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Habían pasado dos semanas desde lo que paso aquella vez dentro del baño,
estuve esperando mucho tiempo para devolvérselo y justo hoy era el gran día.
Ahora me encontraba en la casa de Nayeon viendo una película, la elegí yo porque en una parte los protagonistas tienen sexo y así ambientaria la situación, cuando pasaron la escena que tanto espere, Nayeon me abrazo y se acostó muy cerca mío, yo empecé a darle besos por toda su cara mientras que ella miraba con mucha concentración la película, de un momento a otro comencé a darle besos en el cuello y ella me miraba con intriga.

-Mina que haces?- pregunta mientras pausaba la película.

-Nada- dije inocentemente.

Nayeon me miro con desconfianza pero decidió no darle importancia. Yo aproveche cada momento que tuve para seguir besándola, cuando me aburri de besarla, me subí encima suyo y empecé a dejarle chupetones en su cuello.

-Mina?- dice Nayeon con dificultad.

-Shh- beso su boca para que no hable.

En ese momento empezamos a besarnos con tanto deseo que parecíamos dos animales comiendose, yo comencé a moverme más, Nayeon de la nada deja de besarme y detiene mis movimientos.

-No juegues con fuego- dijo Nayeon mirándome fijamente.

Yo solo la ignore y seguí besándola, ella, por su parte, no me besaba, todo el trabajo lo estaba haciendo yo, me separe de ella buscando respuesta y en ese momento ella nos hizo cambiar de posición, ahora la que estaba abajo era yo y ella arriba.

-Tengo el presentimiento de que esto es una venganza. No quiero arriesgarme- dice Nayeon besando mi mejilla.

Trague en seco.

Ahora la que comenzaba a besarme era Nayeon, el beso era muy salvaje y no voy a negar que la manosee bastante.
Ella comenzó a moverse encima mio, luego ella me acostó en la cama y empezó a besarme el cuello, los besos se desvanecieron porque ella empezó a pasar su lengua y luego me comenzo a morder, lo único que pensé fue "espero que las marcas no se noten"  Cuando se canso de mi cuello, bajo un poco más y empezó a manosearme los pechos, con rapidez me saco mi remera y el corpiño, que ágil, sin previo aviso ella me empezó a a chupar mis pechos mientras me miraba fijamente, yo cuando sentí su lengua húmeda en mi pecho quise gritar pero me contuve y me tape mi boca con mi mano.

-Quiero escucharte- dice Nayeon mientras me sacaba mi mano de mi boca.

Mi novia seguía haciendo su trabajo mientras que yo gritaba de lo bien que lo estaba haciendo, cuando Nayeon estuvo satisfecha empezó a dar besos húmedos por mi abdomen hasta llegar a mi parte intima, ella me miró esperando el permiso y yo rápidamente asenti para que lo hiciera, ella me sacó mi ropa interior con cuidado pero sin dejar de besarme, yo para este punto no daba más, la necesitaba urgentemente. Ella se dio cuenta como estaba de urgida y en su rostro se dibujo una sonrisa de arrogancia.

-Nay- dije con dificultad.

En este momento sentía la respiración de mi novia en mi zona íntima y eso no me dejaba hablar.

-Que paso amor?- me besa en cerca de mi parte intimida haciéndome jadear.

-Por fav...Ah.

No pude terminar de hablar porque Nayeon había pasado su lengua por toda mi vagina haciéndome gemir.
Por lo que sé, Nayeon nunca estuvo con una chica pero parecía tener experiencia, lo digo por lo bien que lo estaba haciendo.

-Nayeon- gemí cuando sentí un dedo entrado en mi.

No tardo mucho en meter el segundo dedo y empezar a hacer un vaivén con ellos. Yo gemia su nombre mientras sentía como Nayeon dejaba varios besos por diferentes partes de mi cuerpo, luego decidió meterse uno de mis pechos en su boca y con la mano que tenía libre agarro el otro. Yo a este punto no daba más, yo ya sentía mis paredes contraerse hasta que Nayeon dejo de jugar con mi pezon para empezar a tocar mi cliptoris.

-Nay- grité- no puedo... mas

De mi garganta salio un agudo gemido que retumbó por toda la habitación.
Yo estaba tratando de recuperarme mientras que mi novia limpiaba todo mi orgasmo, una vez satisfecha, vino gateando hacia mi y me dio un tierno beso en los labios.

-Te amo Mina- me miraba fijamente.

-Yo también Nay- dije mientras respiraba con dificultad.

Ella seguía besándome y yo hice lo mismo, para ese entonces yo ya estaba más calmada pero seguía caliente. Todo comezo con un beso y terminó conmigo metiendo mis dedos dentro de ella.

-Mina- gemia Nayeon- Dios, Mina.

Sus gemidos eran lo más hermoso que oí en mi vida.

Cuando termine mi trabajo, subí a horcajadas hasta ella y cuando tuve su boca cerca de la mía, las junte y la bese tiernamente. Yo todavía quería un poco más pero ella se veía devastada, además era nuestra primera vez y no quería matarla.

-Mi amor- me llamo Nayeon- te amo mucho.

-Yo mas Nay, yo mas- dije dejando besos por toda su cara.

-Esto fue hermoso- sonrío- nunca voy a olvidarmelo.

-Yo tampoco- dije mientras me acurrucaba a su lado y la abrazaba.

Nos quedamos unos dos minutos viéndonos fijamente mientras nuestras manos se acariciaban, tiempo después nos dormimos. Estábamos exhaustas.

...

NO TE SOPORTO Where stories live. Discover now