Capitulo 7

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Todavía lo recuerdo... Mi casa, mi hogar, en el que crecí de niña.
Las paredes eran amarillas y con algunos dibujos a crayon en ellas, tantas cosas que viví, creí que me prepararían para todo, para crecer y ser más fuerte, para vivir feliz y seguir adelante... Nada podría prepararme para esto.

26 de Enero de 2004

Tomada de la mano de Adora, entre al instituto, los chismes comenzaban a correr y me ponía cada vez más nerviosa, la observe, traía una cara de orgullo gigantesca y entró dando una ridícula caminata (Parecía un Gorila con falda) solo dimos unos cuantos pasos y me soltó, dio unos más rápidos a la cafetería y se despidió con un guiño entro a esta corriendo y quedé estática en el centro de los pasillos, caminando a mi casillero una gran mano tomó la mía haciéndome girar.
-PERO SEÑORITA WEAVER- Scorpia me miraba con picardía enormemente.
-Hola Scorpia- Abrí mi locker y saque unos cuantos libros de el.
-Viste lo mismo que yo ¿cierto?- Sonreía enormemente y se acerco a mi oído.
-¿Estuviste en algo con Grayskull, Catra?... ¿algo romántico?- Ella levantaba sus dos cejas y me hacia leves cosquillas en mi brazo que me hicieron retorcerme un poco.
-No Scorpia, Adora es mi amiga- Cerré mi casillero y caminé a mi aula aguantando las preguntas de mi gran amiga que parecía no saber cuando callarse.

Después de unas cuantas horas salí del colegio, me senté en el banco frente el a ajustarme mis cordones, me coloque mis audífonos, tome mi patineta y fui a casa.
El viento golpeaba mi cara, tal como aquella vez, aquella noche, mis piernas comenzaban a temblar, recordaba aquel beso, el frío atacando mi cuello, sus manos en las mías, leves luces alrededor nuestro...
-MIERDA- Caí de la patineta al chocar con una minúscula piedra - DEBES TENER MÁS CUIDADO, TORPE CATRA- Me dije a mi misma mientras me levantaba del suelo y comenzaba a sacudirme.
-Ten cuidado, Idiota- El bobo más grande que e conocido escupía a mi costado mientras se reía a carcajadas.
- Cierra tu sucia boca, Erik- Lo esquive caminando a casa, no me faltaba mucho solo un par de casas me dije.
El me tomó del brazo y me acerco a si, parecía sediento y me miraba de arriba a abajo, su aliento era horrible y pesado, creo que podría matar un rebaño con eso (odio a este tipo) intente soltarme pero era inútil.
-Que mierda quieres- Mis ojos se dirigían a su boca, su asquerosa y repugnante boca que comenzaba a ser abierta.
Le golpee el estómago con mi patineta y corrí a casa.
-JODETE WEAVER- escuchaba mientras corría y me montaba de nuevo en mi patineta.

Desde hace tiempo que e intentado no encontrarme con Erik, es difícil a veces, se sienta a mi lado en clase solo para Joder cuando Scorpia o Adora no ocupan ese lugar, esta con su grupo de imbéciles frente a la cafetería después del almuerzo y a veces ronda mi vecindario, un completo tonto.

"A veces me gustaría desaparecer, ser una nube de humo y volar muy alto pero sin tocar el cielo, quedarme en un lago hermoso, brillante por la luz del sol, tener el poder de decidir si irme o permanecer..."

-Papá... - la figura de mi padre inmóvil en el teléfono fijo me regreso de mis pensamientos, sus ojos estaban quietos y su respiración agitada, el teléfono resbaló de su mano derecha y golpeó fuertemente el suelo -Papá ¿qué ocurre?- Tomo su abrigo y salió de casa empujándome fuera de la entrada, salió en su auto a un rumbo desconocido... ¿Debería preocuparme?.

-Lonnie, ¿que estas haciendo linda?- Mi hermana realizaba un dibujo sobre la mesa con distintos crayones de colores.

