Encontrando Mi Alma {editando}

Capítulo 43: Despertaste (tercera y ultima parte del maraton)

{Dos meses después}

— No esperaba que fuera a pasar tanto tiempo, animalito sigo aferrada a la idea de que despertaras, pero cada vez me cuesta más mantener mi esperanza del todo intacta —confieso tomando su mano entre las mías—, pensé que no te tomaría tanto tiempo regresar, pero es un pensamiento egoísta, ya que tu tienes razones para no querer volver... aun así, recuerda que tienes personas la cuales se preocupan y esperan por ti —le recordé tragándome un sollozo, ya que no quiero llorar en su presencia, porque sé que él puede escucharme y no quiero que piense que lloró por su culpa

Desde que nos informaron del coma de Jareth, mi mundo se empezó a destrozar frente a mí sin que me diera cuenta y por esa razón termine internada en el hospital debido a la falta de alimentación, deshidratación y otras cosas que estaban afectando mi embarazo, al punto de tener que toman vitaminas para que los bebés pudieran resistir la crisis que estaba teniendo. Semanas después de que me internaran, entendí que solo estaba haciéndome daño y también a mis hijos, cuestión que me hizo recapacitar y empecé a comer mejor, deje de negarme a ver a mis amigos y empecé a hablarle diario a mi hermano con la esperanza de que algun dia abra los ojos. Mis padres empezaron a seguir con su rutina agregando las visitas a mi hermano, pero luego de un tiempo ellos empezaron a creer que lo mejor seria desconectarlo de las máquinas que lo mantienen respirando. Para ellos mantenerlo "'viviendo" por medio de unos aparatos es hacerlo sufrir aun mas y obligarlo a vivir una vida que para él ya no tiene sentido, pero yo más que nadie, se que para él no es así, porque el es un caprichoso y impaciente hombre, el cual no se da por vencido tan fácil y tengo por seguro que en cuanto despierte se recupera e irá por su mate, cueste lo que le cueste

Soy la única persona por la que el aun sigue conectado y aunque después de dos meses viéndolo en un profundo sueño, tengo la fe en que el se levantara, conocerá a sus sobrinos, recuperara a su alma gemela y tendrá la misma felicidad que yo experimente en su momento y sigo experimentando. Se que es un pensamiento egoísta de mi parte retenerlo así, pero no voy a dejar que el se vaya de este mundo de una manera tan triste, que solo hará que las personas se lamente y sienta lastima por un hombre que es aún más valiente que la mayoría; se que el tal y como siempre luchara por todo lo que a logrado y por todo lo que le falta por vivir, aunque tenga que esperar, el lo hará como siempre lo a hecho

Salgo de mi habitación una vez termine de comer y la enfermera me dice que me acompañara debido a que no puedo estar sola por el riesgo de mi embarazo. En el último examen que fue hace dos semanas, nos dijeron que algo raro estaba sucediendo con los bebés; para el tiempo que lleva el embarazo ellos ya están terminando de desarrollarse y de alguna manera extraña el parto sería máximo en unos días más. Al hacer cuentas nos dimos cuenta de que solo tengo seis meses de embarazo y con este tiempo sería un parto prematuro, así que la doctora decidió hacer varios exámenes, llegando a la conclusión de que era por la sangre de lobo que está mezclada con algún ADN que no ha podido descifrar, el crecimiento de los niños a sido más acelerado de lo normal, situación que nos preocupo porque no sabíamos si al momento de nacimiento, ellos nacieran con algún defecto genético o alguna enfermedad, pero la doctora nos aseguró que era muy poco probable que eso sucediera, así que nos quedamos un poco más tranquilos

— ¿Sabes...? Nunca pensé que algún día estaríamos así —aseguré tomando la mano de mi hermano, la cual está tibia—. Se suponia que deberia estar en casa recibiendo mucho amor, pero tengo que estar aquí por mi irresponsabilidad de madre primeriza

Rei para mi al no tener como excusar mi comportamiento un tanto inmaduro, y también al imaginar la regañiza que me hubiera dado mi hermano si supiera que me descuide tanto como para tener que pasar casi dos mese en un hospital por no ser responsable y cero cuidadosa conmigo misma

— Creo que no vas a perdonarme si te dijera que hice a mamá y papá llorar por no querer cuidarme... No se que fue lo que pasó, pero me porte de la peor manera con ellos a pesar de que lo están pasando igual o peor que yo... Espero que cuando despiertes me entiendas, aunque no sea excusa para lo que hice, se que tu vas a entenderme —me acerque para apoyar mi cabeza en su pecho con las lágrimas al borde de derramarse—. Ya tenemos los nombres... Zelene, Lyall y Conan

Hice una pequeña pausa para calmar el llanto que estaba apunto de derrumbarme, pero recordé que estaba aquí por una razón. En seguida saqué la carta que nunca pudo leer por lo que pasó, peroa hora es momento de que la escuche

— Se que no debería leerla sin tu permiso, pero... ya es hora de que la escuches...

