CAPÍTULO 1: DONDE LA DIVERSIÓN INICIA.

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[Gala de la FIA de 2018, Francia]

Mi nombre es Stefano Jenkins, piloto de Ford en el campeonato de Rallycross

Estoy en esta ceremonia por dos razones.

1: mi hermano ganó el campeonato de F3.

2: yo quedé 3° en el Rallycross 2018.

Había bastantes pilotos que reconocía, en la mesa de la F3 estaba el Top 5 del campeonato. Vi a mi hermano, hacía tiempo había salido del rumor de su noviazgo con su compañero. Steve Clayton.

Pero en la mesa estaban distanciados, como si no se quisieran ni ver.

Aunque extrañado, no me importaba lo suficiente. Mi hermano era un estúpido de todas formas.

Nuestros padres se separaron cuando yo tenía 12, mientras mi madre se quedó conmigo. A Daniel le tocó mi padre.

Mientras presentaban a los campeones de Karting, aproveché a tomar unas copas. Este tipo de ceremonias me aburrían.

En un momento ví a una de las mesas, no supe bien de qué categoría era. Pero ví a una chica.

Pelirroja, ojos grandes y la verdad bastante atractiva. De repente, esos ojos hicieron contacto conmigo.

Sonreí y la saludé a la distancia, ella devolvió el saludo. Y decidí levantarme de la mesa e ir a hablar con ella. Total estaba a nada de tirarme a dormir.

Pasaba por mesas y mesas, estaban decoradas con manteles azules y centros de mesa de cristal. Todo iluminado por una combinación de luces blancas y azules.

La FIA tenía en claro su color. Cada vez que presentaban un premio las luces se apagaban y se reproducía un vídeo.

Luego de unos dos vídeos llegué a la mesa de esta chica.

-un placer -dije entregando mi mano para un saludo formal -Mi nombre es Stefano Jenkins.

-un apellido muy inglés para un nombre muy italiano no crees?- respondió de forma burlona la chica -Gabriella Vazzler, el placer es mío.

Nos pasamos el resto de la noche charlando, sobre diferentes temas, pero todos claramente. Sobre el automovilismo.

-creo que con esta tercera posición me bastará para ir a algún deporte importante, ya me siento preparando -comente y procedí a beber un poco más -¿Tu que harás?

Vaciló con la copa antes de responder -¿Yo? Lo tengo complicado, no se si sabes la situación femenina en el automovilismo -se tiró el pelo para atrás antes de continuar -pero todo lo que hago aquí es para demostrar que estamos listas.

Por lo que tenía entendido la última piloto mujer que corrió en automovilismo fue en 2006, 12 años.

-disculpa por la pregunta, no quería incomodarte.

-no te preocupes, es más normal de lo que piensas.

Lo pensé un momento y le dije.

-¿Sabes? Está ceremonia está siendo muy aburrida. ¿Te apetece irte?

-¿Auto? La miré confuso, ella rió y dijo -¿qué auto tienes?

-un Ford GT del 2017- se rió aún más -disculpa que el rallycross no pague tanto miss millonaria.

-Ferrari 458 Italia- la mire sorprendido -¿Quieres sentir la velocidad verdadera?

Antes de irnos pase por la mesa de Daniel y le di las llaves.

-haz algo estúpido y lo lamentaras -Un pequeño recordatorio para ese idiota.

Luego de eso me subí al auto de Gabriella.

-debo admitirlo Stefano -dijo mientras me miraba -tu país si que sabe de autos de lujo.

-tenemos más especialidades aparte de la pizza ¿sabes?- ella rió antes de acelerar el auto.

Al rato en un semáforo, ella se detuvo me miró y dijo -¿Sabes? No creí conocer a alguien tan interesante como tú.

Sorprendido le dije -La specialità della casa.

Y ahí la noche se volvió diversión pura, alcohol. Besos y... bueno mejor paro ahí.

La gala era en Francia, y ella vivía en Finlandia lo cual me género una duda mientras nos besábamos.

-espera -ella se separó del beso -si tu vives en Finlandia ¿Por qué tienes una casa aquí en Francia?

Se sorprendió -oh, es que está no es mi casa. Es la de mi gemelo-

¿Qué?

-Gabriella te llamé 5 veces -entro gritando en el piso de abajo -si vienes temprano a casa me debes avisar.

-yyyy aquí se acaba la diversión -ella se levantó rápidamente buscando su ropa -y te recomiendo que si quieres seguir con ambas manos hagas lo mismo que yo-

Me tiró contra la cama y me dijo que me haga el dormido, mientras ella charlaba con su hermano.

-ey, Nicholas ¿Qué tal estuvo?

-gabi, tú estuviste allí también.

-si ehh, sobre eso. En la fiesta había un chico que estaba un poquito borracho, así que.... Lo traje aquí al no tener otro lugar.

-¿Al menos sabes su nombre?

-si no lo recuerdo mal era Stefano Jenkins.

En ese momento sentí un tirón de mi camisa

-este no se queda aquí ni de broma -al fin pude verlo, era alto. Muy ancho de hombros también y pelirrojo.

-¿Y tú *hick* quién eres? -Intente actuar de borracho.

-deja la actuación Jenkins, el alcohol no se nota en tu aliento- debo admitir que esa habilidad me sorprendió del muchacho.

-Bueno bueno, una disculpa. ¿Cómo te va?

Me miró con las cejas fruncidas, parecía enojado

-¿Tienes forma de volver a casa? -Pese a su notable enfado, estaba siendo formal.

-si y no, mi coche lo tiene mi hermano y dudo que venga a buscarme.

Gabriella estaba a punto de decir algo cuando Nicholas lo interrumpió.

-No pienso dejarte llevarlo.

Ella hizo un puchero y se cruzó de brazos.

Dudo un poco, puso los ojos en blanco y dijo

-bueno, te dejaré pasar la noche aquí, pero más te vale irte mañana -antes de irse se dirigió a su hermana -más vale que no pase nada aquí ¿entendido?

Con una sonrisa de oreja a oreja ella asintió

RESISTIR ES LA CLAVEWhere stories live. Discover now