Till

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Till miró como la sangre manchaba sus zapatos, sentía como si su pecho se obstruyera.El recuerdo de la sonrisa en el rostro de Iván mientras caía hacía que su corazón doliera.   No entendía, él era quien debía morir, este era el día de su muerte, él lo sabía, todos lo sabían, pero al parecer Iván no estaba de acuerdo con eso.  

   

Pateo suavemente la mano de Iván, quería creer que era mentira.Sería cruel que Iván se sacrificara por él, no quería, no cuando él mismo regresó a Iván a este infierno después de no irse con él aquella noche de lluvia de estrellas.   -Vamos Iván, deja de bromear- gritó.   Sintió como sus ojos picaban cuando ninguna risa escapo de los labios de Iván, quería, anhelaba volver a escuchar esa burla que siempre caracterizó a ese tipo.   Pero no había nada.   Till podía sentir como aquella mirada que siempre había estado con él desaparecía. Finalmente comprendió de quien era.    Y dolía.    Sus piernas perdieron la fuerza y cayó de rodillas frente al hombre.Quizás, solo quizás Iván quería que Till lo despertara, como cuando él mismo era despertado por Iván.Toco el hombre del chico, sacudiéndolo de por medio.-Iván levántate, no es hora de bromear-Pero no había nada, ni una sola respuesta vino del otro hombre.   Sus ojos comenzaron a nublarse.Él había ganado, ganó esta partida de mierda, pero ¿a qué costo?No tenía a Mizi, y ahora, después de creer que no podía ir más bajo, perdió lo único que tenía, perdió al único amigo que le quedaba.Ya no tenía a Iván, ya no tenía a su compañero de peleas, aquel tipo que siempre lo seguía. Till estaba solo en este Infierno.   Pudo escuchar un grito atronador, lleno de dolor, por un tiempo no sabía de dónde venía, ¿quizás del dueño de Iván? Él sabía que Iván era su favorito, pero aun así dudaba, ¿será que ese alienígena quería tanto a Iván como para sufrir por su muerte?Pronto supo de dónde venía aquel grito, lo supo cuando lo intentaron separar del cuerpo de Iván, ese grito desgarrador y lleno de dolor vino de él.   Luchó para poder seguir sosteniendo el cuerpo de Iván, pero no importa cuánto peleó, aun así fue separado de él.   Y no lo entendía, él odiaba tanto como apreciaba a Iván, nunca pensó que la pérdida del chico le dolería tanto como le duele.   Quizás es porque sabe que todo es su culpa.   Si aquella noche no hubiera soltado la mano de Iván seguramente ahora estaría vivo, estarían juntos, tranquilos en un lugar apartado.Quizás serían felices.Pero ahora no queda nada, Till se quedó solo con un montón de preguntas y un enorme arrepentimiento.       Lo último que vio de Iván fue su rostro pacífico mientras se lo llevaban.Till no entiende cómo pudo morir tan feliz.            Habían pasado días desde que Iván se fue, días en los que no podía dormir porque la sonrisa ensangrentada de Iván aparecía en sus sueños, evitando cualquier descanso.   No importaba cuanto tiempo pasara, el corazón de Till seguía sangrando, más que cuando Mizi desapareció sin dejar rastro, más que cuando estaba preocupado por saber si ella estaba viva y bien.  Ahora su mente estaba llena de Iván, el chico se volvió en su sombra (Till en el fondo sabía que Iván siempre había sido como su sombra), un fantasma que lo atormentaba día y noche. 

   

 Llevó sus dedos a los labios, se preguntaba por qué Iván lo había besado, de tantas cosas que podía hacer para ser descalificado, ¿por qué besarlo cuando bien pudo estrangularlo desde el principio?    (Till quiso ignorar como su corazón dolía más al recordar el último beso fugaz que le dio Iván.)                    -Till despierta- 'Esa voz' pensó mientras abría los ojos y se paraba de la cama, su corazón latió pensando en que esa voz era real y no una de sus muchas fantasías, pero la realidad era cruel, su lado seguía vació, desprovisto de la presencia de aquel hombre, desprovisto de aquel calor.     Mientras trataba de evitar que las lágrimas volvieran a salir de sus ojos, notó una tarjeta tirada cerca de él, mirándola directamente notó que era una llave, más específicamente la llave de Iván  Se arrastró rápidamente hacia ella y la tomó entre sus manos, pensaba que quien sea que la dejó allí era por algo. ¿Quizás Iván le había dejado un mensaje en su habitación? Pero si ese era el caso ¿por qué esperar a que él siguiera pudriéndose en desesperación hasta aparecer?        Pero no importaba, mientras pudiera seguir las huellas de Iván él pensaba que estaba bien, para sentir un poco del calor que Iván le daba.      Para tener un poco de él.     (Su mente traicionera le gritó que nunca había prestado atención a cuantas cosas le dio Iván)    Cuando entró a la habitación de Iván notó que estaba casi vacía, solo tenía las cosas esenciales, y no entendía cómo era posible, no cuando el dueño de Iván lo adoraba tanto que le regalaba todo lo que podía.  Pronto le vinieron recuerdos de los muchos regalos que Iván le daba, ya que, en sus palabras, iban más con él.     Caminó, tratando de inhalar todo el olor que quedaba de Iván, era poco, pero hizo que su corazón doliente se aliviara un poco, aclaró su mente y lo hizo sentir seguro, tan seguro como no se había sentido en todo este tiempo en el que Iván no estaba. 
       Se detuvo al ver el dibujo que le había regalado a Iván cuando eran niños, cuando pensó en aprender a dibujar y dejar un rato la música, recordó como Iván le había dicho que era feo, pero que lo iba a guardar para no lastimar su autoestima.  Lo tomó entre sus manos y miró el rostro de Iván, recordó en su mente los ojos negros, desprovistos de calor (ignoró a su mente diciéndole que era mentira, que Iván nunca le dirigió miradas frías), pronto notó la libreta que Iván solía llevar, aquella que tiene todas sus canciones, aquellas melodías que había tarareado en las aquellas tardes en las que se sentaban en el césped.     La libreta estaba llena de canciones, muchas canciones llenas de dolor y melancolía, Till siempre pensó que esas canciones no debían ir con Iván, no cuando las canciones reflejaban un amor que nunca se dio.  Till ignoró como su corazón tembló mientras sus ojos vislumbraron Black Sorrow)     Pero pronto algo llamó su atención, haciendo que su corazón latiera con fuerza.     Era otra canción, como todas las demás, pero, a diferencia de las otras que tenían nombres melancólicos, esta solo tenía una palabra.     'Till'      Era su nombre.    

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⏰ Terakhir diperbarui: Apr 15 ⏰

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