Gemini tiene que decir una mentira piadosa para que su madre no lo obligue a casarse con Benyapa Jeenprasom, una amiga de la infancia que, si bien, es hermosa y agradable no la ama... ¿Pero Fourth estará dispuesto a seguirle el juego?
¡ADAPTACIÓN...
Lo primero que hizo Gemini Norawit, al momento en el que llegó al salón de clases, fue acercarse a Fourth y robarle un beso en los labios. Aquel acto sorprendiendo al mayor: no se lo esperaba, no sabía que decir, ni como corresponder.
Cuando Gemini se alejó, le sonrió como si fuera un día normal; excepto, que lo había besado. Nattawat se dio cuenta, momentos después, de que todos sus compañeros de clases, los observaban con curiosidad.
—Ya no tiene caso esconderlo amor —aclaró Gemini a Fourth, en voz alta, para que todos escucharan sus palabras—. Nos queremos y no tenemos porque escondernos de los demás. Es el siglo XXI, después de todo y los tiempos cambian.
Una cosa era fingir con la madre de Gemini y otra muy diferente, con sus compañeros. Hasta que nivel, llegaría todo este drama.
—Entiendo, pero aún así, estamos en la escuela.
Como era de esperarse, sus compañeros silbaron: animados por el espectáculo que acababan de ofrecer; además de, la nueva y curiosa noticia. Para alguno de ellos, fue una completa sorpresa, pero para la mayoría, no era algo inimaginable. Después de todo, ambos eran bastante cercanos. Algunos aseguraban, que se conocían desde la cuna.
—Les juro que no es una sorpresa —dijo Phuwin a sus compañeros— Se veía venir. Hay mucha química entre ellos.
—Yo sabía que eran mejores amigos, todos aquí lo sabían. Pero aun así me sorprende que sean novios. No es que no este de acuerdo de todos modos. Es su vida —aclaró Lia.
—Gemini Norawit y Fourth Nattawat, nuestro grupo puede volverse popular por ustedes dos —Sarawat paso sus brazos por ambos jóvenes— Serán como celebridades, la primer pareja gay oficial de la escuela.
—No es para tanto —aclaró Fourth. Justo como lo predijo: la situación se les estaba saliendo de control. Pronto, incluso su madre iba a enterarse de la mentira.
Lo peor de todo, es que la madre de Fourth, tampoco iba a sorprenderse mucho. Gemini y Fourth ya actuaban bastante cercanos, así que realmente no había nada novedoso, en que se volvieran pareja. De todos modos, ella se iba a enojar.
A Gemini, no le importaron las reacciones de los demás, ni que sus compañeros chismearan sobre ellos; sin embargo, Fourth aún estaba consternado por la actitud de su mejor amigo. Esperaba no fuera a comportarse extrañamente todo el tiempo.
De todos modos, era algo razonable, el hecho de que tendrían que hacer más pública su relación si querían convencer a la madre de su amigo, pero una cosa es decir que estaban juntos y otra muy diferente, besarse frente a los demás.
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