Capitulo 13

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Han pasado ya los 10 días acordados, me siento tan lleno de energía. Por otra parte mi amada esposa finalmente dejo de quejarse y no volvío a cuestionarme. Parecía una hermosa muñeca, no hacía ningún ruido o gestó. Mantenía la vista totalmente perdida. A la hora de la intimidad era solo cuando oía y veía sus gestos de dolor. Esto me complacía demasiado.

Deje de quejarme ya hace unos días y solo acepte mi castigo.
Las violaciones dolorosas y sin piedad eran constantes en cada momento. Su nombre estaba en todo mi cuerpo hechos finamente con su navaja. le gustaba el dolor ajeno y propio.
Y de nuevo dejo de darme alimentos.
Según el, un vaso de agua era más que suficiente para mí.


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Casa de Gyutaro

Días atrás

Douma se había marchado hace unos días y yo continuaba con el cuidado de esta extraña mujer.
Baje como cada día al sótano para darle los alimentos correspondientes.

-ten aquí tienes -dije molesto.

-p...por favor- déjeme ....ir-

-He insistes con eso?- ya te dije que nunca saldrás de aquí a menos que él lo decida- ademas la vida de mi hermana también está en juego-.

-t... también tienes....una hermana?- le pregunte con esfuerzos.

-si, pero eso no te importa - así que cállate y come - ¿O necesitas ir al baño?.

-de...debieron tener una vida muy díficil -.

Me quedé en silencio pensando en su pregunta.

-s..si- ella lo es todo para mí- jure protegerla siempre -. Cuando estamos juntos los problemas desaparecen-.

-eres un buen hermano ella debe de estar muy orgullosa de ti, así que no dejes que nadie los lastime-.

-¿acaso tratas de terapiarme?- reí fuertemente. - eso no funcionara conmigo- adoro hacer lo que hago incluso si muero y reencarno, volveré como un matón-.

-n...no..no....yo no tengo esas habilidades - solo soy una mujer ordinaria-. Solo que me parecías alguien diferente con aspiraciones más grandes- pero respeto su decisión-.

Ella me dijo con la mirada totalmente perdida, por un instante empecé a sentir lo que jamás debes sentir por una víctima..."lástima".

-deja de decir estupideces y ya come-.

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Después de ese dia comencé a hablar más con ella, por alguna extraña razón, le contaba lo que me molestaba o angustiaba. ella era buena escuchando y dando consejos. Sin que me diera cuenta comencé a tratarla como trato a Ume. Ella pese a su situación mostraba mucha amabilidad, empatía y era muy obediente. Así que obte por desamarrarla.
Lo único que no cambiaba eran sus constantes mareos y náuseas.

-Oye, ¿por que insistes con lo de las vitaminas?-. Le pregunté.

Me quedé sorprendida ante sus palabras era evidente que no podía decirle sobre mi embarazo, aún no era seguro.

▪️SIN  SALIDA ▪️Where stories live. Discover now