta profundamente dormido, uno de sus brazos ha estado bajo mi cuello cumpliendo la función de almohada, y el otro esta sujeto con fuerza a mi cintura. Estoy por reclamar, pero a mi mente vienen vagos recuerdos de anoche.

No, no, no puede ser. Me reprendo mentalmente.

"Esa no es forma de tratar a tu... esposa." ¿Yo en verdad dije eso? ¡Mátenme!

Siento mi corazón acelerarse de golpe mientras pienso en la forma de menos vergonzosa de retractarme de lo que le dije. Este idiota no me dejará en paz jamás en la vida, eso es un hecho.

- La resaca esta haciendo su trabajo, ¿eh? - dice Satoru con voz soñolienta sin siquiera abrir sus ojos mientras me acerca más a su cuerpo. Su voz tiene cierta dulzura y su aroma nos envuelve como si estuviéramos en nuestra propia burbuja. - No dejaré que te retractes. - dice son una sonrisa en su rostro.

- No sé de qué hablas. - respondo nervioso, pero intento cambiar el tema. - ¿Qué pasó anoche? - pregunto con una mezcla de sentimientos de vergüenza, preocupación, miedo y nervios. Sé que algo malo sucedió, más no recuerdo nada más. - Sukuna te llamó, y lo del pent-house. - agrego en un susurro.

Con pereza comienza a abrir sus ojos. - Estoy seguro de que si lo recuerdas. - ríe mientras entierra su nariz en mi cuello. - Y de lo otro, ya me estoy encargando de eso, no tienes que preocuparte. - dice ignorando mi pregunta, lo que causa cierta molestia, ya que parece que me trata como a un niño.

- Satoru. - advierto y él solo sonríe. Su agarre por fin se afloja y puedo sentarme en la cama. - ¿Qué demonios está pasando? ¡No me trates como a un idiota! - exclamo y en respuesta solo recibo un suspiro.

- Y yo que pensé que, por fin, habíamos avanzado. - frota sus ojos y también se sienta en la cama. - Te lo dije, nos atacaron. Volaron el pent-house, pero Megumi, Suguru y mi madre están bien. - dice sin dar mayores detalles

- Hmmm. ¿Y la llamada de Sukuna? - insisto y me acerco un poco más. - Dijiste que iremos a Yokohama, ¿acaso mi familia...? - me aterra decir las siguientes palabras y un nudo se forma en mi garganta.

Sin embargo, toma mi mano y deposita un breve beso en ella para luego llevarla a su mejilla. - Choso está bien. Aún estaba resolviendo asuntos pendientes aquí en Tokio, pero... - hace una pausa que hace que mi cuerpo tiemble. - Los Kamo atacaron el puerto en el que los Itadori y lo Gojō hacen negocios. Al parecer la pareja de Sukuna y tu abuelo se encontraban cerrando un trato durante el ataque. - siento mi corazón detenerse ante aquellas palabras, el terror invade todo mi cuerpo y las palabras no salen de mi boca.

Satoru me abriga de nuevo en sus brazos. - Tu abuelo está muy mal, pero esta estable. Suguru salió de inmediato para encargarse de su seguridad, esta en manos de los mejores médicos de Japón. - susurra mientras libera su aroma para calmarme.

- ¿Y Uraume? - pregunto con voz quebrada.

- Sobrevivió, pero parece que perdió al cachorro. - dice con un tono de voz muy suave. - Sukuna se fue con Suguru anoche, por eso me llamó. - explica. - Nanami se está encargando de mover a todas sus influencias para encontrar a los que ejecutaron el plan, me encargaré de ellos personalmente y luego iremos por la raíz del problema. - dice con tranquilidad.

VOTOS MORTALESHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin