Entre El Juego y El Corazón

Capitulo 3 - Sentimientos encontrados

Estas últimas semanas no he quedado con los chicos porque los examenes han consumido todo mi tiempo. He estado encerrada en mi habitación estudiando y estaba tan agotada que no tenía ni ganas de salir con Sira, aunque ella hubiese estado toda la semana casi obligándome a salir, pero yo me resistí y me quedé repasando todos los temas de los examenes.

Salí de mi último examen y la pantalla de mi móvil se encendió, me estaba llamando Sira:

- Lucííííía - me gritó mi mejor amiga

- Que pasa Sira - contesté un poco borde, ya que el último examen me había salido fatal y estaba bastante agobiada.

- Ya no tienes excusa amore, hoy hemos quedado con los chicos a pasar la tarde en casa de Pedri y Gavi, y tu te vienes - me ordenó Sira

- Sira no tengo ganas, solo quiero acostarme en la cama a dormir y no despertar - respondí con mal humor

- No era una pregunta - rió - te pasamos a buscar Ferran y yo a las cinco. Un beso Lucii - y me colgó

La iba a matar, mis ganas de salir eran inexistentes y hoy tenía pensado estar toda la tarde mirando series y pelis en mi casa con palomitas y con una manta bien calentita, que era lo que más me gustaba hacer en esta vida. Pero Sira me arrebató el plan perfecto que tenía, por salir con sus amigos, entre los cuales estaba Gavi, que cada vez soportaba menos. Era atractivo, guapo y estaba bueno, pero era insoportable. No paraba de decirme que era una aburrida por estudiar todo el día y tener mi futuro controlado, lo odiaba.

Sabía que aunque no me quisiese vestir y me quedase en la cama acostada con un pijama calentito, Sira vendría y me llevaría arrastrándome hacia casa de Pedri y Gavi. Así que me puse unos pantalones de chandal con un top un poco demasiado escotado para mi gusto, pero arreglarme era lo que menos me apetecía en ese momento, así que no me iba a cambiar. Me puse rímel para arreglar la cara a muerta que tenía y me senté en el sofá a leer un libro hasta que Sira llegase.

Como dijo Sira, a las cinco de la tarde ya estaba en mi puerta esperándome en el coche con su novio. Cuando salí de casa, se me lanzó encima para abrazarme.

- A ver, que solo llevamos 3 días sin vernos, Sira, tampoco te pases - dije casi sin respiración de tanto que me estrujaba con sus brazos.

- Ese día no cuenta, no parecías ni tu con esas pintas que me llevabas

Sira vino algunos días a ayudarme a estudiar en mi casa y como era lógico, no me iba a arreglar para estudiar, así que tenía razón con eso de las pintas que llevaba.

- Gracias eh - dije rodando los ojos

Saludé a Ferran cuando subimos al coche y nos fuimos de camino a casa de Pedri. Cuando llegamos, nos abrió Fermín con su tierna sonrisa de siempre.

- ¡Lucía! ¡Cuánto tiempo! - me dijo abrazándome

Entré en la casa y me saludaron todos con un abrazo menos Gavi. Solo cruzamos las miradas pero yo la quite rápido porque no tenía ganas de hablar con él. Con el día que llevaba, no me apetecía tener que soportar sus comentarios.

Pasamos la tarde juntos, los chicos jugando al FIFA y Sira y yo hablando y riendo de los enfados de los chicos jugando.

- Oye chicos, ¿tenéis hambre? - dije

- Sí, ve a buscar comida a la cocina - respondió Pedri

Fui a buscar comida a la cocina como me había dicho Pedri. Decidí preparar sandwiches, y cuando acabé de prepararlos, los puse todos en una bandeja. Cuando me giré para ir hacia la puerta, choqué con un cuerpo y se me cayeron algunos sandwich al suelo. Cuando miré hacia arriba, vi que, como no, era Gavi, siempre jodiendo. Lo miré con mala cara y me agaché a cojer lo que me había caído.

- ¿Que haces aquí? - pregunté con mala gana

- ¿Ahora no puedo estar en mi cocina? - me preguntó burlón. Se agachó a ayudarme y cuando vio mi expresión, añadió - Vine a ayudarte a llevar esto

- No necesito tu ayuda, ya puedes irte - respondí con el tono más borde que pude

Cuando levanté la mirada, vi que su mirada estaba en mi escote, cosa que me molestó muchísimo. Además de creído, cerdo. Me levanté rápido y coloqué los sandwiches en la bandeja otra vez.

- ¿Porque estás tan borde Luci? - me dijo con una sonrisa divertida

- No me vuelvas a llamar así - respondí

Estaba girada en dirección contraria a él y cuando note que se acercaba hacía mí, me giré, enfrentandole. Me sorprendí porque no me lo esperaba tan cerca de mí, y sin querer, me empecé a poner muy nerviosa de tener las caras tan cerca.

- ¿Qué harás si lo hago? - se acercó tanto a mí que nuestras narices casi se tocaban.

Ya me estaba cansando de su comportamientod chulo, así que me acerqué para besarlo y justo cuando nuestros labios estaban a milímetros, aparté la cara en un movimiento rápido. Noté que Gavi se sorprendió, y, para no seguir más con esa conversación, cojí la bandeja y me fui hacia la puerta. Cuando estaba ya en la salida de la cocina, añadí:

- No te creas tanto, Gavira.

Y con eso salí de la cocina y me fui con el resto del grupo.

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Holaaa chicass, comentad que os está pareciendoo💕💕