La mudanza

9 2 4
                                    

“Si no aprendemos a soltar, si no dejamos ir, si el apego puede más que nosotros y nos quedamos ahí atados, pegados a esos sueños, fantasías e ilusiones, el dolor crecerá sin parar y nuestra tristeza será la compañera de ruta

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

“Si no aprendemos a soltar, si no dejamos ir, si el apego puede más que nosotros y nos quedamos ahí atados, pegados a esos sueños, fantasías e ilusiones, el dolor crecerá sin parar y nuestra tristeza será la compañera de ruta.”
—Jorge Bucay.

Querido Peter:

Siempre he detestado los cambios. Esa incertidumbre de no saber qué te deparará el futuro, esa sensación de perder algo a lo que te habías aferrado con todas tus fuerzas, me aterraba. Por eso, el día de la mudanza, mi mundo se vino abajo. No quería dejar atrás mi casa ni a mis amigas. Sentía que pertenecía ahí, ¿sabes? Me había acostumbrado a esas niñas alocadas y simpáticas, al ruido de los vehículos y a la contaminación de la ciudad.

Recuerdo haber intentado convencer a mi familia de que no nos mudáramos. Les dije que no necesitaba un lugar más tranquilo, que nuestra casa era perfecta con todas sus imperfecciones. Pero en el fondo sabía que era lo mejor para ellos. Necesitaban un nuevo comienzo, una oportunidad para respirar aire fresco y dejar atrás los problemas del pasado. Y yo, aunque me costara aceptarlo, tenía que acompañarlos.

Cajas. Solo veía cajas, y la incertidumbre me carcomía por dentro. No sabía qué me esperaba en esa nueva ciudad, si haría amigos, si encontraría un lugar donde encajar.  Me sentía como un astronauta a punto de despegar hacia un planeta desconocido, llena de miedo y emoción al mismo tiempo.

Y mientras todos a mi alrededor parecían adaptarse con facilidad, yo me aferraba a los recuerdos, a las calles, a las caras que había dejado atrás. 

Siempre me ha costado soltar, Peter. Dejar ir las cosas, las personas, los lugares. Y esa mudanza, aunque necesaria, dejó una cicatriz en mi alma que aún hoy, después de tantos años, sigue doliendo.

Atentamente,
Wendy.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Apr 25 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Lo que quedó de nuestra historia ©Where stories live. Discover now