El nudo del destino

14 2 0
                                    

Leyendo esas dos perspectivas os podéis imaginar que nos hicimos mucho daño. La pregunta es, ¿cómo dañas a alguien sin ni siquiera darte cuenta?

Estamos conectados. Todos de alguna manera estamos unidos por un hilo, y este, en algunos casos, es más largo que los otros. Por eso mi unión con Beyoncé es inexistente —de momento—. Y a veces, sin ningún movimiento del destino, es muy difícil encontrarse. Por eso, no estoy segura de que si lo nuestro fue un simple empujoncito de pura casualidad o algo más grande, tal vez nuestro lazo siempre había estado más cerca de lo esperado. Pero esas cuerdas siempre tienen nudos y, desgraciadamente en nuestro caso, estiramos tan fuerte de la cuerda, que no nos dimos cuenta del gran lío que estábamos creando. El hecho de estar tan cerca y no poder tocarnos por culpa de ese nudo, nos hizo querer usar la tijeras para deshacernos de él. Lo que no sabíamos, era que estábamos cortando toda nuestra historia

LA CHICA QUE LE GRITABA AL SILENCIOWhere stories live. Discover now