⋆Two⋆

2.1K 120 10
                                        


Desperté. A duras penas me puse de pie para dirigirme al baño y abrir la regadera.
En cuestión de segundos el agua tomo la temperatura perfecta. Dejé caer mi ropa en el piso y entré para que junto el agua y el jabón se llevaran cualquier rastro de sudor.
Salí después de algunos minutos, y envolví mi cuerpo en una toalla blanca. Tomé un conjunto; una blusa de tirantes floreada que se pegara a mi cuerpo perfectamente y una falda exactamente igual que me quedaba un poco más arriba de las rodillas.

Hoy más que nunca tenía que ir arreglada.

Denisse y yo habíamos terminado, así que no podía haber rastro alguno de debilidad. Al contrario, debía demostrar que todo seguía siendo más que perfecto.

Dejé mi cabello suelto, permitiendo que ligeras ondas se formaran en el. Puse levemente maquillaje, delineé mis ojos con lápiz negro, máscara para pestañas y solo un poco de brillo labial, sobre mis gruesos y bien definidos labios.

Tomé mi bolso, el cual traía algunos libros. Ya que la mayoría estaban en mi casillero.

Bajé las escaleras.

Mi madre estaba en la sala. La mesa de centro como siempre estaba lena de papeles, su laptop y sus tres teléfonos celulares. Sin duda alguna una mujer ocupada.

-Me voy- le avisé antes de salir.

-Que te vaya bien- me contestó.

Hace dos meses que no conducía. Denisse siempre iba por mí y me llevaba a la escuela, saliendo nos regresábamos juntas y cualquier cosa que necesitaba lo hacía ella.

Llegué al campus y estacione mi auto. Me gustaba legar algo tarde y así lograr capturar la atención de todos. Obviamente, no era algo difícil de lograr.

Bajé y todas las miradas se posaron en mí. Las de los chicos eran despectivas y las de las mujeres solo indicaban deseo.

Excepto ésta vez, todos murmuraban cosas entre ellos. Seguro sería la ausencia de mi ex novia a mi lado. Abrazándome por la cintura y cargando mi bolsa.

Lo ignore y seguí caminando lentamente agitando mis caderas en un ritmo único.

"¡Mierda!"pensé molesta "¡Donde demonios está Nuvia!" No lograba verla. Y realmente la necesitaba.

Llegué a mi casillero. Saqué mi celular y comencé a presionar botones, escribiendo un mensaje para la antes mencionada.

-¿Por qué tan acelerada?- una voz burlona casi hace que el celular cayera de mis manos.

-¡Donde estabas!- le contesté alterada.

-¿En mi casa?- contestó extrañada.

-No me dejes sola - le dije seriamente

-¿Ves? Abril necesitas más amigas - se burló.

-Bien sabes que Abril y amigas... no van juntas en la misma oración, a menos que lleve un 'no necesita' en medio- comenzamos a caminar hacia el salón. Las clases transcurrieron rápido, debido a mi ansiedad por que diera la hora del receso y hacer que Denisse se arrepintiera de haberme dejado.

Finalmente el estruendoso timbre nos liberó del maestro de álgebra. Esperé a mi mejor amiga.

Ya acompañada por ésta, caminamos hacia la cafetería. Acomodé mi cabello antes de entrar y escuché una carcajada de Nuvia.

-¿Ves lo que te dije? Ella tiene toda la razón mujer- la fulmine con la mirada y empujé las puertas de la cafetería para entrar.

- Adiós linda..

-Preciosa...

Halagos de ese tipo aunados a leves chiflidos y besos tronados se escuchaban al momento en que yo pasaba entre las mesas. Ya se habían enterado. Ya que estando con Denisse absolutamente nadie se atrevía a abrir la boca.

𝙼𝚎, 𝙼𝚢 𝚜𝚎𝚕𝚏 𝚊𝚗𝚍 𝙸 《Rivari》Where stories live. Discover now