La propuesta.

Capítulo 7.

Anastasia.

Salí de ese lugar con Elisa gracias a Dios sentía que me ahogaba todavía me duele todo esto a Elisa parece no importarle en lo más mínimo pero a mí sí.

Estaba en mi casa alistando mis cosas para el viaje de luna de miel estaba muy nerviosa no quería tener sexo con Elisa se que ella tiene un pene para nadie es un secreto.

Estábamos ya en el avión de caminó a Corea era la primera vez que hiba sería una experiencia maravillosa pero sin la persona que realmente amo, decidí venir a Corea porque eso estaba en los planes que tenía con Eduard, Elisa rompe el hielo y me dice que no me preocupe por el sexo que ella no me obligará a nada sí no quiero yo estoy más tranquila con sus palabras.

Bajamos del avión y se podía ver desde aquí la ciudad es realmente hermosa pequeñas lágrimas salen de mi rostro y Elisa lo nota pero no dice nada mejor para mí.

Llegamos al hotel Elisa me comentó que si quiero una habitación aparte yo negué lo mejor es dormir juntas supongo.

-Annie- Dice Elisa.

-Dime- Le digo mientras admiró la habitación y la gran vista.

-Mañana vendrá un guía turístico por si quieres salir el te mostrará la cuidad- Dice.

-¿Y tú? No me vas a acompañar- Preguntó confundida, pensé que ella vendría conmigo.

-No perdona, unos amigos míos se enteraron de que llegué aquí a Corea así que iré y hablaremos de negocios futuros tengo varias ideas- Elisa se acomoda en la cama.

-Entiendo- Me limitó a responder, me siento decepcionada por alguna extraña razón.

-Bueno Annie si me disculpas me daré un baño si quieres puedes salir a explorar el hotel no te preocupes aquí los trabajadores hablan inglés es un requisito- Elisa se levanta de la cama.

-Sí- salgo de la habitación.

Me dispuse a explorar el hotel la verdad es muy lindo y ordenado, fuí a la parte trasera hay una enorme piscina está abierta las 24 horas para los que reservan VIP una ventaja ya que me dieron ganas de bañarme, mire al cielo las estrellas se veían hermosas, comencé a recordar a Eduard.

Flashback.

-Oye amor mira haya arriba- Dice Eduard yo hago caso.

-Es hermoso- Dije.

- Sí amor, así de grande como el cielo y brillante como las estrellas en nuestro amor florecita- Me abraza y me deja pequeños besos por mi rostro.

- Sí cielo- Lo beso.

Fin del Flashback.

Siento mis ojos llorosos al recordar aquél momento hermoso. Me regresó a la habitación supongo que Elisa todavía sigue bañándose así que decido entrar de golpe y fue mala idea porque ví a Elisa en toalla se veía malditamente sexy con esa toalla.

-Annie, ¿Te pasa algo? - Pregunta Elisa.

-Perdón Elisa no sabía- Me sonrojo.

- No te preocupes Annie, voy a cambiarme- Elisa da la vuelta.

Trató de relajarme no se que me está pasando últimamente cada vez que la veo me pongo nerviosa, veo a Elisa con una camiseta y unos shorts que resaltan su envidiable trasero "Dios Annie que te pasa" pensé. Me levantó de la cama rápidamente para darme una ducha, entro al baño y Dios es hermoso, después de una ducha sumamente relajante me arregló y salgo veo a Elisa concentrada en su celular me acercó a la cama y me acomodo muy lejos de ella.

-Buenas noches Elisa- Ella solo asiente.

Siento el sol en mi cara ya es de mañana me levantó y veo que Elisa no está seguro salió, me baño, me lavo mis dientes y me arregló decidí ponerme algo cómodo para ir a explorar la ciudad con el guía que claramente Elisa contrato, salgo de la habitación y bajo un hombre alto se acerca a mí.

-Disculpe, ¿Usted es la Señora Annie Rousseau?- Wow suena muy elegante el apellido de Elisa.

