Cap. 6

229 28 8
                                    


—– ¡Suéltame por favor! No me hagas ésto papá... —–

Lo único que podía escuchar eran mis inútiles y inaudibles gritos.

Sentir sus sucias manos recorrer mi cuerpo...

Y yo sin poder hacer nada.

Por un momento lo sentí tan real, sentí cómo me quitaba mi pijama de tigre, tenía tan sólo 8 años.

¿La gente podía ser tan cruel?

Estaba en mi sala, solo yo, mi madre había salido y sólo quedaba él y yo, mi padre, quién debería ser mi ejemplo a seguir, el hombre que más tendría que amar, cómo padre, me haría tal cosa.

—– Miguel, sígueme quiero mostrarte un lindo gato. —–

—– AWW UN GATITO! VOY PAPÁ:D —–

Era tan feliz y no lo sabía, tan inocente.

Él estaba borracho pero no era excusa.

Bueno siguiendo, cómo dije sentí que se hizo tan real, justo en el momento que él estaba apunto de hacer tal monstruosidad me desperté.

—– · Qu-ue mierda... No había soñado otra vez esa mierda desde hace tiempo... Mi chaqueta!? · —–

Fue ahí donde lo ví, ví a Luis con mi chaqueta no estaba bien, sólo reaccione cómo me sentía.

—– ¿Que estás haciendo Luis? —–

Miraba borroso, me sentía agitado y mal, pensé que él había hecho algo más, me observé, observé todo mi asqueroso cuerpo, pero aunque él haya hecho algo, no cambiaría nada seguiría igual de sucio, hasta aún peor.

Pude ver que Luis estaba hablando, no pensé sólo le quite mi chaqueta y dije cosas que me arrepiento y a la vez no, pero todo lo hice por impulsó, sí?

Le dí su merecido y me largue de ahí, no podía ir a mi casa, seguramente mi madre me estaría esperando con un palo o algo aún peor que eso.

Pase por un parque, se sentía tan frío y solitario.

—– · Maldito grasoso inútil, estúpido tonto, cuck del carajo, te odi... · —–

En realidad no pude completar la frase apesar de estar pensándolo, porque no era verdad, no lo odiaba sólo andaba con impotencia.

Todo se me vino abajo, todos los malditos recuerdos, todas esas cosas que pase...

—– ¡MALDICIÓN! —–

No tenía que llorar, porque los hombres no lloran, mi madre siempre me lo dijo.

—– ¿¡Quieres que te de buenas razones para llorar, mocoso de mierda!? —–

—– N-no madre, perdón. —– Entre sollozos Miguel trataba de hablar.

—– Pareces un marica Miguel, ¿acaso no entiendes que los hombres no lloran? —– La madre de Miguel sujeto un fierro.

—– ¡¡MADRE BASTA POR FAVOR DUELE!! —–

Usualmente después de todos los golpes amanecía cubierto de sangre en el piso, todo ésto duro hasta la actualidad, pero ahora ya no le era fácil, yo me defendía, pero pude haberlo echo antes.

Lo peor es que recurrió a cosas horribles para despejar mi mente...

Quemar mi piel.

Para otros era doloroso, pero para mí era una manera de escapar de todo lo que pasaba, era mi lugar seguro.

Bueno regresemos a lo actual, estaba ahí sentando llorando cómo niña así lo diría mi madre, cubriendo mis lágrimas, no quería a nadie cerca...

Quería reírme de mis desgracias, pero no podía.

Pero tenía una solución, mi encendedor.

Al hacerlo me dolió... ¿Me dolió? Lo que me daba placer ahora me da dolor, era ésto imposible, era la única cosa que me hacía sentir bien, ahora no tenía nada, sólo era yo, nadie más en este mundo cruel.

Desearía morir.


¿Morir?

JAJAJA

Tal vez podría intentarlo.

Contada en la perspectiva de Miguel.





Cuarteto referencias 🗣️‼️

✰ ¿ǫᴜᴇ sᴜᴄᴇᴅᴇ ᴄᴏɴᴍɪɢᴏ?  ✰Where stories live. Discover now