𝙇𝙞𝙠𝙚 𝙖𝙣 𝘼𝙣𝙜𝙚𝙡 • 𝙃𝙪𝙨𝙠𝙚𝙧𝘿𝙪𝙨𝙩

𝘛𝘪𝘤-𝘛𝘢𝘤

🃜🃚🃖🃁🂭🂺

— Angel, tienes que intentar mantener la calma, Alastor la esta buscando, confía en que la traerá aquí de vuelta.

Habían acabado en la casa de Alastor, él decía que si Valentino llegaba a poner un pie en ese lugar estaría pisando su terreno, un espacio únicamente suyo, y que en pocas palabras estaría perdido.

— Valentino no es una amenaza sin Velvette, ella es la inteligencia entre los dos. — intento razonar el demonio de la televisión para si mismo.

Vox no estaba mirando a nadie en la habitación, solo se limitaba a dar miradas de vez en cuando en dirección a Angel, parecía ansioso.

Alastor apareció nuevamente entre las sombras del lugar con la misma sonrisa de siempre solo que ahora parecía estar más tensa de lo usual.

— Tal parece que nuestras querida invitada aún no va llegar. — dijo con su voz distorsionada por el sonido de la radio — En realidad podría decir que es bastante buena para para esconderse.

— No. — Angel hablo firmemente — Necesito encontrarla, no puedo dejarla sola.

El tiempo seguía corriendo, tenía aproximadamente 2 horas para lograr encontrar a Cherry y ver que podían hacer con el tema de Valentino.

Cherry debía estar metida en aquella casa abandonada entre todos los escombros logro encontrar un lugar para poder distraerse cuando quería escapar de todo, la primera vez que Cherry lo llevo ahí fue cuando tuvo una pelea con Valentino por no querer grabar algunas escenas para un video, Valentino lo golpeo reiteradas veces casi dejándolo inconsciente, ella lo saco de ahi y lo llevo a aquella casa en ruinas, estuvieron escondidos ahí por semanas, solo ellos y Fat Nuggets.

Angel realmente creía que ese era uno los mejores recuerdos que tenía con Cherry.

— No puedes salir de aquí, Angel, es peligroso porque—

— No estás unido a nadie bajo ningún contrato, lo que quiere decir que eres un blanco fácil para Valentino. — la voz de Alastor salía de forma pausada como si hablara con un niño pequeño.

— Al.

— No, no sabe a lo que se enfrenta. — exploto finalmente el demonio de la radio — No sabes a lo que te estás enfrentando. Actuas como un niño Angel, te pones a ti y a los demas en peligro.

Un golpe de realidad, Alastor lo había regañado, no le dio tiempo para reaccionar cuando una fuerte risa que provino del otro lado de la habitación lo saco de sus pensamientos.

— Creo que debemos de darle algo de crédito a Angel, el sobrevivió años al Valentino sin ayuda. No es un niño, Al. — era la voz de Vox, parecía haber salido de su transe.

Vio a Alastor acercarse peligrosamente rápido a Vox parecía mucho más enojado por aquel comentario que por todo lo anterior.

— Tú, contaminante audiovisual podrías mantenerte en silencio.

— Libertad de expresión, querido. Es el infierno.

Un grito ahogado provino por parte de Alastor seguida por una suave risa por parte de Vox, parecía que había logrado calmarlo a su extraño modo, ambos se habían encerrado en su propia burbuja, mientras uno gritaba el otro le respondía con comentarios sarcásticos.

Era cómico verlos pelear.

— Sabes que tiene razon ¿Verdad? — era Husk.

— ¿En qué?

— Ahora que el contrato entre nosotros está roto eres un blanco fácil para Valentino, si sabes donde esta Cherry puedes ir. — el Overlord dejo en suave beso en su frente — Pero no solo.

Una gran sonrisa comenzo a crecer en su rostro.

— ¿Irás conmigo? — pidió Angel.

— A donde fuera.

Habían decidido dejar a Cherry en la colonia caníbal, eso sería en cuanto la encontrarán.

Vox y Alastor los alcanzarían allá, Rosie parecía encantada por el hecho de recibirlos a todos en su casa.

Tocó la puerta de la vieja casa abandonada, si no estaba ahí no sabría donde más buscarla.

— ¡Cherry! — grito con las pocas fuerzas que le quedaban.

Husk estaba a su lado, buscaba desesperadamente algun lugar por el cual poder entrar sin derribar la vieja puerta.

Al cabo de un rato un muy apagada Cherry salió del lugar, estaba asustada y tenía pequeños golpes en el rostro pero estaba ahí, viva.

— Angel. — dijo en un hilo de voz — ¿Qué haces aquí? ¿Husk? Tienen que irse, ahora. Valentino podría volver—

— ¿Volver? Cherry ¿Valentino estuvo aquí? ¿Fue él? ¿Él te hizo eso? — la desesperación inundaba su mente.

Tenía que llevarse a Cherry lejos de ese lugar, lejos de Valentino, nunca había visto a su amiga de esa forma, ella siempre fue tan energética, sin temor a nada, brillante, pero, no siempre le puedes ganar al poder de un Overlord como Val.

— Tenemos que irnos, ya.

Vio como Husk ayudaba a la chica a salir del lugar sin que le cayera nada encima, un paso en falso y ese lugar se caería encima de ellos.

Lograron salir del lugar sin problemas con el miedo respirandoles en la nuca.

Había pasado otra hora en todo el trayecto de llegar hasta la colonia caníbal sin ser vistos por ninguno de los trabajadores de Valentino y Velvette y otros 30 minutos para llegar a casa de Rosie, el tiempo se estaba acabando y no sabía que hacer.

— Rosie. — la voz sorprendió a la Overlord.

— Angel, oh cariño, estás bien. — Rosie lo tomo del rostro con delicadeza, inspeccionando si tenía alguna herida que pudiera sanar — ¡Husk! por Lucifer, como pueden ambos ser tan irresponsables, algo les pudo haber ocurrido.

— Lo siento, fue idea mía. — se disculpo Angel.

— Y yo elegí seguirlo. — secundo Husk.

La Overlord suspiró frustrada.

— Niños. — su mirada paso a la de la chica parada al lado de Angel — Oh, hola linda. Eres Cherry ¿verdad? déjame ayudarte, creo que hay ropa que te pueda quedar en mi recámara sígueme.

Vio a Cherry seguir a Rosie por el pasillo hasta que finalmente ambas desaparecieron.

No fue hasta ese entonces que se dio cuenta de lo asustado que estaba, de lo ansioso que se sentía con todo ese tema, esta completamente sorprendido de no haber colapsado en todo ese tiempo, quedaban exactamente 10 minutos para que se cumplieran las 3 horas pactadas por Valentino y todo iba sospechosamente bien.

No podía confiarse de la situación.

Husk estaba tratando de contactar a Alastor y Vox, ninguno parecía dar señales de vida y eso comenzaba a preocuparle al Overlord, decidió que iba acompañar a Rosie y Cherry en su búsqueda de ropa pero el sonido de un cristal rompiéndose seguido por un fuerte grito de Husk lo detuvieron.

00:00

— ¡Angel, corre! — fue lo último que le escucho decir.

No le dio tiempo a reaccionar cuando fue
golpeado en la parte de atras de su cabeza dejándolo inconsciente.

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