-Si soy yo, un placer- Extiendo mi mano el hombre hace lo mismo.

-Hoy seré su guía turístico Srta Rousseau, venga sígame nuestra primera parada serán las calles de Seúl- Yo asiento y ambos salimos es un hombre muy amable.

Salimos del hotel una camioneta negra no esperaba afuera el guía me dijo que no me asustará que era muy común usar este tipo de camionetas y que también es muy común verla en las celebridades coreanas.

La ciudad es aún más hermosa de lo que imaginé el guía que su nombre es Kim-joung me explicaba todo acerca de Corea, como los saludos su historia, la variedad de comidas que tienen y más.

-Bien Srta Rousseau, ¿que le parece?- El guía me saca de mis pensamientos.

-Es muy hermoso todo aquí- Ambos sonreímos.

- Sí así es- Dice el guía.

Recorrimos todo Seúl yo me tomé unas cuantas fotos para el recuerdo, íbamos de camino al hotel cuando recibo un mensaje en ig.

-Te ves muy hermosa- abri mis ojos como platos era Eduard.

-Gracias:)- Respondí.

Ese mensaje me puso feliz. Llegamos al hotel y me despedí del guía me entregó su tarjeta por si quería salir mañana a ver otras ciudades de Corea yo le agradecí, está más que claro que le tomaría la palabra necesito distraerme.

Elisa no había llegado todavía así que pedí servicio a la habitación y llegó enseguida aquí son muy eficientes, pedí algunos de los platós que me recomendó el guía sabían sumamente deliciosos lo mejor que he probado. Estába viendo algo de televisión cuando llegó Elisa.

-Hola Annie- Me saluda.

-Hola Elisa, cómo te fue- Pregunté.

-Bien gracias, bueno me despido tengo un viaje a España importante hoy cuídate- Elisa toma su maletín y sale.

Me quedé completamente sola en la habitación, muy en el fondo si quería que Elisa estuviera conmigo pero nada puedo hacer ella me lo dejo muy claro que después de casarnos le importaría muy poco lo que haga.

Decido ir a la piscina hoy, llegué y estaba algo llenó de personas habían muchos turistas aquí se divertían, algunos venían en familia y otros de Luna de miel supuse tal vez así de feliz me vería con Eduard a mi lado.

Pasaron ya dos días Elisa seguía en España y yo me sentía completamente sóla, a veces me llegaban mensajes de Eduard eso me alegraba el día me contaba todo lo que hacía conversábamos lo seguía amando eso era lógico es mi primer y último amor.

-Annie- Volteó y es Elisa.

-Elisa, hola cómo te fue- Me levantó de la cama para acercarme a ella.

- Muy bien Annie gracias- Dice seca.

Elisa entro al baño, yo regrese a la cama tomé mi celular y seguí hablando con Eduard, veo a Elisa salir muy bien arreglada se veía muy linda con ese traje no me atreví a preguntarle a dónde iba aunque estuviéramos "casadas" no tenía derecho a preguntarle nada, volviendo al traje sin duda ese traje resaltaba todos sus atributos que Dios le dió, sus curvas, su gran trasero,su... Por el amor a Dios deja de pensar en esas cosas pensé.

-Annie, quieres venir conmigo es una reunión que tengo hoy y mis socios te quieren conocer- Pregunta Elisa mientras se acomoda su hermoso cabello.

-¿Estás segura?- Ella voltea a verme.

-Sí no quieres está bien no te estoy obligando- Se termina de acomodar su cabello, Elisa saca un labial de su bolso.

-Prefiero no ir, perdón- Apartó la vista de ella.

- Está bien, si no regreso es porque me fuí de viajé a Australia tengo negocios urgentes que atender allá- Elisa se aplica perfume y sale de la habitación.

Otra vez sola, estaba cenando cuando siento unas ganas terribles de vomitar salgo corriendo al baño, después de vomitar regresó para acostarme en la cama me siento mareada.