Hasta que regrese

(Capítulo 8) (Nueva casa)

Me fui a la cama con las pesadillas de Alessandro en mi mente, pensando que dormir debería ser el único momento de paz que un ser humano tiene en su día, no el peor momento del día. Mientras preparaba café en la cocina, Chiara se acercó a mí, también despierta desde temprano.

"Buongiorno" Nos decimos una a la otra, Chiara saca las cosas para ella también hacerse un café.

"Alessandro no logró descansar bien anoche." Chiara para lo que estaba haciendo y me mira. Yo sigo hablando. "Las pesadillas son muy intensas, es como si realmente estuviera viviéndolas". Chiara muestra una expresión de tristeza, se nota que no quiere eso para su hijo, nadie lo desea.

"Non so più cosa fare, No quiero que tenga traumas por la muerte de su padre, Quiero que pueda ser feliz y pueda vivir una vida buena y pura sin nada como esto. Giuro que he hablado con especialistas y nadie lo ayuda, Ni siquiera las pastillas para dormir" Escuchar eso solo me hizo preocupar más pero no se lo demostre, Sabia que yo era la ultima persona que debería ponerse mal sobre esto, Me necesitan.

"Tranquila " Le digo a Chiara mientras le ponía mi mano en su hombro. "Non preoccuparti, Lo ayudaremos" Chiara me sonríe.

"Tú has sido lo único que lo ayuda" Yo le sonrío. Es cierto, Ayer cuando trataba de ayudarlo, el simple hecho de escuchar mi voz lo tranquilizó.

En la tarde, Alessandro me llevó a su casa de playa, la cual nuestras madres compraron cuando se graduaron de secundaria para vivir juntas y tener aventuras. Decidieron regalármela cuando les dije que iba a vivir en Amalfi. Los colores interiores eran marrón claro, blanco, vainilla y beige. La decoración era de playa, con motivos marinos, corales, pequeñas estatuas de peces y cuadros del mar. La casa tenía dos pisos y, en mi opinión, la parte de arriba era aún más bonita. Había muchas ventanas para ver el mar y un balcón con vista a la playa. Después de recorrer la casa, bajé a la cocina y encontré a Alessandro bailando y cocinando con música a todo volumen. Al escuchar pasos detrás de él, se volteó y sonrió al ver lo feliz que estaba.

"Te gusto la casa?" Me pregunta Alessandro, Yo no dudo en responderle.

"Todavía no puedo creerlo, es la casa de mis sueños.

Alessandro extiende su brazo y me abraza mientras terminamos de almorzar. "Me encantaría vivir contigo", le digo por impulso, No me di cuenta de lo que había dicho hasta que noté la reacción de Alessandro. Alessandro levanta las cejas y me mira.

"veramente?" Me pregunta, A Alessandro le gusto el comentario pero se veía que no pensaba que yo fuera quien se lo pidiera, Yo le digo que si con la cabeza y él se ríe.

"Si me das permiso, me encantaría." Alessandro levanta mi barbilla y me besa. Si la vida de adulto va a ser siempre así, entonces deseo no envejecer nunca. Cuando Alessandro nos sirvió el almuerzo en la mesa en los muebles de afuera, sentí como si fuera mi nueva vida, en la casa de mis sueños, viviendo con mi novio perfecto.

"Después de esto, podemos ir de compras para la casa. Podemos decorarla aún más y comprar cosas que reflejen nuestro estilo." Alessandro se ríe al ver lo emocionada que estoy con todo esto de la casa y vivir juntos, Parecía una niña pequeña.

"Claro que si princesa, Come rápido y podemos ir" La vida nunca había sido tan perfecta. Hay algo en Amalfi que no se puede explicar. Cualquiera podría verlo como solo una isla o un lugar común, pero Amalfi es mucho más que eso. En Amalfi, la vida se siente como una película, donde todos tus sueños se hacen realidad y te sientes como si estuvieras en una película. No necesito vivir en un mundo de fantasía, porque aquí lo tengo todo.

Pasamos todo el día de tienda en tienda buscando cosas para nuestro hogar. Recorrimos pasillo tras pasillo y Alessandro tenía que detenerme porque quería comprar prácticamente toda la tienda.

"Si que querías ir de compras" Me dice Alessandro riendo mientras me veía ver todos los pasillos detalladamente.

Al terminar el día, luego de ocuparme de algunos asuntos en la empresa donde comencé a trabajar, Alessandro me invitó a su restaurante ya que tenía que echarle un vistazo y pasar a cerrarlo bien. Es sorprendente ver cómo ha transformado el lugar en tan poco tiempo. Cuando lo vi por primera vez, estaba completamente abandonado y Alessandro lo convirtió en algo hermoso.

"Scusa chef" Le digo a Alessandro jugando. "Qual è il tuo piatto migliore?" Alessandro se ríe y jugando como cuando éramos niños se pone atras de la mesa.

"Te recomiendo un moscardini con le patate?" "Gratis por ser tan hermosa" Me dice con una sonrisa, Yo me sonrojo y me comienzo a reír.

"Si Per Favore" Alessandro se voltea y se pone a hacerlo.

"Asistenta! Asistenta" Yo voy rápidamente hacia el closet y sacó un delantal.

"Aqui estoy chef!" Alessandro se ríe y me dice que llegue tarde y aparta algunos ingredientes y me los pone cerca de mi para que cocinemos juntos, cuando no estábamos viendo, De la nada Alessandro me lanza un tomate.

"¡Oye!" exclamé, Mi delantal blanco ahora lucía un vibrante rojo. Sin dudarlo, tomé los ingredientes de la mesa y los lancé, lo que nos hizo reír a carcajadas hasta que finalmente se rindió levantando las manos. Con la cara llena de ingredientes, al terminar nuestro desastroso juego, nos pusimos a limpiar todo para dejar el restaurante impecable antes de cerrar.