Pedido de MJ16637271 ♡
Espero te/les guste^
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Jugar Voleibol siendo chica en la Preparatoria Inarizaki era un dolor de trasero ya que se priorizaba el Voleibol masculino antes que el femenino y como no si era de admirar la manera en que jugaban, siendo el equipo más popular entre todos los demás deportes, sobre todo por los hermanos Miya, quienes al ser perfectos ante los ojos de las demás chicas lograban cautivar y emocionar en cada partido, consiguiendo así miles de fanáticas.
Siempre tuve celos de ellos, más de Atsumu por ser buen armador pero mi resentimiento hacia él venía por su ridícula perfección y su tonto comportamiento de competitividad.
Aunque lo único en común que teníamos era que odiabamos perder.
Mire la hora en mi celular y frunci el ceño al notar que el equipo masculino se estaba tardando más de lo habitual para salir. Habíamos quedado en que después nos tocaría a nosotras.
Sin cuidado alguno abrí la puerta, encontrándome con ellos aún entrenando. Confundida me acerque a su capitán, con el cual solía llevarme bien al ser él un chico tan amable.
—Shinsuke ¿Por que siguen entrenando? Habíamos quedado en que nos tocaría a nosotras hoy.
—Perdón pero el entrenador hablo con el director para que estos días entrenemos hasta tarde. —Dijo algo apenado. —Lo lamento.
—¿Y ella que hace aquí? —Demandó y me apuntó Atsumu mientras se acercaba a nosotros y en un rápido movimiento picó mi frente con su dedo. —Vete.
Toque mi frente, manteniendo mi ceño fruncido.
—¿Tienes cinco años o que?
Shinsuke se puso entre nosotros pero eso no evito que la discusión continuará.
—Chicos basta.
—¿Y si los tuviera que te importa? —Respondió con otra pregunta. —No tienes porque estar aquí.
—Claro que si ¿No oíste lo que estaba hablando con Shinsuke?
—Es que no me importa. —Sé cruzo de brazos.
—Por Dios eres como un niño malcriado.
Estiro su brazo y junto a ello su mano para dejarla frente a mi rostro —Habla con mi mano.
Mire a los demás reírse y el coraje invadió mi cabeza. Incluso sentí mis piernas temblar ligeramente al llenarme también de pánico.
—¿No quieres que este aquí porque tienes miedo que algún día te supere en el Voleibol? —Dije sin más.
El silencio se hizo presente.
—Te voy a matar.. —Antes de que pudiera terminar de insultarme Osamu lo detuvo, interponiendose entre ambos.
En los ojos de Atsumu pude sentir el enojo sobresalir. Me gustaba molestarlo hasta llegar a ese punto porque era divertido de verlo esconder sus sentimientos frente a los demás cuando sabía perfectamente que me quería moler a golpes aún siendo mujer.
—Esas palabras emanan mucha grandeza para alguien que siempre pierde. —Sonreí al ver la mirada furiosa del castaño.
—Un partido. —Dijo con seriedad. —El que pierda no volverá a poner un pie aquí.
Después el pánico volvió pero ahora era por perder. Sin decir absolutamente nada acepte al asentir con la cabeza y estrechamos las manos a pesar de que Osamu las intento separar. Estaba hecho, la decisión de una prueba que pondría un fin a nuestras diferencias individuales.