"Mi salvador...

La verdad es que no se como empezar con esta carta, y si, ya se que es muy cobarde de mi parte hacer esto de esta manera, pero no encontre otra manera de enfrentarte y creo que esta fue la mejor manera, ya que, si llegaba a hacerlo en persona, no me hubieras dejado ir y yo no podria dejarte.

Si estoy haciendo esto es porque quiero devolverte lo que has hecho por mi en estos meses, y sacrificarme por ti es la mayor muestra de agradecimiento que puedo darte; si llegas a odiarme por esto, solo te pido que... si volvemos a vernos, ese odio se haya extinguido y puedas entender porque lo hice...

Fuiste mi mayor razón de felicidad, una fuente de los deseos la cual tuve suerte de encontrar, ese parche que necesitaba para dejar de sangrar... Nunca supe que era el amor, siempre viví rodeada de muertes y sangre hasta que me di cuenta de que no era feliz en ese mundo sin sentimientos. Tu me hiciste sentir, me hiciste querer ser feliz y si a esto que tenemos se le llama amor, entonces te amo de todas las formas existentes; te amo con cada célula, con cada poro, con cada parte de mi ser... Y esta es una de las maneras en que puedo amarte aunque sea dolorosa, apartandome de ti y dejando que vivas tanto tiempo como te sea posible hacerlo

"amar es dejar saber ir" de esta manera te amo, dejándote ir para que seas feliz y pleno sin correr ningún riesgo... te amo de la única manera en que me enseñaron a amar. Tu vida y la de muchos a cambio de la mía, es un precio que estoy dispuesta a pagar con tal de verte feliz.

Gracias por darme la oportunamente y privilegio de amarte, Jareth McAllen...

Te ama: Michelle"

— Bien, creo que con esto tienes más que suficiente para querer despertar... ¿no es así? —dejo la carta en su pecho y tal y como lo recordaba, rozó nuestras narices para calmarme—. Despierta pronto hermanito... te necesito muchísimo

Cuando me pongo de pie, e intentó avanzar siento como un chorro de agua me salpica en las piernas, un dolor punzante se hace presente y enseguida se que es hora

<<Mis hijos van a nacer>>

— ¡Enfermera! —llamo con desesperación al ver que nadie estaba cerca—. ¡Alguien por favor, mis bebes van a nacer! —intento caminar a la puerta, pero me detengo justo cuando siento un fuerte agarre en mi muñeca

Mi respiración se pausa y mis pelos se ponen de punta, todo en el lugar se paraliza cuando, a ojo cerrado miró en dirección a la cama y con lo primero que veo, son los ojos verdes de mi querido hermano. Sin que pueda evitarlo mis lagrimas salen y una sonrisa enorme se dibuja en mi rostro, su expresión es suave y su mirada es directa, su tacto es suave pero firme. Las piernas me tiemblan y la voz no logra salir, mi tiempo se detiene, pero todo se vuelve a mover cuando él mueve los labios

— Pulga... —su voz es gruesa, como todas las mañanas en que iba a mi habitación—. Pulga, ¿por qué lloras? —mi llanto se hace más fuerte, el cual se mezcla con risas, hasta que el dolor vuelve a hacerse presente—. ¡Por la diosa, pulga vas a dar a luz! —avisa sorprendido, enseguida se levanta de la cama como si nada y me recuesta en su lugar—, tranquila, llamare a alguien para que te lleven al quirófano

— Despertaste... —afirmó para mí misma mientras sostenía su mano—. Hermano, despertastes —repito, mientras la atraigo a mi para envolverlo en un abrazo

— Claro que desperté... ¿esperabas que durmiera toda la vida? —dijo con obviedad y yo reí ante su mal chiste, pero él se apartó y me dio un beso en mi frente—. Debo buscar a alguien que nos ayude, estás a punto de tener a mis sobrinos —asentí aun con una sonrisa en los labios. El, enseguida salió corriendo del lugar pidiendo ayuda