Capitulo 33

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Narrador omnisciente:

Mattheo y Tom no podian creer lo que veían, el idiota de Cedric Diggory estaba evidentemente coqueteando con Sabrina.

La pelinegra solo intentaba ser amable con el, pero Diggory estaba literalmente comiendola con la mirada.

—Lo mataré.—Dice Mattheo para intentar dirigirse hacia donde estaban Sabrina y Cedric.

—Espera.—Dice Tom deteniendolo.—Tranquilizate, ya me desare de el.—Habla Friamente el pelinegro.

Mattheo observa algo anonado a Tom al ver la tranquilidad con la que este hablaba.

Lo que mattheo no sabia era que la mente de Tom ya estaba maquinando un plan para destrozar a Diggory.

Lo volveria pedazos.

Su sangre hervía, trataba de controlarse, pero le era imposible al ver como todos querían robarle a su chica.

Esta vez es el chico el que se dirige hacía donde se encuentran su novia y el castaño, Mattheo no lo detiene, en cambio se recuesta sobre una de las paredes para poder observar todo. 

En caso de que Tom necesitara ayuda no dudaria en dirigirse hacia el lugar, pero lo dudaba mucho, antes, estaba seguro que Tom no dudaria en lanzarle un avadava kedavra a Diggory, y Mattheo no pensaba interponerse en eso, antes, lo disfrutaria.

Al llegar al lugar Tom rapidamente  la toma por la cintura para besarla posesivamente, el chico dirigia el beso, apretando la cintura de Sabrina, la pelinegra habia sido tomada por sorpresa, pero no dudo en rapidamente seguirle el beso a Tom.

Al separarse Tom no quita su mano de la cintura de Sabrina para despues hablar.

—Lamento interrumpir, Sabrina, muñeca ¿Me podrias compañar un momento?

Ella rapidamente asiente.

—Pero, Sabrina.—Intenta quejar Diggory.

—Lo siento Cedric.—Se disculpa ella.

Los dos empiezan a caminar dejando al castaño atras.

Sabrina observa con una sonrisa al chico para despues hablar.

—¿Que sucede?

—El no me cae nada bien.

La pelinegra asiente para sonreir de nuevo, la verdad era que le gustaba ver el lado celoso de Tom salir a flote, teniendo en cuenta que el chico no demostraba sus sentimientos.

—Por favor Sabrina, aléjate de el.—Pide el chico demandante aún caminando.

La pelinegra no tenia ni la menor idea de hacia donde se dirigian.

—Tom...—Intenta hablar ella, pero Tom rapidamente los hace ingresar a un lugar.

El baño de prefectos.

Como era de costumbre este lugar se encontraba solo, en este solo se escuchaba la respiración acelerada de Tom, gracias a los celos.

—Malditase Sabrina sabes lo horrible que se siente saber que no tengo control cuando se trata de ti.

Sabrina Intenta hablar, pero por primera vez sus palabras no salen.

—Quería matar allí mismo al idiota de Diggory.—Confiesa el mientras sus manos se vuelve un puño.

La mirada de Sabrina se va en dirección hasta estos, observando como sus venas sobre salian por estos gracias a la fuerza, ella sabia que no era momento para estar pensando este tipo de cosas, pero aún así una sensación se paseo por su vientre bajo.

El corazón enemigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora