Día 1: Embarazo

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Omegaverse
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Algo que ya se debió imaginar desde el inicio, aunque no esperaba que sucediera tan pronto para Senku, especialmente si se trataba de una supuesta beta, nunca espero estar embarazado, embarazado de una beta. O quizá ¿No era una beta?

—Aun así, es un problema. —bufo Senku mientras sostenía la prueba de embarazo positiva, justo en el peor momento posible.

No sabía qué hacer, especialmente porque estaba ocultando el ser beta por mucho tiempo y ahora no era el momento de revelar que en realidad era un omega. Debía pensar rápido y encontrar una solución al problema.

Intentando recordar la noche donde posiblemente paso eso, logró descubrir quien posiblemente era la otra progenitora de su feto, una joven de su edad, cabello rubio y un vestido azul que asemejaba a sus ojos, ella era la otra supuesta beta.

—¿Cómo dijo que se llamaba esa chica? —susurro para sí mismo, su nombre era interesante, una piedra preciosa que le recordaba a ella—. Kohaku. —sí, era ese nombre, aunque se le hacía un poco familiar mientras más lo pensaba.

Kohaku ¿Qué apellido tenía? No, quizá, incluso nunca le dijo su apellido.

—Entonces, solo tengo su apariencia para identificarla. —solto antes de dejarse caer sobre el sillón de su sala, eso no bastaba para buscarla y contarle sobre su pequeño problema.

Si esa alfa creía que se libraría de su cría así de fácil, estaba muy equivocada, la mayoría de alfas contaban con un capital extenso, al igual que múltiples propiedades y eran de clase pudiente, solo pudiendo tener decendencia con un omega. Incluso si los omegas puros eran escasos en esos tiempos y los omegas por transformación no eran bien vistos.

Podría sacar provecho de eso, pensó Senku al mismo tiempo que encendía la televisión, el sonido le ayudaba a pensar.

Mientras escuchaba lo que parecía ser un canal de noticias, vio por un momento la televisión.

<<La pequeña dama de la familia Hyoko, Kohaku Hyoko, firma un acuerdo comercial con la familia Wrigth sobre el traslado de minerales, también confirmando que la joven hija de los Hyoko reforzará su trato al tomar la mano de la hija omega de Andrew Wrigth, Luna Wrigth>>

El nombre llamó su atención y miro con atención la televisión cuando las cámaras apuntaron a la segunda hija Hyoko, Kohaku. Era ella.

No pudo evitar sonreír con nervios al darse cuenta de que, esa mujer de ojos mar, cabello rubio como el oro, rasgos finos y vestido azul, era la segunda hija de la mayor compañía en extracción de minerales, futura heredera por la frágil salud de su hermana mayor y, sobre todo, prometida de la hija Wrigth. Debía ser una broma, una jodida broma.

—Ku, al menos ya se quién es —susurro, buscando un pequeño alivio en las noticias—, mierda. —un alivio que no encontró.

Debía pensar fríamente, se decía Senku, parándose de su sillón para llamar a unos viejos amigos, necesitaba un concejo externo, y quizá, una solución desesperada.

Él ya tenía en mente a las personas que podrían ayudarlo, si se involucraba con una familia tan poderosa e influyente como esa, no terminaría nada bien, y no solo para él. Tocó su estómago al tener el pensamiento. Su cría también podría estar en peligro.

—Ryusui ¿Recuerdas el favor que me pediste hace un par de meses? Es momento de que lo devuelvas.

Y pensar que ese mal momento fue provocado solo por involucrarse con un alfa fingiendo ser un omega.

Eso si era mala suerte.

Entre las paredes de la mansión Hyoko, Kohaku se encontraba almorzando con Luna, su actual prometida por conveniencia, ambas en un silencio tan tranquilo, que esperaba romperse en cualquier momento.

┌⁠(⁠★Semana SenHaku, 2024☆⁠)⁠┘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora