Prologo

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Notas:

–¡NSFW!
–Descargo propiedad de personajes.
–Comportamiento caníbal, simbolismo religiosos.
–Leer bajo tu propia responsabilidad.

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Todo fue tan rápido, que no se permitió permitió lujo de pensar o reaccionar, no podia nisiquiera pensar en algo que no sea la muerte, aquel canto y tintineo llenaban su visión borrosa, rezando para que el ángel de Poppy escapara de estos pequeños demonios  omo el infierno.

Cada mano y cada nuevo túnel era un laberinto que el mas que nadie conocía, pero se sentía extremadamente doloroso e incómodo el estar siendo controlado por aquellos que alguna vez llamó "hijos".

Pero finalmente el ángel escapo, su conciencia estaba en trance pero su sonrisa de alivio demostraba que tan solo unos latidos más y moriría por esos pequeños bi hos que demoraban sus órganos y piel.

Solo le quedo esperar al preciosos canto de la muerte, esperando a que sus frías manos destrozaron su alma.

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El aire chocaba su pelaje, y su tristeza se volvió mayor, recordando sus días como persona, jugando con su hermana y llenando de amor al único niño que quiso. Pero su tristeza se volvió coraje, su odio justificado  hacia su contraparte: CatNap, la Lavanda fue su pesadilla y el gel de amapola lo hacia peor.

¿Por qué?

El lo dio todo por el... Decidió ser juzgado, decidió llenarce de heridas, ¡HASTA SE DEJO GOLPEAR POR EL!

¡¿Y así se lo paga!?

Ese miserable hijo de puta, bien, tal vez fue convertido involuntariamente en un jodido muñeco grande y afectado que sólo debía sonreír y hablar lindo a los niños, ¡Pero el también es un jodido juguete!.

Todo se revolvió, hacia tanto que no tenía piernas, que le era imposible darle una patada al pastal verde de la cólera cólera sentía.

–Trevor Watterson.–

Se quedó quieto, con la expresión mas asombrada que alguna vez tuvo, no había escuchado ese nombre hacía casi dos décadas, sintió que su sangre se congelaba y su mente se arrastraba a tra vez de esos recuerdos, de cuando alguna vez fue un ser humano.

–Hijo de Ureth Dreminth y Frey Watterson, un reconocido cirujano y especiales en psicología general... Ese eres tú, ¿No?–

–No... El ya no existe mas aquí, el ya no vive desde hacía mucho tiempo.–

Esa era la verdad, el dejo de ser un adulto para convertirse en un experimento de felpa abrazable.

–Te diré algo... Dogday, te doy esta oportunidad porque se que has sufrido tanto como cualquier ser o cosa, por eso, te doy es oportunidad, abandona todas tus creencias, el dolor y sufrimiento lo es todo, el amor y compacion no es nada ya para alguien. Podrás devolverles tu sufrimiento será su infierno y su dolor tu trofeo, solo quiero todos tus sentimientos.–

No dejaba de ver el pequeño mantial que se hallaba frente aullo, sus orejas eran su única visión y distracción, aquellas palabras se grabaron en su mente, tanto como las escrituras en piedras.

–Además... ¿No te encantaría devolverle el favor a CatNap?–

¿Siestesilla?, ho... claro, ya sabia a donde se dirigía aquella charla.

–¿No te encantaría descuartizarlo?, ¿No te encantaría hacerlo sufrir?, ¿No te encantaría ver su rostro de dolor?–

Su moral estaba en juego en este momento, como adulto, sabía que eso era malo, pero... su interior ardía como fuego, un ácido amargo desacia aquellos recuerdos amistosos.

–¿Quieres que te lo recuerde?, ¿Quién rescato un prestado girasol de verdad solo para una lavanda?, ¿Quién le iba a confesar su amor a una lavanda?, ¿Quién quedó cómo un idiota en la hora de la alegría?–

El sabia que nada de esto iba a salir bien, pero... honestamente la euforia de causarle dolor a Catnao hacia que cada fibra de su cuerpo regresará a la vida.

–Acepto.–

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La epifanía de un eclipse. (DayNap)Where stories live. Discover now