Siénteme [Yoonseok]

💔01💔

—“¡Hobi corre despacio!”—le gritaba el pequeño pelinegro de 9 años, corriendo tras él para alcanzarlo.

Estaban jugando en el parque a las atrapadas; a Yoongi le tocaba atraparlo. Pero Hobi era muy rápido, se escabullía por los columpios y toboganes, haciéndole más difícil la captura al pobre Min.

Y verlo desesperado, le divertía. Hoseok no paraba de reír cada vez que se escapaba de él, pero su sonrisa se borró cuando al deslizarse por el tobogán, tropezó y se raspó la rodilla.

—“¡Hobi!”—Yoon corrió preocupado hacia él.

Este se encontraba revisando su herida arrodillado en el suelo; no le dolía.

—“¿Te duele?”—se acercó a revisarla —.“¿Quieres que llame a tu mamá y te llevamos al hospital?”— el contrario comenzó a reír.

—“Estoy bien, Yoongi. Solo fue un rasguño”—se levantó, para que viera que estaba bien.

—“Pero estás sangrando”—lo señaló con un puchero—,“tiene que haberte dolido.”

—“Pues no, estoy perfectamente bien, te preocupas demasiado, Ginie”—revolvió un poco su cabello, este lo miró con el ceño fruncido unos segundos, y luego lo abrazó.

—“No quiero que te lastimes, Hobi, siento que duele mucho cuando algo te pasa”—confesó contra su cuello.

El mencionado lo abrazó de vuelta; sabía que iba a llorar como siempre que se daba algún golpe.

—“Entonces procuraré no hacerme daño, no quiero verte llorar todo el tiempo como un bebé”—bromeó, y este al escuchar como lo llamó, se separó de él, cruzándose de brazos.

—“¡Te he dicho que no soy un bebé!”—se quejó. Hobi volvió a reír y tomó su mano.

—“Sí que lo eres, eres un bebé gato arisco y llorón”—esta vez si, de verdad iba a llorar—. “Pero igual te sigo queriendo muuuuucho.”

Se inclinó y dejó un leve beso en su frente, sonrojando levemente al contrario.

—“Vamos a buscar a mi mamá para que me ponga una bandita, ¿si?”—él asintió despacio, y se dejó guiar por el castaño.

Siempre eran así de cariñosos. Desde que tienen memoria, lo primero que recuerdan es verse cara a cara. Sus madres eran mejores amigas, así que ellos siempre estaban juntos. Y se querían demasiado, eran inseparables, siempre lo fueron, eso hasta que…

Ring....ring ....ring....

Su teléfono comenzó a sonar, el sonido era tan fuerte e insoportable que no pudo seguir durmiendo. El ahora pelirrojo se levantó con pereza, restregando levemente sus ojos, para alcanzar el aparato en la mesita de noche; Jungkook lo llamaba.