-Hola Cata- Sus ojitos que se despegaron por un segundo del papel volvieron a el -Estas concentrada por lo que veo- Le dije para después depositar un beso en su cabeza e irme a mi habitación, aventé mi mochila lejos de mi cama y salte a está, quería dormir un largo rato, cerré mis ojos lentamente, me deje envolver por mi cobija y respire profundamente...
-CATRAAAA- (Mierda) me levante de golpe, pensé que aquellos gritos eran de mi hermana pequeña, así que regrese a la sala, ahí seguía ella con su dibujo tranquilamente -¿Me llamaste?- Lonnie me miro nuevamente y negó con su cabeza -Debes haber escuchado mal- (supongo) Decidí volver a mi recamara y continuar lo que había planeado en un principio.
-CATRAAA WEAVERRR- Aquellos gritos venían de afuera, me asomé por mi ventana que daba a la casa vecina y un poco del frente de la casa: Adora Grayskull y un gran ramo de rosas en su mano,
mis mejillas se enrojecieron rápidamente y comencé a divagar en mi habitación (¿QUE HACÍA ELLA AQUÍ?)...
Abrí la puerta principal después de haberme cambiado por completo.
-Adora ¿que haces aquí?- Mi cuerpo se recargo en el marco de la puerta intentando dar un aire más dominante y tranquilo a la situación (OBVIAMENTE NO LO ESTABA).
-Catra... Hola- Sus manos se veían inquietas y apretaban el ramo fuertemente -Vine a invitarte a... ¿por un café?- se rascaba su nuca mientras me decía esto, sus mejillas coloradas y su bello cabello recogido me dejaron sin aliento, hace tiempo que habíamos hablado y comido juntas durante el colegio... y ahora ella obviamente me estaba invitando a salir, pero no lo podía creer todavía, es casi irreal.
-¿Me estas invitando a salir? - Mis mejillas rojas y mis manos algo sudorosas comenzaban a fusionarse en la situación.
-Eso creo... - Ella sostenía el ramo con fuerza y después lo estiró hacia mi.
-Gracias- tome el ramo y lo lleve a mi pecho, tenían un olor peculiar y persistía el olor de su perfume.
Salí con Adora a la cafetería más cercana, uno de mis favoritos por cierto, paso por ahí cada que voy a mis trabajos de medio tiempo, el olor del café me mantiene despierta.

-Un capuchino simple y 2 bollos de queso, por favor- Adora se atrevió a pedir dándome el pequeño menú de la cafetería mientras me miraba por encima de él -¿Que pasa? Jajaja- me hizo estremecer con su típica expresión de cruzarse de brazos (QUE CHICA) -¿Bollos de queso, con café, enserio?- Solté una pequeña risa nasal y cubrí mis labios levemente - Es obvio que nunca has llegado al cielo, esto, es gloria señorita, Weaver- Ella jugaba con sus dedos y me miraba fijamente mientras leía el diminuto menú intentando cubrir su molesta sonrisa angelical -Un latte mediano, por favor- Regrese el menú y mi vista volvió a Adora, tenía un gran puchero en sus labios

 -¿Que?- Puse un mechón de cabello en mi oreja y me incliné un poco en el respaldo de mi asiento- No es nada, solo pensé que pedirías algo más- ella bajo un poco la mirada y siguio jugueteando con sus dedos -Estoy algo llena, pero tal vez podría probar uno de tus bollos- Le dije mientras colocaba una mano sobre las suyas, ella se miro contenta, después me miro con picardia absoluta -¿Uno de mis bollos?- Mis mejillas hervían casi al instante y me recline hacia atrás cubriendo mi CARA -¡ADORA!- Sus hermosas carcajadas inundaron el lugar, sus ojos se cerraron y logre verla: hermosa, divinos dientes blancos y mejillas rosadas, un maquillaje natural y su cabello moviéndose al compás de sus risas, me erizo por completo.

-Adora, yo... -Respire con intensidad, ella se detuvo y me miro de nuevo, observaba sus bellos ojos azules, mis manos fueron a mis muslos y los apreté con fuerza.
Los labios de Adora se abrían, cubrí su boca (demasiado suave), ella me miraba aun más atenta, baje un poco la mirada y con voz demasiado baja pude hablar.

-me agradas, eres increíble... - Mi corazón palpitaba con fuerza, no me dejaba casi respirar, descubrí sus labios y coloque mi mano nuevamente en mi muslo.

-Perdona, no logré escucharte, que es lo que- Mi celular comenzó a sonar fuertemente interrumpiendo incomodamente la situación (Joder).

-¿Hola?- La voz agitada del otro lado de mi celular parecía ser masculina -¿Papá, que sucede?-
La voz se hacía cada vez más pesada y cortante -Catra, ven al hospital ahora, trae a Lonnie- La llamada termino, Adora me veía confundida pero estaba el doble que ella.
-Adora, tengo que irme ahora- Tome mi chaqueta y salí de la cafetería.
-Espera- Tomo mi mano y la sostuvo con gentileza -¿Esta todo bien?- No sabía que decirle, no sabía eso con exactitud, así que solo negué con la cabeza, ella me abrazo con fuerza y me dio un leve beso en mi frente -Todo saldrá bien, te veré luego- Ella me sonrió y me soltó, no quería que lo hiciera, Adora era mi salida de todo esto ¿Regresaría a mi? ¿Habrá escuchado lo que le dije? ¿Ella me soportaría? ¿Volveríamos a salir? ¿Le importaría?¿Se quedaría a mi lado? Adora...
Sus pasos se hacían lejanos, más pesados, comenzaba a llover, las gotas que caían en mi mejilla me impulsaron y corrí, tras ella...
No se que paso, como lo hice, que lograria con eso, pero no quería dudar más, yo solo... quería que se quedara conmigo un rato más.

"Me sentía aun más grande contigo, como un gran sol en el centro de mi día lluvioso... "

Nuestra Luz [CATRADORA]Where stories live. Discover now