El Velo de la luna (Harco)

Camaleón

No quiso creerlo al comienzo pero después vio los ojos marrones que lo contemplaban y supo que era real

Blaize Zabini era su destinado

Fue muy rápido el acto de quitarle la capa al Cadete, este tenía un camaleón en el pecho, al igual que el lo tenía en la nuca, los ojos del moreno no pudieron más, de ellos brotaba una pequeña lágrima,no de dolor,ni  mucho menos de tristeza, si no de alivio y alegría.

Mientras Ron se quedaba estupefacto abrazándolo

-ahora ya no tendrás motivos para huir más de mí- susurro él pelirrojo en el pecho del más alto

- jamás me alejaría de ti- le contesto Blaize tomando su mentón, alzandolo un poco haciendo que este lo vea a los ojos

-eres un tonto - dijo Ron desviando la mirada con vergüenza, cosa que hizo soltar una pequeña carcajada al moreno

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Theo solo se quedó viendo el cuello de Neville, no podía creer que él hizo eso, y lo peor de toda esta situación es que era muy notorio

-se nota mucho?- pregunto Neville viéndose en el espejo del ala oeste, los dos jóvenes se habían escabullido en la oscuridad de los pasillos, y dado qué el Alfa de Theodore estába inquieto, era claro que el chupetón en el cuello del Omega estaba más que destinado a estar ahí

-no tanto amor- dijo viendo impactado como la luz de las velas daban un entorno fascinante a la piel de su prometido, sin duda alguna el celo de Neville era más que esperado por el Alfa

-cariño- dijo Neville tomando la mano del más alto

-nesecito ir a la alcoba a solucionar esto, me tendrás que cubrir con los invitados- dijo acariciando la mejilla del Alfa

El heredero no pudo contestar,los ojos de Neville lo tenían embobado, cuando salió de su trance vio como si pareja se iba a paso veloz a su habitación, cuando esbozo una sonrisa por la acción que cometió, sin dudarlo se sentía orgulloso de su hermoso chupetón

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Mientras tanto en el imperio de Slorbrux, Ophius y Orión estaban paseando por los jardines juntos, como sus padres y hermano fueron a su baile el se quedó supervisando al  imperio de Slorbrux así que invitó a Orión a pasar la semana con el, sabían que si Draco no encontraba a su pareja tendría toda esa semana para hacerlo y si la encontraba también era la semana de conocerce eso pasó con ellos y eso pasará con Draco.

Ophius sintió como Orión lo jalaba al estanque de su papá Remus, era muy hermoso tanto como el Omega
Se sentaron a las orillas del gran estanque este quedaba muy oculto de la vista de todos

-cuando seas emperador- comenzó el más bajo-me encantaría ir a visitar a los niños en el orfanato y mejorar sus condiciones- eso amaba del omega, se preocupaba por su pueblo y también por él

-quizas quisiste decir cuando seamos emperadores- dijo el Rubio para sonreírle coquetamente

Pero algo en el ambiente cambio, el aroma de Ophius se hizo más fuerte, parecía que el Omega le Hiba a refutar sobre lo que dijo pero en vez de eso de su boca salió un jadeo

-Cielo estás bien?- pregunto preocu Ophius

-n-no tengo mucho calor y- no puedo continuar por qué un sonoro gemido salió de su boca

Esto era malo, era muy malo, el celo de Orión había comenzado,SU PRIMER CELO, era solo cuestión de segundos para que las feromonas del Omega afectarán a su Alfa

-Ophius por-favor- dijo Orión comenzando a quitarse el lazo de su corset
-Omega esto no...- el rubio iba a decirle algo cuando los labios del menor apretaron los suyos y dio comienzo un beso largo y desesperado por parte del Omega

Y lo inevitable pasó.....el Alfa despertó en Ophius, tomó al Omega entre sus brazos, colocándolo encima de el, tocando sus glúteos desesperadamente, empezó a olfatear el cuello del omega, dejando besos y lamidas

-Dime lo que deseas y te lo daré~- dijo el Rubio
-ah~a- Orión solo podía articular leves sonidos, el deseo y el lívido lo segaron por completo

Ophius necesitaba sentir al Alfa adentro de él, empezó a restregar sus caderas encima del Alfa, era un movimiento sumamente delicioso para el heredero de Slorbrux, sentir como las dos erecciónes chocaban entre si, los sonidos tan exquisitos que soltaba el Omega, y no cualquiera Omega,este era SU Omega, Dios ampare al pobre imbécil que se atreva a ver la dulce piel desnuda de su Emperatriz

-Ophius por~favor- salió de su trance para ver a Orión sin su vestido, solamente el corset pegado a su cuerpo sin duda alguna esa imagen era tan erótica y estimulante para él, y exactamente eso era una imagen solo para él

Para el Omega era una tortura el hecho de que si Alfa no lo esté penetrando ya, su entrada estaba dilatada, su lubricante biológico ya estaba brotando y la verdad moría de lujuria cada vez que sentía el rose del Alfa, sentir la respiración ajitada del Rubio contra su cuello lo estaba volviendo loco

En un movimiento rápido, Ophius empezó a besarlo, mientras sus manos exploraban los tiernos muslos del Moreno, sus manos recorrían de arriba a abajo dicha Sona hasta que en un momento sus manos empezaron a subir más

Orión soltó un suspiro de sorpresa al sentir que el Alfa tenía sus manos puestas en su sensible erección

El mayor no dudó en empezar a masturbar a su amante mientras el contrario gemia y se empezaba a acariciar los pesones

-m~mgt-A~Alf- no pudo continuar ya que el Alfa metió la erección en su boca, Orión se recostó en el Árbol que estaba detrás de él

-Abre las piernas - ordenó el Alfa con vos demandante haciendo que el Omega de inmediato se abriera para él

Cuando Orión realizó este acto, Ophius se masturbo con la vista, algo que de cierta manera desesperó al omega

Orión empezó a lloriquiar por la falta de un Pene penetrandolo, así que con uno de sus dedos empezó a estimular su entrada, su dedo entraba y salía de él,pero eso no era suficiente, siguiendo metió un segundo dedo este le dio más placer pero tampoco era suficiente

-ah~- solo podía gemir, todo esto a ojos de su propio Alfa cosa que encendió al mismo

-en cuatro ahora -volvio a ordenar el Rubio

Cuando Orión adoptó dicha pose, el Alfa no lo dudo y lo penetró de una sola estocada, dejando así la mejilla de  Orión pesada a la madera del árbol

-esto querías no es así?~- dijo el Alfa
-ma~mas-dijo el Omega a lo que el rubio paro
-no Cariño así no se pide~- dijo en vuela el Príncipe
-ophius~-po-porfavor~-dijo el Omega lagrimendo
-eres solo mío- dijo el Alfa para penetrarlo más rápido
-a~agh- solo salían palabras sin coherencia de la boca del omega

El Alfa solo penetraba a su amante, sonidos grotescos de pieles chocando juntas era lo único que se escuchaba, el interior de Orión se contraía de una maera tan placentera que enloquecía a Ophius